Cinco años habían pasado y mi amor por ella continuó intacto. Tuve que seguir con mi vida lo mejor posible y supe en el mismo instante que la vi que todo iba a mejorar entre nosotras.
Sus manos se entrelazaban con las mías y tiraban de vez en cuando...
Estaba sentada en la cama, eran las siete de la tarde y me entró a rugir el estómago. Pero debo seguir las reglas si quiero recuperarme.
El hospital es demasiado grande para mi gusto, tambien es ordenado y está lleno de enfermeras muy atractivas. Así es, me encuentro aquí internada por decisión propia, y sé que va a pasar un tiempo hasta que salga de aquí.
Miro hacia todas partes y me encogo de hombros al notar revistas recortadas, y me hacen recordar a las que tambien habian en la casa de mi infancia. Cierro los ojos y dejo que mis recuerdos tomen rumbo.
Flashback
15 de Mayo de 1986.
Me peiné el cabello hacia atrás y me puse unos aretes grandes de color negro, delinie mis ojos y mi boca de tiñó de carmesí. Ya estaba lista para salir y despejar mi mente con mis amigos.
Cuando estaba poniéndome la chaqueta de cuero noté la mirada de mi madre en el reflejo del espejo.
_¿De nuevo saldrás?, ¿por qué no limpias tu habitación?, es un chiquero_ soltó furiosa y rodeé los ojos mientras levantaba la caja de pizza vacía. _No me hostigues madre_Respondí entre dientes mientras salía de la habitación y alcanza de arriba de la mesa mis llaves.
Mi padre se planchó el traje con las manos y alejó la corbata de la taza de café.
_Esa pinta que llevas se parece de una pordosiera o esas manifestantes que solo quieren vivir de arriba_ Comentó irónicamente y lo vi relamerse los labios por estar comiendo tostadas con dulce.
Mis ojos se apretaron y al cerrar los puños mis nudillos tronaron. Me acerqué y de un manotazo hice volar la taza contra la pared. Mi hermanito que estaba comiendo galletitas se me quedó viendo angustiado. De repente mi padre se levantó de la silla y me acorraló contra la pared.
_Escucha pedazo de mierda, voy a dejarte en claro que no eres más que una desquiciada niñita mimada y que en éste puto momento te quiero lejos de ésta casa_ Susurró en mi oído y apreté los dientes mientras lo enpujaba.
Me dio un puñetazo en el ojo y gruñí mientras me abalanzaba sobre su cuerpo y le devolví un puñetazo en la nariz. Alcancé a salir de la casa cuando él llamaba a la policía y me reí entre dientes rayando con mi anillo de calavera la pintura del querido auto de mi padre, una colección ahora arruinada.
Caminé por las calles de New York y me crucé de brazos para resguadarme del frío. Al otro lado de la calle noté que una tienda de comida rápida estaba aún abierta y decidí cruzar sin detenerme aunque los autos se frenaban y tocaban el claxson.
_¡Fíjate por donde caminas!, ¡ten más cuidado!_ Me gritaban algunos y me erguí cuando entré a la tienda.
Luces fosforecentes azules y mucho humo había allí dentro, entonces me di cuenta que no era una tienda de Hamburguesas si no un bar para adultos. Fue entonces que me percaté de los motociclistas que fumaban cigarros y tomaban cerveza como si tragaran agua.
_¿Te sirvo algo cariño?_ Me preguntaron con tierna voz y me giré a verla.
Una castaña y seguramente siendo la dueña del Bar, me miraba de pies a cabeza. Es obvio que vestía bien y pareciera que en cualquier momento iba a salir dando vueltas con una motos de esas.
_¿No eres muy joven para estar aqui?_ volvió a insistir ya que todavía ni la había saludado. _Yo...lo siento. Uhm buenas noches solo quiero una hamburguesa y una cerveza_ Respondí sentándome en las banquillas y ella sonrió. _Ya pido que te hagan el menú pero tendré que pedirte identificación por la bebida alcohólica_ Comentó mientras se limpiaba unas copas con un pañuelo blanco.
Saqué mi identificación de la chaqueta y se la puse en mano. Sus ojos brillaron y supe que en su interior se estaba burlando. Me la devolvió y luego suspiró.
_No pienso venderle una cerveza a una chica de dieciseis años, asique te traeré una coca cola_ Susurró de cerca y cerré los ojos.
Escuché unos tacones golpear el piso al caminar y segundos después una chica de cabello violeta se ponia a mi lado en la barra. Me sonrió y levanté las cejas algo nerviosa.
Cuando la dueña me puso el plato con la hamburguesa frente a mis ojos, la chica sin mirarla entonó con grave voz.
_Sharon sírvele una cerveza a la chica, se ve que no tuvo una buena noche_ Dijo todavia sonriente y asentí mientras miraba hacia otra parte.
Puse mucho aderezo a mi hamburguesa y empecé a comer super hambrienta. La chica buscó un banquillo y se sentó a mi lado mientras se quitaba la chaqueta de cuero.
_Wow ¿hace cuántas horas no comes?_ Preguntó divertida y la vi con el rostro lleno de vergüenza. _Hace tres horas, no me llené con las tortitas fritas que hace mi madre cuando vienen mis tías a pasar el día_Contesté seriamente y la dueña me dejó la botella destapada delante de mi.
La chica me miró con las cejas levantadas y sonreí mientras me llevaba el pico hacia la boca. Tomé un trago y me relamí al sentir el gusto amargo de lo que sea que tenga allí en el líquido.
_Raro. Nunca la había probado_ Dije aún degustando. _Eso fue la cebada y tal vez el nuevo saborizante a limón que le inventaron_ Empezó a hablar la chica mientras levantaba su botella y la golpeaba lentamente con la mía_ Brindo por tu primera cerveza chica.
_Soy Emily ¿y tú?_ Pregunté un poco aturdida por la música de ACDC a todo volumen. _Soy Nicole, y si quieres puedo llevarte al sitio en donde nos estamos quedando_ Respondió sonriente y tragué saliva mientras refregaba mis manos sudorosas en el jeans oscuro que llevaba puesto desde hace horas. ....
Asi que dos horas más tarde estábamos en un galpón abandonado pero acondicionado e iluminado por este grupete de chicos en motocicleta. Nicole, como así se había presentado tiró un colchón en el suelo y me tendió la cama rápidamente. Dejó toallas limpias encima de una silla y la quedé mirando con asombro.
_Puedes quedarte aquí el tiempo que necesites, solo pido colaboración. Trabajamos en la gasolinera de la otra esquina y es alli donde hacemos dinero, asique bienvenida y espero que te guste el sitio_ Me dijo en tono claro y sin pelos en la lengua.
Asentí y metí las manos en los bolsillos mientras la veía alejarse. Estuve tratando de dormir pero la luz que parpadeaba en el piso de abajo me lo impedía, asi que me volví a cambiar y bajé descalza por las escaleras metálicas.
Patrick, Penélope, Arturo y Nicole bebían cervezas y fumaban una planta verde que ni sé como se llama y me sonrió cuando me acerqué a ellos.
_ Oh perdona que no pudimos dejarte dormir, es solo que es un ritual que hacemos antes de irnos a dormir_ Comentó Nicole pasada de alcohol y todos comenzaron a reir.
Levanté los hombros y sonreí mientras le robaba un cigarro a Patrick.
_Estoy acostumbrada al caos, supongo que ver como mi padre aveces borracho le grita a mi madre y habla de que soy su gran decepción en la vida me tiene con insomnio constante_ Respondí sincera y puse el cigarrillo entre mis labios, lo encendí y luego tiré el humo mientras miraba fijamente a Nicole que me estaba viendo sorprendida.
Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.
