Sueño de Quimeras.

Venta.

De pronto lo empujaron para que se pusiera a caminar, algo que hizo sin provocar ningún problema, sin verlos siquiera, sabía que a cierta clase de persona no le gustaba que uno de su clase le observara.

-No queremos que le hagan daño, si coopera. 

Pronuncio, sujetandolo de la barbilla, examinandolo tambien, para asentir, dejandole pasar, para que lo condujeran a un consultorio pulcro, que olía a hospital, a líquido desinfectante, en donde un hombre de de cabello rojo estaba sentado en una silla, con una libreta en sus manos. 

-Mi nombre es Camus y soy el encargado de tu salud, al menos, de revisarla, así que por favor, no hagas que Angelo y Shura tengan que golpearte. 

Simplemente asintió, sin decir nada al respecto, observando atentamente aquel cuarto, en donde las paredes no tenían nada en particular o que pudiera identificar, había algunos expedientes que detallaban la salud de otros de su clase, vagabundos, sin hogar ni familia que pudieran buscarlos, todos los expedientes tenían una suma mínima que debían aceptar por ellos, suponía que estaban acostumbrados a que no pudieran leer ni comprender lo que pasaba en ese momento, pero el si y cada vez estaba más asustado. 

-¿Cómo te llamas? 

Parecía un hombre amable, sin embargo, estaba catalogando personas como si no fueran más que objetos, como un valuador de una casa de empeño, como aquel que acepto su última pieza de joyería, cuando sucedió el accidente, una persona que parecía ser su amigo, pero sin duda, era el peor de todos, a quien debía darle un nombre.

-El tipo que me visito dijo que con una fotografia mia podria saber quien era yo… 

Mencionó, esperando que fuera falso, que únicamente fuera una mentira para hacerle temer por su vida, asustarlo mucho más, al ver la sonrisa de Camus, supo que era cierto, así que suspirando, medito si debía decirles como se llamaba o esconderlo.

-Es más fácil cuando cooperan y tengo un nombre a quien referirme. 

Camus se levantó de su silla colocandose un estetoscopio alrededor del cuello, tomando varios instrumentos médicos que iba colocando en una bandeja, mirándole con una expresión distante, no lo veía como una persona.

-Radamanthys… mi nombre es Radamanthys, Radamanthys Walden. 

Camus lo anoto en el expediente, para acercarse a él y rodear su cuerpo con un paso lento, haciendo que se preguntara la razón de su actitud, escuchando como uno de los guardias salió, con la información de su nombre, tal vez, para que comenzaran a buscar alguna clase de información que pudiera servirles.

-Muy bien Radamanthys, quitate la ropa y comencemos con tu examen. 

Radamanthys únicamente obedeció, desvistiendose con demasiada lentitud, dejando su ropa en una parte del suelo en donde podria observarla, aunque lo más seguro era que ya no podría seguir usandola, tomando una billetera en donde había una fotografía, con un chico de cabello blanco, su hermano que le esperaba en el otro condado.

-¿Puedo conservarla? 

Camus negó eso, haciéndole una señal a Shura para que le quitara su billetera, en donde solo tenia la fotografía de su hermano, para iniciar su examen médico, haciéndole toser, revisando cuantos dientes conservaba, buscando alguna clase de enfermedad o síntomas que le delatara, sacando cinco botellas de sangre, una muestra de orina y otras más, revisandolo de pies a cabeza sin piedad, ni cualquier clase de respeto por su humanidad, robandosela por completo, no era más que una cosa que venderian a alguna clase de postor.

-Muy bien, en algunas horas sabremos qué tan sano estas, mientras tanto, ponte esta bata azul y siéntate en la cama, aun nos falta un examen más.