BROKEN (Libro 1 y 2)[Completo]

Capítulo 34: La tia June.

La piscina era muy onda, no podía subir a la superficie y sentía que me ahogaba en mi desesperación por subir y tomar aire. De repente Rogan me volvió a tomar de la cintura y subió conmigo, inhalé una enorme bocanada de aire y tosí sintiendo que había tragado demasiada agua, me agarré del borde de la piscina y me impulsé para poder sentarme y recuperar el aliento.

—¿Te refrescaste? —murmuró Rogan flotando tranquilamente.

Fruncí los labios y me incliné solo para lanzarle agua a la cara con mi mano en una inútil forma de vengarme.

—Sabes que no sé nadar —dije todavía tosiendo un poco, él solo lo hizo para que olvidara el tema, pero si tenía un tema en la cabeza entonces no había nada que me lo sacara hasta que supiera la verdad.

Solté mi cabello para que se secara bien antes de volver a atármelo, de ese modo no olería feo después.

—Al menos valió la pena —dijo Rogan—. Me gusta tu cabello suelto, luces más... bonita.

Pestañé un par de veces sintiendo el cosquilleo en mis mejillas, probablemente me estaba sonrojando por su cumplido, me ponía toda boba solo por escucharlo llamarme así, iba a decirle algo cuando de repente escuché:

—¿Estás bien? —la voz de Alexander nos sacó de nuestra pequeña riña y alcé la vista hacia él, el sol le pegaba de espaldas y lo hacía ridículamente atrayente, o puede que fuera mi ángulo, lucía muy alto y su cabello revoloteaba por el viento.

—Sí, estoy bien —murmuré levantándome, toda mi ropa estaba empapada, al menos mi paranoia sirvió de algo, como había dejado el teléfono en mi habitación, no se había mojado.    

—Buscaré una toalla. —dijo Alexander, seguidamente miró a Rogan y estrechó los ojos para decir:— Sal de ahí y cámbiate a algo seco, puedes enfermarte.

—Ya papá —murmuró Rogan en tono irónico, Alexander giró los ojos y fue a los estantes antes de acercarme dos toallas, le agradecí envolviéndome rápidamente con una.

—Hablo en serio —dijo Alexander mirando a Rogan—, nos tenemos que ir dentro de un momento y te necesito seco. 

—Ya lo hago señor amargado, tal vez deberías meterte un momento, está muy buena —dijo Rogan.

Alexander lo ignoró diciendo algo entre dientes que sonó como: “este niño nunca madura”, y entró a la casa dejándonos en un raro silencio, Rogan nadó un poco más disfrutando de que seguía mojado y luego salió de la piscina, me quedé como una tonta observando lo bien que lucía saliendo del agua y le ofrecí una toalla seca sin poder despegar la mirada de él, su ropa húmeda pegándose a su cuerpo, pasó una mano por su cabello antes de mirarme con el ceño débilmente fruncido y creo que desfallecí de la impresión.

—¿Qué? —preguntó secándose el rostro.

Negué con la cabeza sintiendo mis mejillas sonrojarse.

—Nada, nada —solo estaba embobada viéndote—. ¿Alexander es tu entrenador?

—Él y mi tío Axel —dijo—, siempre me han apoyado en esto del boxeo.

—Ya veo, te cuidan mucho —murmuré.

Rogan se encogió de hombros y comenzó a caminar hacia la casa, así que yo lo seguí.

Me quedé en la pequeña sala donde todo era de plástico y no parecía haber problema en que mi ropa siguiera escurriéndose y mojando todo alrededor, en cambio Rogan fue directo a las escaleras, suponía que a cambiarse, era extraño que él le hiciera caso a Alexander, pero por lo que sabía él era el mayor de todos, recordaba que en su fiesta sorpresa celebraba sus 22 años, sabía que Ariana tenía 21 y Rogan 20, casi contemporáneos, pero todos parecían cuidar de Rogan puede que por ser el menor y por su raro pasado del que nadie parecía querer hablar.

Pasee alrededor observando las fotos de la pared, habían varias donde estaban Ariana y Alexander de bebés con otros bebés, otras de Axel y la que suponía era la famosa y desaparecida tía June, era muy bonita, sus rasgos eran delicados, ojos marrones y cabello oscuro, sonreía en todas las fotos, lucía amorosa, observé varias donde aparecía Rogan, su pequeño cuerpo apenas se amoldaba a la ropa, su rostro era muy serio casi enojado, en la mayoría de las fotos salía así, solo en una en particular donde tía June lo abrazaba y él hacía una mueca graciosa, atrás se veía a Ariana y a Alexander abrazando a su padre, creo que eso lo representaba todo, Ariana y Alexander eran más apegados a su papá y Rogan a su tía June.

Seguí observando las fotos hasta que me tomé con una que me dejó completamente confusa, era June, pero había otra chica idéntica a ella a su lado, ambas sonriendo, incluso vestían la misma ropa, fruncí el ceño, puede que la otra chica tuviera la nariz más grande que June, pero sin duda eran idénticas.

—Ella es mi mamá —dijo Ariana, me sobresalté, ni siquiera la había escuchado entrar, me voltee hacia ella, pero ella tenía la mirada fija en la foto.

—June —dije señalando a la de nariz más delgada y luego señalé a la otra mujer preguntando: — ¿y ella quién es?

—Es Jude, la mamá de Rogan —dijo Ariana—, ellas eran gemelas.

June y Jude.

—¿Y qué pasó con la mamá de Rogan? —pregunté.

—Murió —se limitó a decir Ariana—. Son cosas de las que preferimos no hablar.

Al parecer la niñez de Rogan era una mancha negra y oscura para esta familia.

Alcé ambas cejas sintiendo como la comprensión invadía mi cabeza, no sabía nada de la mamá de Rogan, pero que se pareciera tanto a su tía June, me hacía pensar que de algún modo él se pegó a ella por eso, y que desapareciera debió ser otro golpe devastador.

Vaya vida le tocó vivir a Rogan, pobrecito.

Nos fuimos porque Rogan debía prepararse para la pelea de esta noche, era la segunda pelea de eliminatorias, solo faltaban otras dos, pero ambas serían en otros países. El señor Axel nos acompañó en el viaje de regreso, e iba hablando de tantas cosas que casi ni siquiera escuchaba mis pensamientos. Cuando por fin estábamos en la residencia, dormí un rato, quería tener muchas fuerzas para gritar esta noche como toda una fan y apoyar a Rogan dándole ánimos, de verdad quería que ganara y cumpliera su sueño de competir a nivel profesional en las grandes ligas.

A las 6 comenzamos a vestirnos, Ariana me había prestado algo de ropa porque la mayoría de mis camisas no eran apropiadas para ese tipo de eventos, quería estar deslumbrante para Rogan así que solté mi cabello y me maquillé un poco, aquí estaba, diciendo que quería olvidarlo y luego arreglándome para él para verlo pelear.

Ya qué Moe, sé feliz.

Hoy iba a hacer lo que me venía en gana.

Salimos de la residencia y frené mis pies quedándome pasmada de la impresión, Brandon estaba en la entrada con los brazos cruzados, sus ojos avellanas fijos en mí.

Mierda.