So Mine [Yandere! Uchiha Shisui]

III. Retroceso

La primera vez que Shisui la vio, fue cuando tenía doce años y estaba en una misión de escolta.

Elise era toda una celebridad dentro de Konoha, su música tenía un efecto calmante en todo aquel que la escuchara, emocionaba a las masas, conmovía a las personas hasta las lágrimas y el corazón de los shinobis que escuchaban su melodiosa voz quedaban irremediablemente hechizados.

Shisui no fue la excepción.

Al principio, Shisui solo sabía que iba a escoltar a una cantante famosa de Konoha durante tres meses en su "gira" entre pequeñas aldeas civiles. Sinceramente, creyó que era un desperdicio de sus habilidades ninjas, en especial porque los pocos "artistas" con los que había tenido la desgracia de interactuar, eran extremadamente arrogantes e idiotas, se creían lo máximo cuando ni siquiera podrían sostener una conversación agradable que no rondara sobre ellos o sus "logros" más de cinco minutos.

Pensando en que iba a ser una niña mimada (porque ciertamente no cualquiera paga una misión de rango A para escolta cuando solo eres un civil), arrogante, déspota, critica, egoísta y chillona, con un ego que podría desafiar a los mismos dioses o tal vez una descerebrada que empezaría a coquetearle a algunos Shinobi, Shisui estaba preparado para lo peor.

Y contrario a sus expectativas pesimistas, Elise era todo lo que cualquier shinobi hubiera querido para una misión de escolta. Era amable, les ofrecía agua y refrigerios cada tanto, de vez en cuando tarareaba alguna melodía que los dejaba un poco atontados a todo su grupo de escolta, obedecía cualquier sugerencia que le hicieran por su bien, no se tomaba a mal algunos comentarios que a veces sonaban un poco más duros y, en general, era un cliente cinco estrellas.

Ninguno de sus escoltas shinobi y él podía entender porque alguien querría atacar a una niña (bueno, tenían la misma edad, pero en el sistema legal, al graduarse como genin él era considerado un adulto bajo el escrutinio shinobi) tan dulce y carismática como ella.

Bueno, al menos hasta que tuvo su primer concierto y entendieron de qué tendrían que cuidarse.

La voz de Elise, si bien había sido agradable durante el trayecto, simplemente no se podía comparar a cuando se paraba en un escenario, las masas acudían a ella como un ganado hipnotizado, todos gritando, desmayándose y alabando la hermosa voz de la chica.

Pero de nuevo, estaban en una misión de escolta, seguridad y protección, ciertamente no encontrarían algo agradable en su misión y eso se vio reflejado claramente cuando tanto él como sus compañeros shinobis tuvieron que detener a varios pervertidos que de alguna manera lograban meterse en los sets donde Elise se cambiaba de ropa, también tenían que hacer de barrera humana porque sus fans estaban completamente enloquecidos por ver de cerca a su ídola frente a ellos.

En resumen, si su cliente era cinco estrellas, sus fans hacían que su misión fuera un gran golpe de mierda.

¡Era una niña, por dios! ¡Tenía doce y señores espeluznantes estaban sonrojados intentando tomarles fotos desde todos los ángulos! ¡Incluso intentaban sacarle fotos debajo de su falda o intentaban aprovechar sus altas estaturas para intentar sacar una foto de su inexistente escote! -no es como si no tuviera senos, es solo que por su propia seguridad Elise les dijo que prefería las ropas que no mostraran mucho su piel, pero en casa o entornos seguros adoraba la ropa fresca- ¡Algunos gritaban cosas como matrimonio y esas mierdas raras! Shisui ciertamente estaba perturbado.

Incluso si no era su culpa, Elise se disculpó con ellos por la actitud de esa jauría de pervertidos espeluznantes y les entregó un paquete de galletas horneadas por ella misma, junto con algunas cosas coleccionables que les informó que podrían revender a un muy buen precio si es que no eran especialmente de su agrado. Discos firmados por ella, álbumes, revistas, incluso un pequeño libro de no sabía qué, pero que fue escrito por ella a mano y tenía su firma y foto, junto con pines, algunas muñecas entre otras cosas.