Matrimonio Desatendido (ABO)

Capítulo 1

Tan pronto como terminó el trabajo al mediodía, Shen Feiyu se apresuró a caminar con su pequeña mochila, tenía los ojos brillantes como si fuera un fantasma hambriento recientemente renacido. Cuando llegó al asiento de Ye Zhi, se apresuró a decir: "Rápido, hermano Ye, no comí mucho en el desayuno, así que me he estado muriendo de hambre toda la mañana. ¿Qué comida deliciosa has traído hoy? Dame un poco, también podemos intercambiar si gustas".

Ye Zhi se frotó la frente que estaba ligeramente dolorida, y luego levantó lentamente la cabeza. No usaba gafas y su rostro se veía muy sumiso. Aunque no es sorprendentemente hermoso o guapo, no se podría decir tampoco que es feo. Debido a su tez blanca, es fácil que se quede atrapado entre la multitud como uno más del montón. Y en estos momentos estaba un poco confundido, "¿Es la hora de receso?"

"Por supuesto, ¿no has visto que casi toda la gente de la oficina se ha ido a almorzar? Eres el único que trabaja tan duro, no te he visto inactivo en toda la mañana ¿no tienes hambre?". Shen Feiyu murmuró mientras ponía su maleta en la mesa. Abrió la cremallera y sacó la caja de bento que había puesto dentro a primeras horas de la mañana.

Ye Zhi hacía tiempo que se había acostumbrado a su actitud despreocupada, y no expresó su disgusto por su comportamiento, sino que dijo con amabilidad: "Tengo un poco de hambre, pero primero iré al baño a lavarme las manos".

Cuando volvió del baño, Shen Feiyu ya había abierto la caja de bento de Ye Zhi y utilizaba una cuchara para echar arroz a su propio cuenco, mientras que con la otra mano masticaba un rollo de frejoles de judías con plátano, de tal modo que las comisuras de su boca estaban llenos de migas de comida. Cuando lo vio, simplemente levantó los párpados y suspiró: "Tu arroz con omelet de hoy está realmente delicioso, también esta muy bien elaborado y decorado. ¿Por qué eres tan atento con algo pasajero?"

Shen Feiyu ya había estropeado la tortilla con forma de girasol de su caja de bento, y la mayoría de las judías verdes que decoraba el plato habían desaparecido. Shen Feiyu cogió otro rollo de primavera de la caja de bento de Ye Zhi y luego lo sustituyó con un poco de arroz de su propia comida.

En comparación con la caja de bento de Ye Zhi, que estaba llena de sabor y buen aroma, la comida de Shen Feiyu no era muy sabrosa, ni tenía buen aspecto, ya que parecía que eran sobras fritas de varios días anteriores.

Ye Zhi le impidió que le diera más de sus sobras y dijo: "Con eso es suficiente para mí".

Shen Feiyu no fue demasiado cortés y se rió: "Siempre comes tan poco, ¿es para mantenerte en forma?" Luego añadió con suspicacia: "¿Tienes niños viviendo en casa? Si no es así ¿Por qué traes un bento con una forma tan bonita? Toda la comida parece adecuada para un niño".

Ye Zhi asintió suavemente aunque no esperaba que él estuviera interesado: "Sí, tengo un niño en casa".

Shen Feiyu se rió y preguntó: "¿Tú lo diste a luz?" Pero rápidamente negó con una sonrisa: "Estoy bromeando, ni siquiera estás casado, ¿De dónde sacarías un hijo propio?".

Ye Zhi, quien había alzado la cuchara, hizo una pausa antes de decir: "Estoy casado".

Cuando Shen Feiyu escuchó estas palabras, se sorprendió tanto que se atragantó, ahogándose hasta el punto de que su cara se puso roja.

Ye Zhi se apresuró a entregarle la taza con té del escritorio.

Shen Feiyu bebió un sorbo de té antes de calmarse, sus ojos eran tan grandes y redondos que sus rasgos parecían muy infantiles, a pesar de que ya tenía veintidós años. "¿De verdad estas casado? No he oído nada al respecto".

Aunque sólo llevaba tres meses en la empresa, había escuchado todo tipo de chismes, sin embargo nunca había oído que Ye Zhi estuviera casado.

De hecho, aunque Ye Zhi es un antiguo empleado de esta empresa, su presencia es extremadamente débil. Es silencioso, es él que hace más trabajo, y es él que no compite para nada por el crédito o un ascenso. Además, es solo un beta ordinario, que no tiene nada de atractivo en su persona. Incluso su escritorio está en la esquina más alejada, así que si no es completamente necesario, sus colegas de trabajo no irían a saludarlo o a hablar con él.