Pequeño lobo arrepentido.

75. Atrapados en un mar de cadáveres. | #1

La foto que Zhang Zhi estaba mirando era el lugar del incidente. Un internauta había tomado una foto del lugar desde lejos y la había subido a Internet, generando una gran cantidad de comentarios tristes debajo.

Lo que llamó la atención de Zhang Zhi era que en medio de los escombros, en la esquina inferior derecha de la foto, parecía haber un pequeño punto rojo.

Amplió la foto al máximo y utilizó técnicas de restauración para hacerla lo más clara posible, y pudo distinguir vagamente la silueta de una persona.

"Esta sombra es muy extraña. Si se supone que es una persona, el rojo que tiene es bastante inquietante. ¿Podría ser un zombi ensangrentado?" Después de examinarla durante un tiempo, Mu Zi llegó a esa conclusión.

Zhang Zhi asintió con la cabeza. "De hecho, esta sombra tiene una forma humana, pero parece que hasta su piel es de un color rojo oscuro, lo cual no es normal".

Por no mencionar el hecho de que había personas vivas merodeando por el lugar del incidente; solo por el color de piel de esa "persona", está claro que no era algo común.

Se asemejaba a alguien que había sido rociado de pies a cabeza con pintura roja, con todo su cuerpo de color rojo, pero su ropa harapienta era de otro color, solo habían colores anormales en sus manos, pies y cuello.

Pero si decimos que era una figura falsa, no habría estado en una posición de agarre en los restos de los escombros.

Ba Ping llegó sosteniendo un plato de frutas y echó un vistazo. "Oye, ¿eso podría ser falso?"

"¿Falso?" Mu Zi estaba confundido.

"Quiero decir, ¿podría ser una imagen manipulada en la computadora?"

"Eso se llama 'photoshop'".

"No, lo verifiqué, y no tenía rastro de edición".

Zhang Zhi pensó que la tecnología de síntesis ordinaria no podía engañarlo con las técnicas de composición habituales. Además, esa 'sombra' solo la vio al ampliar la imagen varias veces. En esta situación especial, no creía que alguien tuviera tiempo suficiente o ganas de hacer algo tan llamativo para llamar la atención.

¿Un zombi ensangrentado?

Zhang Zhi se frotó la frente, sorprendido por su propia imaginación.

En el centro de la ciudad, Hu Ge y su primer equipo se encargaron de limpiar a los zombis cercanos y luego se dividieron en equipos de tres para recolectar suministros.

Por supuesto, Qin Chi y los otros dos formaron un equipo. No perdieron el tiempo y entraron directamente en la farmacia, vaciando los estantes uno por uno y guardando la mayoría de los suministros en su espacio, mientras ponían una pequeña cantidad en sus mochilas para no levantar sospechas.

Si no pudieran obtener provisiones después de ir a varios lugares, incluso los tontos empezarían a sospechar.

Mientras recolectaban suministros, Qin Chi intencionalmente hizo un gran desorden en los estantes, derribando todo lo que pudo y mezclando los productos para evitar dejar rastros.

"Haa, Haa..."

Un zombi que había perdido ambos brazos y estaba cubierto de sangre fresca se acercó tambaleándose. Wen Jia levantó un hacha y le cortó el cuello de un solo golpe.

Mientras tanto, Qin Chi aprovechó la oportunidad para guardar más medicamentos en su espacio y lidiar con ellos más tarde al regresar.

La mayoría de las personas en esa área eran del grupo de Hu Ge, y otros equipos pensarían dos veces antes de intentar robarles, considerando la fuerza de su propio equipo. Tenían más personas y Hu Ge tenía armas, así que si surgía un conflicto real, nadie podría sacar ventaja.

Hu Ge estaba parado frente a su Land Rover fumando un cigarrillo, observando a sus subordinados mientras recorrían las diferentes tiendas para recolectar suministros.

Antes, era Bao Ge quien se encargaba de este tipo de trabajo, solo tenía que quedarse en el auto y supervisar. Pero ahora que estaba muerto, Hu Ge tenía que hacer todo por sí mismo.

Wei Zhi Nan se acercó a Hu Ge con una sonrisa aduladora en su rostro, inclinando la cabeza y diciendo: "Hu Ge, estás trabajando duro. Hace mucho calor afuera, ¿por qué no descansas en el auto y yo te cuido?"

Hu Ge apagó su cigarrillo y miró a Wei Zhi Nan con una sonrisa irónica en su rostro. En medio de la sonrisa aduladora de Wei Zhi Nan, Hu Ge despreció sus palabras y dijo: "¿Quieres cuidar de mí? ¿Quién te crees que eres para intentar halagarme?"

La sonrisa de Wei Zhi Nan se congeló por un momento, pero continuó sonriendo aún más complaciente y dijo: "Hu Ge, no es eso lo que quise decir. Solo me preocupa que te estés quemando bajo el sol".

Antes de que Wei Zhi Nan pudiera seguir adulándolo, Hu Ge interrumpió sus palabras y dijo: "¿A qué equipo perteneces? ¿Cuánto tiempo llevas aquí? Sólo viniste para recolectar suministros para mí. ¿Crees que te he acogido para tratarte como un señor?"

Si este tipo hubiera aparecido antes, Hu Ge ya lo habría golpeado.

Viendo la ira de Hu Ge, Wei Zhi Nan rápidamente dijo: "No, Hu Ge, no es eso. Quería decirte que dentro de nuestro equipo hay personas especialmente maliciosas y astutas".

"Oh, ¿quién?" Hu Ge mostró interés mientras Wei Zhi Nan, con una expresión misteriosa, respondió: "Hu Ge, permíteme decirte la verdad. Solía ser un buen amigo de Qin Chi. Aunque parece una persona recta, en realidad es más astuto y maquiavélico que nadie. Solía tenerle miedo, así que ten cuidado con él".

En los siguientes minutos, Wei Zhi Nan inventó muchas historias sin fundamento, exagerando la verdad y difamando a Qin Chi frente a Hu Ge. Pintó a Qin Chi como una persona malvada, astuta y despreciable.

Su habilidad para hablar era impresionante, y al final incluso Hu Ge dudó y consideró la veracidad de sus palabras.

Wei Zhi Nan, con lágrimas en los ojos, le contó a Hu Ge lo desafortunado que él y Zhang Leyue habían sido al ser engañados y cómo todo tipo de acusaciones falsas fueron atribuidas a Qin Chi.

Sin duda, Wei Zhi Nan tenía sus propios intereses. Sabiendo que no podía enfrentarse directamente a Qin Chi, pensó que si Qin Chi se unía al equipo de Hu Ge y si Hu Ge lo valoraba especialmente, él no tendría un lugar para quedarse.

De cualquier manera, Wei Zhi Nan quería reducir al máximo la impresión positiva que Hu Ge tenía de Qin Chi y prefería que Qin Chi no se uniera a su equipo.

Mientras Qin Chi se concentraba en recolectar suministros y no tenía idea de lo que Wei Zhi Nan estaba diciéndole a Hu Ge, guardó varias latas de leche en su espacio y llenó su mochila antes de regresar al Land Rover junto con Lao Yuan y Wen Jia para vaciar los suministros en el maletero.

Antes de partir, Hu Ge les había dicho que los suministros recolectados se usarían primero para cubrir los gastos de combustible y que recibirían su parte después de regresar.

A Qin Chi no le importaban mucho esos suministros, pero para no llamar la atención, naturalmente tenía que seguir las instrucciones de Hu Ge.