47. La llegada de los zombis.

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Una vez vendadas las heridas, los dos se sentaron en un rincón, y escucharon los gritos del asentamiento.

Zhang Zhi sacó dos botellas de leche y compartió una con Qin Chi.

Qin Chi estaba preocupado, sin saber qué hacer a continuación ni dónde estaban Lao Yuan y los demás.

El terremoto no solo causó víctimas humanas, sino que las consecuencias más graves aún estaban por venir.

Debido a que las tropas estacionadas en esta área originalmente se dirigieron a rescatar a las personas atrapadas en varios lugares, muchos que habían sobrevivido a la catástrofe pasaron por alto los puntos de control y se dirigieron directamente hacia el centro de la ciudad.

Las personas comunes no tenían armas ni equipo resistente, por lo que era una locura pensar que podrían atravesar la ciudad de manera segura y llegar a la puerta sur.

La ignorancia no importaba, pero después de morir, una gran parte de esas personas se convertirían en zombies, lo que dificultaría aún más la tarea de exterminarlos y recuperar así la ciudad de Luo.

La situación en la ciudad empeoraba cada vez más, y si no salían de la ciudad pronto, no sabían cuántos problemas más les esperaban.

El terremoto llegó repentinamente y tanto Zhang Zhi como Qin Chi no tuvieron tiempo de llevarse sus mochilas y teléfonos móviles, pero afortunadamente la caja de almacenamiento espacial todavía estaba colgando del cuello de Zhang Zhi, de lo contrario, habrían perdido todo de la noche a la mañana.

Los temblores continuaron y el clima era anormal. Durante ese tiempo, más personas se convirtieron en zombies y atacaron a los vivos.

La actual ciudad de Luo era probablemente más aterradora que el infierno.

Zhang Zhi volvió a sacar dos mochilas de su almacén espacial, las llenó con medicamentos y alimentos, y se puso una chaqueta impermeable y resistente a los arañazos.

"Zhi Ge, ¿puedes moverte?" Qin Chi estaba muy preocupado porque Zhang Zhi tenía una herida grave en el muslo, donde se le había raspado toda la piel.

Qin Chi la desinfectó con cuidado y la vendó adecuadamente.

Zhang Zhi movió la pierna y tranquilizó a Qin Chi. "Estoy bien". Aunque le dolía un poco, no le impedía moverse.

Qin Chi asintió con la cabeza y los dos se dirigieron hacia el centro de refugio.

Los médicos y enfermeras del centro estaban muy ocupados y no se dieron cuenta de la presencia de estas dos personas.

Pero justo cuando Qin Chi estaba a punto de entrar, buscando un lugar tranquilo para que Zhang Zhi descansara, vio a lo lejos un grupo de "personas" acercándose, lentamente entre las débiles luces.

Las figuras distorsionadas, tambaleantes y acompañadas de rugidos salvajes, ¿eran humanos?

Qin Chi contuvo la respiración, retrocedió un paso y gritó: "¡Sin zombies, ¡corran!"

La noticia se propagó de inmediato por el caótico centro de refugio. Los pacientes gritaron y clamaron por escapar del lugar, mientras que el personal médico, con la ayuda del ejército, trasladaron a los heridos graves a los vehículos militares para evacuar el centro de refugio.

Las tropas armadas que estaban estacionadas dispararon contra la horda de zombies que se acercaba, pero eran demasiados, llegaban en grupos numerosos y densos. A menos que se les volara la cabeza, no dejaban a ningún superviviente ileso, incluso si les faltaban extremidades.

No había suficientes vehículos militares para evacuar a todos de una sola vez.

Algunas personas con heridas leves tuvieron que ser dejadas atrás, esperando a que los vehículos militares regresaran después de llevar a los heridos más graves a un lugar seguro.

Pequeño lobo arrepentido.Where stories live. Discover now