ᴋɪᴍᴇᴛꜱᴜ ɴᴏ ʏᴀɪʙᴀ ᔕⓞⓝⒺ ⓢⓗⓞⓣⓢᔕ TERMINADO.

Au moderno! Zenitsu Agatsuma

La mano del rubio de ojos dorados atrapó tu muñeca con suavidad, te detuviste debido a esa acción. Volteaste para ver que sucedía y en cuanto lo hiciste te encontraste con la cara de Zenitsu y después sus labios estaban sobre los tuyos. Tu rostro se puso todo rojo, te dieron escalofríos. Cuando el chico se separó te miró con una sonrisa cálida.

—¡Buena suerte en la escuela, ______-chan! —se despidió.

Saliste del lugar, tocando tus labios pensando aún en la sensación del beso que te dio.

Pero... Se preguntarán; ¿Cómo pasó todo esto? Pues habrá que regresar unos meses al pasado.

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Al ser nueva en la ciudad, tuviste que elegir un departamento que pudieras pagar con el dinero que tus papás te envían. Lograste conseguir uno pero sería compartido por ende salió barato y hasta te sobró algo de dinero, no fue hasta que te mudaste al departamento que te diste cuenta que tu compañero iba a ser un chico. La primera impresión fue lo mejor, su cabello tenía un brillante color rubio y sus ojos eran dorados, tu primer pensamiento fue; "wow... ¿viviré con alguien tan lindo?" Aunque el primer día fue algo incómodo.

—Entonces —hablaste tú primero. —¿Te llamas Zenitsu Agatsuma?

Él asintió.

Normalmente no sería tan callado, a penas ver una chica se habría puesto feliz, se alegro contigo sí pero no sintió la necesidad de decirte algo como lo solía hacer con la mayoría de niñas apenas conocerlas.

—Tú eres ______ ________, ¿no? —preguntó mirándote a los ojos.

—¡Exacto! —respondiste. —Entonces Zenitsu, seamos buenos compañeros.

Una sonrisa apareció en su rostro al ver que le extendiste la mano, la tomó. Todo tu rostro se puso rojo, su sonrisa fue hermosa. Su cabello inclinándose junto su cabeza un poco cuando sonrió, sus ojos cerrados y la felicidad que demostró... Fue mucho para tu corazón.

Tú eras nueva en la ciudad, te mudaste para terminar tu preparatoria ahí pero Zenitsu sólo se mudó de su hogar y por lo que te contó su escuela quedaba cerca, cuando tú te ibas el ya había regresado con tiempo de sobra. Ya que tenía que despertar temprano, le pides que te despierte antes de que se vaya y lo hace con gusto, todo esto se empezó a convertir en una dulce rutina por parte de unos amigos (tú y él).

No fue hasta esa vez.

Ibas de regreso a casa, como sales noche del colegio (cuando empieza a oscurecer) regresas hablando con tus amigas, no viven por el mismo rumbo que tú de hecho, a mitad del camino te separas de ellas... Sin embargo ese día era particularmente tarde, Zenitsu se preocupó y decidió ir por ti.

Lo siguiente que pasó fue una total vergüenza.

—Ah... Soy nueva pero faltan medio año para terminar el ciclo —hablaste. —A veces pienso que necesito un novio.

Ellas se quedaron calladas, cuando vieron a tu amigo esperando por ti afuera del colegio. Se sorprendieron al ver lo atractivo que era, por lo menos en la forma que se arregló ese día (pese a serlo siempre se veía mejor en aquel momento). Quizás lo dijiste con un tono normal, Agatsuma estaba algo lejos pero debido a su gran audición alcanzó a escuchar tus palabras. Se acercó a ti, puso una de sus manos en tu hombro, al saludarte sonrió y tú sólo estabas ardiendo en calor y vergüenza, deseando que no haya escuchado tus palabras.

—¡______-chan! Decidí venir por ti hoy —te dijo alegre. —Y... Quizás debería empezar a hacerlo desde ya, es de noche, me hace preocupar.

—Bueno ______, nos vemos el lunes. Disfruta de tu... —rieron. —Amigo.