32. UN VEREDICTO

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LUCAS

Sofía había hablado y todos los allí presentes estábamos en shock.

Pero la más afectada por la confesión fue Amanda. Su amiga, cómplice, pareja, expareja, ya no sé, la había delatado. Su abogado también estaba paralizado, no contaba con que los declarantes declararan.

La jueza seguía apuntando cosas en los informes, todos esperábamos el siguiente paso.

-¿Abogada, tiene alguna pregunta más?

-Ninguna, me sirve. Gracias, señoría.

La abogada de M.ª Carmen chocó los cinco con su compañero al regresar a su asiento. Se les veía con aires ganadores, tenían todo bajo control.

-Abogado de la acusada, ¿algo que añadir?

-Por supuesto. -el chico se quedó mirando a las dos pobres e inocentes personas sentadas en el estrado- Señor Óscar Sanz, usted dice que no conocía a Amanda, y mucho menos a la víctima. ¿Es eso cierto?

-No.

No dudó ni un segundo en responder al abogado. Contestó la verdad y nada más que la verdad, tal y como había jurado ante la Biblia.

Sofía lo miraba satisfecha, Amanda le lanzaba rayos X por los ojos. Se le complicaban las cosas por momentos, todo iba en su contra. A no ser que su caro abogado tuviera un as en la manga, el caso lo tenía más que perdido.

-Prosigamos, por favor.

La jueza cada vez estaba más fuera de quicio. Creo que ella también deseaba que Amanda fuera declarada culpable.

-Lo siento, señoría. Sofía Gil, usted conocía a la acusada desde tiempo atrás. ¿Cierto?

-Protesto. Pregunta anterior no resuelta.

-Protesta aceptada, señor Sanz, especifique su respuesta.

Óscar estaba inseguro de lo que iba a hacer, pero de todos modos habló:

-Sí que conocía a Amanda, ella y la prima de Sofía eran amigas, también eran amigas de un compañero y buen amigo mío del trabajo. Éste y la prima de Sofía eran pareja y, por tanto, habíamos quedado los cuatro alguna vez.

Dijo "eran pareja", no "son". Al parecer todo el mundo tenía asumido que no teníamos futuro.

Mi compañero siguió con su confesión:

-A la víctima no la conocía, no entraba dentro del plan herir a nadie.

¿El plan? Por lo visto, dijo algo que no debió salir de su boca, ya que el abogado, Sofía y Amanda se quedaron sin aliento. La jueza quiso saber más y preguntó:

-¿Ha dicho plan? Señor Sanz, debe explicar a qué se refiere.

-Protesto, pregunta irrelevante. -exclamó el abogado con la voz temblorosa.

-Denegada. Pregunta la señoría y por tanto se responde. Señor Sanz, respóndame.

Óscar respiró hondo varias veces mientras miraba a Sofía, que le asentía con la cabeza invitándole a que hablara.

-La señora Amanda Moreno contactó conmigo a principios del año pasado para iniciar un plan de venganza. Ella sabía que yo era compañero de Lucas, la pareja de su mejor amiga, del cual estaba enamorada pero Alicia, su amiga y la prima de la señora Gil, había conquistado a Lucas.

El hecho de que hubiera empezado a desvelar nombres, nos implicaba de manera más directa, a Ali y a mí, en el caso.

-Lucas, por temas laborales, -prosiguió mi amigo- tuvo que mudarse a Canadá y Alicia fue con él. Fue ahí cuando Amanda empezó con su diabólico plan: hacerles la vida imposible y sobornar a quien fuese necesario para conseguir lo que quería.

Volví por míDonde viven las historias. Descúbrelo ahora