ᴋɪᴍᴇᴛꜱᴜ ɴᴏ ʏᴀɪʙᴀ ᔕⓞⓝⒺ ⓢⓗⓞⓣⓢᔕ TERMINADO.

AU moderno! Mitsuri Kanroji

Una de las pocas cosas que a Mitsuri no le gustaban de su pareja es sus dudas sobre su actual relación. Aunque le haya explicado mil y un veces que no importan sus deseos (que se pueden cumplir de alguna u otra forma), mientras esté con su pareja tú; se sentirá la chica más feliz.

Estabas recostada sobre la barra del bar platicando con el bartender sobre tu vida y tu relación.

—Mi novia tiene muchos amigos muy guapos, ¿sabes? —reíste —uno de ellos gustaba de ella.

Diste un suspiro levantándote y acomodándote en tu lugar, sacaste tu celular para ver la hora, viste unos mensajes de Mitsuri, los abriste pero antes fuiste a la parte de los estados. Le diste otro trago a tu bebida al ver que uno de tus amigos subió una foto con ella.

—¿Y qué haces aquí? —preguntó el bartender viéndote.

—Desahogandome, ahogar mis penas en alcohol... Ni siquiera puedo enamorarme de alguien más o tener una aventura porque ella es perfecta, preferiría matarme antes de hacer algo así —diste un suspiro.

Terminaste tu bebida y le pagaste al bartender.
Él se despidió de ti deseándote suerte, saliste del bar de regreso a casa junto a tu novia. O eso hubieses querido si ella no estuviera de fiesta con sus amigos... Querías morir, tus inseguridades terminarían haciendo que perdieras a Mitsuri cuando es una gran chica.
Llegaste a tu casa, no dijiste ni siquiera; "estoy de regreso" porque nadie iba a responderte.

Comenzabas a cuestionarte si fue correcto desde el principio que las dos terminaran en una relación.

Te acostaste en el sofá, prendiste la tele y después cerraste los ojos, escuchando los ruidos de al rededor si era mejor querías dormir pero no podías. Alguien puso una manta sobre ti, sentiste otro pesos liviano encima tuyo y no dudaste en abrir los ojos, te encontraste con las esmeraldas brillantes de Mitsuri, quien te sonreía dulcemente.

—Bienvenida a casa —dijo llevando una de sus manos a tu cabello.

Parpadeaste un par de veces para comprobar que no era el alcohol que tomaste, no, no lo era. Ella se agachó para que sus caras quedaran a la par, aún seguías sorprendida y sin palabras en la boca pese a que querías preguntar un montón de cosas.

—Pudiste haberme dicho que irías a beber, lo habríamos hecho juntas —te dijo mientras una de sus manos iba a tu cara y la acariciaba.

—¿Mitsuri?... —su nombre fue lo único que salió de tu boca, ella asintió con una sonrisa.

—¡La misma! —respondió con el rostro sonrojado porque no dejabas de verla fijamente.

Saliste del sofá lanzándote sobre ella lo bueno de tu acción fue que tenían unos cojines en frente de los sofás, así que ninguna se lastimó.
Enterraste tu cara en sus pechos mientras la abrazabas con fuerza, la cabello rosa estaba sonrojada a más no poder por tu acción sin embargo no le molestó, es más también te abrazó.

—Te amo mucho Mitsu-chan —le dijiste aún con tu cara escondida en sus pechos —son tan suaves... ~

—_____-chan —murmuró ella mientras acariciaba tu cabello —¿de nuevo tus dudas?

Preguntó y fue cuando subiste la cabeza para poder verla, con pena asentiste, sabías cuando le disgustaba eso pero no podías evitarlo. Ella era la que se encuentra debajo de ti, te moviste un poco para que se pudiera levantar sin embargo ahora fuiste tú quien quedó debajo de ella te pusiste roja y no por el alcohol. Mitsuri se acercó a tus labios y te besó.
Aún tenías los ojos abiertos cuando lo hizo, los dejaste así por un momento para apreciar su cara cuando te besaba y después los cerraste para seguirle el beso.

—¿De qué forma quieres que te demuestre que estoy segura de estar contigo? —preguntó al separarse del beso.

Ahora recargándose con sus antebrazos quedó más cerca de tu cara, el nivel de rubor de las dos era más de diez mil millones por ciento.
Besó tu frente, besó tus dos mejillas, besó la punta de tu nariz, besó tu barbilla e incluso empezó a besar tu cuello.

—M-Mitsuri... —dijiste jadeando —¿por qué no besas mis labios?

Tu pedido sonó como una pregunta, ella negó con una sonrisa mientras seguía besando toda tu cara menos tus labios, parecía que quería provocarte o algo por el estilo.

—No lo haré al menos que admitas que no te preocupa nada de nuestra relación —se quitó de encima tuyo.

Te ayudó a levantarte y te sentaste a su lado en el piso, se llevó las manos a su boca tapándola para que no pudieras besar sus labios, frunciste el ceño. Pensabas en besarla una vez se quitara de encima de ti pero se tapó la boca.

—Dime _____-chan... ¿sigues pensando en él? —preguntó con tono triste.

Se refería a tu ex, negaste con una velocidad tremenda.

—¡No! No puedo hacerlo teniendo una novia hermosa... —dijiste con una pequeña sonrisa mientras ponías tu mano en su muslo.

—¿Entonces qué es?

Como tenía la boca tapada a duras penas podías entenderle, aún así desviaste la mirada para pensar bien tus palabras, no sabías como contarle tus preocupaciones sin que sonara que ella tenía la culpa después de todo no era culpa de ninguna.
Volviste a verla con una expresión más firme y segura de lo que dirás a continuación, ella puso atención a lo que dirías.

—Tú eres una princesa Mitsu-chan —dijiste haciendo que se sonrojara —quieres casarte y tener hijos... No podríamos hacer eso las dos juntas, me siento como una carga para que cumplas tus deseos, yo quiero que seas más feliz que yo, ¡quiero asegurar tu felicidad a mi lado! Pero me es imposible sabiendo tu deseo...

Quizás estabas sensible por el alcohol que habías tomado pero las lágrimas empezaron a salir de tus ojos, ella se destapó la boca y se acercó a ti con rapidez abrazándote.

De nuevo tu cara se hundió entre sus pechos, tu la abrazaste también y te acomodaste en ellos mientras seguías llorando.

—No digas eso _____-chan... —dijo acariciando tu cabello. —Te amo mucho, ¡mucho! No me importa sacrificar algo que quería si puedo estar contigo. Tus palabras me hacen muy feliz, no sabes cuanto. Me alegra haber terminando contigo que pese a todo me siento bien ese es el chiste de cualquier relación, estar cómodas las dos partes.

Tragaste saliva ante sus lindas palabras.

Tomó tu rostro y lo levantó para que pudieran verse, se acercó a tus labios y murmuró algo en tu oreja que te hizo sonrojar.

"¿Ahora por qué no me dejas hacerte feliz?..."

Seguido de eso te besó, no te dio tiempo ni de responder. Caiste rendida ante sus encantos, mientras tanto ella desabotonaba los botones de tu camisa, sin separarse del beso.

Pxsimista_ solo una falta uno de usted y listo :0

Ayer se me llenaron los pedidos de puros celos xD

Por algo Mitsuri es la pilar del amor 7u7

Mañana voy a la escuela y la mera verdad no quiero, send heLp :(