La chica del bar 4

Capítulo 10

Aquí estaba viendo su foto, como respeto a su familia decidimos hacer el funeral en una de las salas del velorio que el señor Jonás tiene desde que sus antecesores le legaron. Hay toda una decoración de flores por todos lados, y la gente luce con orgullo el negro en sus trajes y vestidos.Todo me parece tan irónico que no puedo parar de admirar el ataúd frente a mi.
De pronto alguien toca mi hombro y giro la cabeza para ver de quien se trata. Samantha, la madre de Mónica está completamente rota y no tarda en abrazarme, froto su espalda y luego me separo para verle directamente a los ojos.

_Lo siento mucho, señora_ Dije con voz quebrada y ella asintió mientras se limpiaba la nariz con un pañuelo descartable.
_Te pido perdón por lo que me hija te pudo haber hecho, ella no estaba bien y mira que traté de que tomara atención médica,pero no pude detenerla. Ella te amaba, pero la locura tomó su alma por completo_ Comentó angustiada y tragué saliva.

Bajé la mirada y luego agarré una pieza de sushi de una bandeja, que unos de los camareros contratado convidaba a los invitados.

Mordí y empecé a degustar el arroz húmedo con un pedasito de salmón crudo, mi favorito. Pero en éste momento un revoltijo se hace en mi estómago y cubro mi boca a tiempo de que todo se me vaya de las manos. Camino con prisa hacia fuera y devuelvo todo cerca de un árbol.
Un escalofrío recorre mis brazos y me limpio la boca con mi pañuelo azul que siempre tengo en mi bolsa por si acaso.

Escucho unas pisadas y me volteo con rapidez, una Emily confusa me queda viendo y me acerco hasta estar lo más cerca posible.

_ ¿Estas bien?, no te pongas nerviosa_ Emily preguntó mientras acariciaba mis manos.

De repente la puerta se abre de par en par y sale Samantha cargando una botella de perfume, e intuí que era para mi.

_Cariño ¿te encuentras bien?, traje perfume por si deseas olfatearlo_ Me preguntó mientras se acercaba a mi.
_Estoy bien, solo que el salmón me causó asco_ Respondí serenamente y Emily me miró con los ojos abiertos.

Me pasé una mano por el cabello y luego me giré dando concluida la conversación, escuche como alguien se alejaba y metí mano en mi cartera para rebuscar unos papeles.

_¿Qué está pasando? a ti te encanta el salmón y creo que es algo raro que te produzca ascos_ Emily comenzó a decir agitada.

Y trague saliva para aliviar ese nudo en la garganta, claramente no se iba a quedar callada por mucho tiempo.

_No es el momento, solo déjame respirar ¿si?, casi muero allá arriba y estamos en un funeral, el funeral de una amiga. ¿Podrías por favor dejarme pensar un poco?_ Dije nerviosa mientras desenvolvía un chocolate.

Tomó mi brazo y me hizo girar hasta quedar cerca de su cuerpo. Mis manos fueron a parar a su pecho y la quedé viendo fijamente. Ella me miró con dulzura y luego dejo sus manos sobre mi plano vientre, acaricio de aquí y allá y luego volvió a mirarme, esta vez con ojos llorosos.

_¿Es lo que yo estoy pensando?_Susurró sobre mi boca, mientras cerraba los ojos y mantenía sus manos quietas sobre mi vientre.

Acaricié su cabello y la besé, despacio, con la calma que necesitaba demostrar desde hace tiempo. Valia cada segundo a su lado y haría lo mejor por estar bien las dos, sin peleas ni engaños. Tomé su mano con fuerza y luego sonreí de oreja a oreja. Podía hacerlo, éste quizás no era el momento perfecto pero ya no quería seguir fingiendo.

Metí la mano dentro de mi cartera y luego saqué un sobre blanco con la insignia del hospital, ella me quedó viendo pálidamente y trague saliva mientras se lo entregaba. Ella lo abrió con desespero y empezó a leer rápido lo que allí estaba escrito.

De pronto sollozó y luego comenzó a caminar de un lado a otro, tratando de no parecer una idiota frente a mi, pero lo que ella no sabia es que yo estaba mortalmente asustada y no de su famosa reacción. No pude mas y acaté aquello como si fuera una vergüenza y lo entendí.

_No pienso tocar mas el tema, lo terminé entendiendo, creo que va a ser mejor que lo dejemos aquí a este asunto. En la mañana pediré turno con mi medico favorito y se acabara todo_ Dije angustiada viendo como ella me miraba sorprendida, mostrando sus dientes apretados de nervios.

_¿De qué estas hablando Nat?, ¿por qué insistes con una barbaridad como esa?_ Preguntó casi sin aliento y jadee.

_¡Porque se supone que me apoyarías!_Grité furiosa y limpie mis lagrimas tratando de serenarme y cabe recordar en donde nos encontrábamos.

Me quedo viendo con ojos llorosos y decidí por salir de allí mismo. Una vez dentro me puse a hablar con Samantha y le explique que me sentía muy mal y que iría a casa a descansar un poco antes de ir al cementerio y poder despedir a mi ex mejor amiga para siempre.

.....

Caminé perezosa hasta el refrigerador y abrí la puerta para empezar a mirar dentro de ella y así buscar que cosa rica comer. Dulces y saladas bandejas ahí dentro estaban, ya listas para mezclarse en mi paladar, pero todavía tenia una duda.

Me fijé en el freezer y me alegré internamente al notar que no se habían comido lo poco de helado que aun estaba en un vaso de telgopor que venden en la heladería cerca de casa. Tomé aquel vaso y metí una cuchara para empezar a degustar primero el sabor de vainilla mi favorito. Cerré la puerta para que no pierda el clima frío y me volteé. Pegué un grito y ahí me quede con la cuchara en mi boca.

Emily me estaba viendo con las manos sobre su boca, caminó descalza hacia donde me encontraba y luego sacó una cajita negra que guardaba en su pantalón. Se arrodilló y abrió la tapa de aquella caja para que admire un hermoso anillo de oro, seguramente con nuestros nombres grabados.

_Esperé mucho tiempo para hacer esto, y ahora que no hay nadie que se meta en nuestra felicidad te quería pedir que te cases conmigo. Sé mi esposa y vayámonos de viaje con los niños, conozcamos lugares que antes ni siquiera pasaban por nuestra mente y empecemos a fijarnos en nuestra propia felicidad.Quiero lo mejor para ésta familia y lo sabes muy bien, ya que no puedo vivir lejos de ti ningún segundo mas, cambié y aquí para ti, para apoyarte en todo como te lo mereces, permíteme cuidarte,valorarte y darte todo ese amor que guardo aquí en mi corazón_Empezó a decir Emily paulatinamente y me quité la cuchara de entre mis labios y suspiré aliviada_ Permíteme elegir un nombre bonito para aquél bebé, que seguro amaré y cuidaré con mi vida.

La quedé viendo con ojos llorosos y luego asentí mientras me cubría el rostro de la emoción.

.....

Espero que les guste ;)

Espero sus comentarios y de seguro actualizo recién el fin de semana ;(, es que me encuentro cansado mentalmente.