Pequeño lobo arrepentido.

81. Zombis extraños. (3/10)

Zhang Zhi había venido con un propósito para poner a prueba a Zhao Fengnian. Después de que Zhao Fengnian terminara de beber la sopa de pollo, Zhang Zhi no ocultó su intención y preguntó directamente: "¿Qué planes tienes para después?"

Zhao Fengnian sonrió con dificultad y respondió: "Por supuesto, voy a unirme a las fuerzas principales, pero antes de eso, quiero encontrar a dos personas".

"¿A quién estás buscando? Tal vez podamos ayudarte a encontrarlos", ofreció Zhang Zhi.

Zhao Fengnian negó con la cabeza. "No es necesario, puedo buscarlos por mi cuenta. Si están vivos, los llevaré conmigo y no regresaré al ejército".

En la primera mitad de su vida, había cumplido con su deber como soldado. En la segunda mitad, si esas dos personas todavía lo necesitaban, nunca las abandonaría.

Zhang Zhi no hizo más preguntas. No tenía una relación cercana con Zhao Fengnian, así que era mejor no indagar demasiado en ciertos asuntos.

La habitación volvió a sumirse en el silencio.

Zhao Fengnian se sentía un poco incómodo frente a alguien como Zhang Zhi, que no tenía mucho que decir a los extraños. Al ver que Zhang Zhi no tenía intenciones de irse, Zhao Fengnian finalmente dijo: "¿Quieres que te cuente qué sucedió realmente en Luocheng?"

"Si no quieres hablar al respecto, no insistiré", respondió Zhang Zhi. Estaba realmente interesado en saber, pero no iba a presionar a alguien herido.

Zhao Fengnian miró su taza de sopa vacía y, después de vacilar un momento, dijo: "Si realmente quieres saber, puedo contártelo, pero te pido que no lo divulgues".

No sabía cómo estaba la situación afuera en este momento, y si se difundieran rumores desde su boca, podría causar muchos problemas.

Zhang Zhi se sentó en una silla junto a la cama y dijo: "Por favor, cuéntame".

Al ver la actitud de Zhang Zhi, que parecía dar por sentado que debía escucharlo y estaba dispuesto a hacerlo, Zhao Fengnian se dio cuenta de inmediato de que probablemente el beta era uno de esos pocos élites que ocupaban puestos de poder.

Zhang Zhi tenía una cara astuta y Zhao Fengnian sabía que sería difícil engañarlo. Así que comenzó a contarle todo poco a poco.

Mientras tanto, Qin Chi conducía el vehículo todo terreno mientras observaba a Lao Yuan y a los demás recoger una gran cantidad de medicamentos de la tienda y arrojarlos al coche sin mucho interés.

"Hemos obtenido una gran cosecha, valió la pena venir", dijo Lao Yuan mientras llevaba una mochila negra para camuflarse.

Ba Ping había traído muchas golosinas de la tienda de al lado, como gachas de mariscos y ollas calientes auto-calentables.

"Si hubiera sabido que los suministros de afuera iban a ser tan completos, habría salido con ustedes hace mucho. Miren lo que han conseguido antes, no se pueden ni guardar correctamente y no saben bien cuando se vencen. No tienen buen ojo para elegir, no saben cómo seleccionar lo mejor".

Wen Jia se sentó en el asiento del copiloto y cerró la ventana del auto para disfrutar del encanto del aire acondicionado.

"Vi que el auto de Hu Ge pasó por la carretera principal hace un momento. Solo había un auto, como máximo cinco o seis personas", informó Qin Chi mientras pensaba.

"También lo noté. Ayer, cuando estábamos moviendo la gasolina, su grupo obviamente tenía menos gente", agregó Wen Jia después de un momento de silencio.

"Les pregunté y alguien me dijo que todos los que se quedaron en la estación murieron", reveló Wen Jia.

Esa noticia fue un poco sorprendente, pero considerando la repentina disminución en el número de personas en el grupo de Hu Ge, parecía estar dentro de lo esperado.