Bajo Tus Encantos ©

Capítulo 36 - No Tienes Una Idea

Les he quedado bastante mal, lo sé. :(
Y no hay excusas esta vez. Sinceramente les diré que no tenía ánimo alguno para escribir, no he tenido la inspiración necesaria para continuar...
Les pido una disculpa por la gran tardanza.
Ojalá que la espera haya valido la pena, espero que les guste este cap hot. 7v7

PD: No sé escribir este tipo de escenas, así que una disculpa  Jijiji.

♥Disfruten♥

Nuestro beso no es lento ni mucho menos gentil. Es terriblemente voraz, demandante, con gran deseo infernal. Nuestras respiraciones son desenfrenadas, nuestras manos son una sola caricia.

No sé en qué momento Marco me tomó entre sus brazos, mis piernas rodeando su cintura mientras sus fuertes brazos me sostienen. En estos momentos sólo soy sentimientos, sólo quiero disfrutar del momento. Sé que me arrepentiré de esto, pero no quiero pensar en eso ahora. Deseo a este hombre, tanto que quema. Por más que mi mente diga que no, mi cuerpo pide a gritos que sí, y es algo que no puedo controlar.

Marco se separa de mis labios para besar mi mandíbula y cuello, me estremezco al sentir la punta de su lengua, eso me hace gemir y él gruñe de vuelta.

—No tienes una idea de cuanto deseo escucharte gemir así,  mientras te follo como si no hubiese un mañana—dice con esa voz ronca y sexy que tanto me encanta. Sus palabras hacen estragos en todo mi ser. Es tan excitante escucharlo hablar así.—¿Lo deseas también, uh?.

Abro mis ojos y al encontrar los suyos tan intensos me desarma por completo. Asiento jadeante.

Eso es todo lo que necesitaba para empezar a caminar lentamente conmigo hasta las escaleras. Me agarro firmemente de su cuello y alzo una mano para acariciar su cabello. Sólo me dejo llevar.

De repente entramos en un pasillo, el cual lo ilumina una lámpara en la pared. Marco se detiene en una de las puertas y me sostiene con un brazo mientras abre. Es una habitación enorme y con grandes ventanales de cristal, en estos se estampa fuertemente la lluvia.

Nos adentramos y cierra la puerta detrás. Marco vuelve a enterrar su cabeza en mi cuello, su cabello haciéndome cosquillas. Ladeo la cabeza para darle espacio.

—Es tu cuello tan hermoso—susurra en este haciéndome erizar cada vello de mi cuerpo.

No pasa mucho tiempo cuando ya me encuentro tumbada en la gran cama, Marco encima mío. Deja un camino de besos desde mi cuello hasta mis labios. Su brazo izquierdo sostiene su peso, mientras con la derecha aprieta mi cintura con lujuria. Una corriente eléctrificante invade mi cuerpo cuando su mano cálida toca mi abdomen, cierro los ojos en anticipación.

De repente Marco toma el borde de mi blusa y lentamente la sube quitándola por completo. Siento mis mejillas arder. No es la primera vez que Marco me desnuda, recuerdo aquella vez en mi apartamento cuando estuvimos a punto de acostarnos. Volvemos a besarnos y esta vez el beso es lentamente delicioso, definitivamente Marco sabe como debilitarme. Su mano, por supuesto continua acariciando mi abdomen y cintura, siento una gran presión en uno de mis muslos, él está verdaderamente excitado. Por un momento me detengo a pensar... ¿Cómo se sentirá tenerlo dentro de mí?. Inevitablemente siento nervios, esta será mi primera vez y no sé cómo decirle, a lo mejor pensará que ya he practicado el sexo antes. Vamos, soy una chica de veintiun años, sería muy confuso y extraño para él.

Marco no deja mis labios en ningún momento, mientras toma el botón y el cierre de mi pantalón, poniéndome aún más nerviosa. Fácilmente lo hace y cuando va a bajar el pantalón me sobresalto un poco, él parece notarlo.