Pequeño lobo arrepentido.

108. Forasteros.

Preocupados de que el zombi rojo sangre no estuviera completamente exterminado, Lao Yuan y Qin Chi prendieron fuego y quemaron toda la carne, sin dejar ni un solo rastro.

En el camino de regreso, Xie Yuzhao y su hermano remaron el kayak, ambos inquietos por la escena que habían presenciado.

Si no fuera por Lao Yuan y Qin Chi, que los habían acompañado, probablemente ya se habrían convertido en comida de esos extraños zombis.

Nadie habló en el camino, cada uno perdido en sus propios pensamientos. Cuando estuvieron cerca de las casas, los hermanos Xie fueron primero a buscar un nuevo kayak, mientras Qin Chi y Lao Yuan remaban hacia su propia casa.

Lao Yuan no agarró más peces del kayak, y solo dijo que a su familia no les gustaba mucho, después de todo, ya tenía suficientes peces en el espacio y no cabían más en el refrigerador.

Xie Yuzhao estaba muy avergonzado. Pensando que se estaba aprovechando, quiso darles más, pero Lao Yuan siempre se negó, y no hubo nada que pudiera hacer al respecto.

Después de regresar a casa, invitaron a los demás a ver la nueva piedra de cristal.

Excepto por Zhao Fengnian, que estaba durmiendo arriba, todos los demás se reunieron alrededor de la mesa para observar la gema.

Lao Yuan sostenía una lupa y, frunciendo el ceño, preguntó.

-¿Qué les parece?

Después de lavarla con agua, la piedra brilló cristalina y era tan hermosa como un rubí.

-Si tuviéramos máquinas profesionales, podríamos analizarla -dijo Zhang Zhi, también muy interesado en la piedra, pero no había forma de realizar una observación más detallada.

-Guardémosla por ahora, habrá oportunidades en el futuro.

Wen Jia pensó que lo mejor sería guardar la piedra primero y esperar hasta que hubiera una oportunidad para investigarla en el futuro.

Después de todo, la piedra fue arrancada del cerebro de ese zombi rojo sangre, así que debía haber una diferencia entre ella, y las piedras de los zombis ordinarios.

Baping cocinó una mesa llena de pescado: sopa de pescado, estofado de pescado, pescado agridulce, y pescado hervido. En la mesa solo se veía pescado y nada más.

Durante la comida, Lao Yuan todavía estaba pensando en el asunto.

-¿No sintieron que el agua se volvió especialmente fría en ese momento?

Zhang Zhi asintió con la cabeza.

-Sí.

El agua estaba tan fría como si estuviera a punto de congelarse, y definitivamente no era normal.

Qin Chi le sirvió un tazón de sopa de pescado a Zhang Zhi.

-Podría estar relacionado con los zombis rojo sangre.

-El mundo es tan sorprendente. Hay cosas que por más que nos rompamos la cabeza, no podemos entender. Así que comamos y bebamos a gusto, disfrutemos del momento, que eso es lo más importante que debemos hacer ahora. -Baping masticó ruidosamente unas gambas fritas.

-Tienes razón.

Todos los demás rieron y empezaron a comer.

Poco después, se escucharon golpes en la puerta.

Lao Yuan dejó los palillos y preguntó.

-¿Qué les pasa a esos hermanos? ¿Por qué vienen a buscarnos todos los días? ¿Acaso se han enamorado de nosotros, Mu Zi?