bad boy ━━ [#1] jeon jungkook

『 O48 』

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Jeon JungKook

Despertar y nuevamente tenerla en mi cama. A pesar de haber estado gran parte de la tarde durmiendo, Kim hasta ahora parecía una piedra, pero aferrándose a mí tanto con sus brazos como sus piernas.

Veo que gusta mucho dormir.

Anoche, luego de comer y yo ayudarla a quitarse su maquillaje, que por cierto fue difícil, Kim volvió a vestir mi ropa y en tan sólo un descuido yendo al baño, me había robado la cama. No se la peleé, ni nada, sólo me acosté junto a ella y como siempre, la abracé.

Permanecí despierto y disfrutando del momento con Kim hasta que ella comienza a removerse.

—Hace frío... —murmuró jalando la manta— Dámela, estúpido.

Nunca puede ser un «por favor».

—Duérmete de una vez. —contesté en su mismo tono.

—Tú no me mandas, cucaracha. —dijo quitándome por completo la manta y quedandosela para ella mientras se volteaba para darme la espalda— Ahí te ve... ¡Ay!

No pudo ni terminar su frase cuando cayó al piso. La estúpida estaba al borde de la cama.

Este es el mejor karma instantáneo que vi en mi vida.

—Auch... —se quejó entre dientes mientras volvía sentándose en la cama.

—Jódete. —me burlé. Ella no respondió y permaneció acariciando su cara. Ahí recordé los golpes que ella tenía y lo dolorosa que debió haber sido la caída— ¿Estás bien? -dije arrimandome a ella y volteando su rostro para asegurarme de que no se lastimó demasiado.

—Estoy bien. Sólo son los moretones.

Su ojo derecho, el lado del que había caído, estaba lagrimeando.

—¿Te sientes mejor? —pregunté en referencia a ellos.

—Bueno, ya no duele...tanto. —rió— Estoy bien, en serio.

—Eso es bueno. —sonreí y acaricié su cabeza, a lo que ella tímidamente la bajó y se removió aparentemente nerviosa.

¿Desde cuándo el comportamiento de Kim es tan adorable y tierno? A veces no parece ni ser ella.

—Como sea, iré a... —la interrumpí antes de que diga o haga cualquier otra cosa.

—Oh, no. Tú no irás a ningún lado así salvo al baño para maquillarte y cambiarte de ropa.

—Pero no sé maquillarme. —lloriqueó pataleando en la cama.

—Te las arreglas. —dije levantandome y tomando los trabajos— Yo iré a entregar está porquería.

—Isti pirqiirii. —burló en voz baja.

—Te escucho. —goloeé su cabeza con los papeles al igual que ayer y me fui en dirección al baño para cambiarme.