Tobe sale de la aldea de sooga y años después se encuentra a Pucca, sola y triste, en ese momento le tiende la mano cuando ella mas lo necesita.
Algo comienza a crecer entré ambos, pero la sombra de Garu, le atormentando emocionalmente.
Ahora ella s...
denle amor, casi llegamos a la culminación de este pequeño arco. Espero que sea de su agrado.
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—¡buenos días a todos!, como bien saben, nuestra señora vicepresidenta, se encontrara muy ocupada con la logística de los preparativos en el salón y afinar los detalles con nuestros presentadores, el guion del mismo ya fue entregado a ambos y están más que emocionados por la oportunidad que se les está brindando por salir en cadena nacional.
—gracias Lu, puedes sentarte— Tobe dejo su teléfono de lado —quiero un informe detallado del estado de nuestro evento, así como la lista de los invitados que nos honraran con su presencia— lucy paso la carpeta con la información solicitada, el magnate la abrió y se dedicó a revisar la lista. Una mueca de desagrado se formó entre sus labios, Garu encabezaba la lista.
—no podemos dejarlo fuera, es el invitado de la jueza Ring-ring— su secretaria, atino a decir, sabía de ante mano que ese nombre era lo que menos le gustaría ver a su jefe, pero se encontraban atados de mano.
—no te preocupes, Merio— busco entre su ropa —tengo una tarea muy importante para ti.
—¡ah! Yo— se señaló así mismo. Esa mañana se encontraba muy distraído por la repentina carga de trabajo.
—esta memoria USB tiene que ser entregada directamente al departamento de hackers, con las siguientes indicaciones de este sobre— tomo, un sobre amarillo y metió la USB dentro de él. Se la entrego y se levantó de su silla, para dar por terminada la reunión.
—¡Sr.!— lo llamo lucy —la señora chief y sus hermanos también están entre los invitados.
—de ellos me ocuparé después, no te preocupes, les tendremos algo preparado. Duerman bien, alisten su mejor ropa y prepárense para el gran día de mañana. A pesar de estar acabando con los detalles mínimos, Tobe se sentía triste, su amada Pucca no se encontraba a su lado y sus hijos tampoco. Pero una parte de él, estaba muy contenta por qué cada cosa estaba acomodándose en su lugar. Garu ya no sería un problema para ellos, Chief había sido obligada a pagar por su pecado y Ring-ring, encontraría la desgracia a manos de alguien desconocido.
Tobe, camino orgulloso hasta su oficina, una vez entro, se acercó hasta el gran ventanal, perdiendo sus pensamientos en aquel vasto horizonte. Suspiro, sintiéndose completo, esa dicha de tener una buena mujer a su lado y un par de hermosos hijos, por los cuales, había dejado de sentirse tan acomplejado y había dejado de decir que aunque no fueran su sangre y su carne, los amaba. Por propia convicción, dejo esa dos palabras de lado, para solo amarlos como se lo merecían, falso o no estaban casados y tenía sus apellidos, nadie en este mundo, podía decir lo contrario. Agradecía que ese secreto, solo estuviera en manos de cinco personas, cien por cien, fieles en seguirlo, hasta las últimas consecuencias.
—Así entenderán que no deben meterse con Pucca y mi familia, solo son insectos insignificantes a los cuales puedo aplastar, si me place— sonrió de lado, mostrando una sonrisa zorruna y una mirada afilada. Mientras apretaba su puño con superioridad.
