Capítulo 33 - El Resultado

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Capítulo Sorpresa
Disfrutenlo.

Mónica

El Dr. Pérez nos había dicho que los resultados del ADN iban a estar listos para hoy. Samuel y yo estamos con los nervios de punta, estamos tan ansiosos por saber si Jane es o no nuestra nieta. No puedo negar que muero del miedo... Miedo a que no sean ellas. Después de tanto buscar a nuestras nietas, y que por fin la hayamos encontrado, sería la mayor alegría que nos daría Dios. Si resulta ser negativo, sería un gran dolor para nosotros.

Samuel y yo nos encontramos en la sala de espera esperando por el resultado del ADN.

Siento a mi esposo tomarme de la mano y acariciarla.

-Estoy tan nervioso, cariño...-casi susurra.

Veo sus ojos verdes, lucen como nunca antes los había visto, hay un brillo de miedo en ellos. Apuesto a que así están los míos. Siento ese extraño caliente en mi estómago, siento latir a mil por horas mi viejo corazón, que temo sufrir un paro cardíaco.

-Relajate, cariño... relajate-trato de tranquilizarle.

-¿Y si resulta ser negativo? ¿Qué haremos?...-pregunta asustado.

Suspiro y le doy mi mejor sonrisa.

-Cariño, tengamos fé. Ese resultado tiene que ser positivo-acaricio su mano y le sonrío con tristeza-. Si no son nuestras nietas, seguiremos buscandolas y las encontraremos, las encontraremos.

Samuel parpadea y una lágrima sale sin previo aviso.

-Te amo, cariño, no sé qué haría sin tí.-dijo haciéndome sentir más tranquila.

-Yo también te amo, querido.-lo beso en la mejilla.

Escuchamos un carraspeo frente a nosotros y giramos a ver. Nos levantamos del asiento con rapidez al ver al Dr. Pérez con un pequeño sobre.

-Aquí están los resultados.-dice amablemente.

El doctor me extiende el sobre y lo tomo con tanto temor.

La respuesta... La tengo en mis manos, la verdad...

Observo a Samuel que me mira ansioso.

-¿Qué dice Dr. Pérez?-pregunta Samuel.

El doctor lo mira serio.

-Es mejor que lo vean por sí mismos.

Trago saliva y sin poder esperar más, rasgo el sobre al mismo tiempo que escucho mi corazón en mis oídos, esa sensación de querer brincar de mi pecho.

Doy un suspiro y saco el papel con los resultados. Le doy una última mirada a Samuel, quien está con ambas manos en la boca y con los párpados apretados.

Sin más prosigo a leerlo.

Rápidamente me fijo en lo más interesante de todo.

Resultado: Positivo.

Probabilidad: 99.348%.

Lo primero que siento es un gran peso quitarseme de encima y lágrimas se hacen de mí. Me tomo del pecho con una mano, mientras con la otra sigo sosteniendo el papel, mis manos y todo mi cuerpo tiemblan.

¡Lo sabía! Dios... ¡Lo sabía!

Lloriqueo en voz alta sin importar que estoy a la vista de todos. Veo a mi esposo acercárse con cautela y me quita el papel para leer con rapidez. Observo detenidamente su reacción y cuando lo veo llorar, sonrío y alzo las manos al cielo.

-¡Gracias Dios mío!-el miedo repentinamente se esfumó, y ahora lo único que me invade es total alegría.

Siento los brazos de mi esposo tomarme y abrarme tan fuerte que tengo que pierdo el equilibrio, pero no me deja caer. Lo abrazo de la misma manera y lo escucho llorar libremente, yo también lloro sin importar nada. Nunca habíamos sentido esta gran felicidad.

-¡Verderamente son nuestras nietas, querida! ¡Lo son! Nuestras hermosas nietas.-grita con alegría mientras me besa con efusividad.

-¡Sí, sí, sí!.

Observo a nuestro alrededor y algunos nos observan mal, pero otros ríen. El doctor tiene una enorme sonrisa en el rostro.



¿A cuantos les hace feliz que ellos si sean los abuelos de Jane y Jackie?.

Me encantó este capítulo.

Espero que les haya gustado. Fue corto, pero ya saben, narran ellos.

Y sí, los dejé con la incógnita en el capítulo pasado. ¿Pero qué puedo hacer si me gusta verlos sufrir por otro? Muajajaj. Okey no...

Bajo Tus Encantos © Όπου ζουν οι ιστορίες. Ανακάλυψε τώρα