XXIII. Revelaciones inesperadas.

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Capítulo 22: Revelaciones inesperadas.

***
 


ROGAN BROWN

 
E

ntré a la fraternidad junto con Alexander cuando de repente Moe frenó en seco en medio de la sala, verla siempre me aceleraba el corazón, pero fruncí el ceño al notar sus mejillas encendidas y sus ojos cristalizados.

¿Había estado llorando?

—¿Estas bien? —pregunté acercándome a ella, evidentemente había estado llorando.

—Sí, es que… —se arregló el pelo buscando una excusa, su mirada divagante sin encontrarla.

Como lo supuse ella no iba a admitir tal cosa.

—¿Qué te hizo el hijo de puta de Brandon? —solté, el solo hecho de pensar en que le hubiera puesto una mano encima…

—No, no, ni lo he visto —dijo rápidamente—, es que renuncié al trabajo para poder enfocarme en mi trabajo de ropa y ando sentimental.

¿Uh?

Bueno, esa era definitivamente una excusa, porque nadie lloraba por renunciar a un trabajo por voluntad propia, decidí seguirle la corriente, después le preguntaría.

—En tu empresa —dije—, ahora vas a enfocarte en tu empresa de ropa.

Sabia que iba a ser grande, su dedicación y esfuerzo que hacia para crecer era muy admirable.

Ella sonrió.

—En mi empresa —afirmó.

Cuando su mirada se cruzó con la mía fue inevitable que me acercara a ella, siempre me atraía, como si fuéramos uno solo. La envolví por la cintura y ambos sonreímos, por más cansado que estuviera, estar con ella siempre mantenía enérgico.

—Bien —dijo Alexander aclarando su garganta, por un momento se me había olvidado de que había venido conmigo—, aquí no hay muérdago como para que se besen, así que, por favor, permiso —dijo haciéndole una seña a Moe—, ella y yo debemos discutir cosas pendientes.

Claro, recordaba que él la iba a ayudar con el papeleo del matrimonio forzado con el hijo de puta de Brandon.

—Te amo —susurré ignorando a Alexander, inclinándome para darle un beso en los labios, joder… besarla era como el paraíso para mí.

—Yo a ti —susurró, iba a volver a besarla, pero ese pensamiento que llevaba toda la mañana cruzo mi mente, ya venía navidad, ya estábamos por salir de vacaciones y no quería estar sin ella.

—Eh… Moe —dije—, ¿Qué harás en noche buena?

Ella pareció un poco confusa.

—Probablemente trabajar —dijo—, ¿por qué?

—¿Te gustaría ir a cenar con nosotros?

—Claro —sonrió luego de pensarlo por un momento.

—Vale —susurré sin poder evitar sonreír como todo un tonto, realmente me emocionaba que pasara la noche buena conmigo.

—Vale.

Estaba tan mal por ella…

Nos dimos un beso y ella fue con Alexander, yo subí a mi habitación, tenía un raro dolor de cabeza desde la mañana y realmente creo que era por no dormir bien, necesitaba descansar un poco, últimamente siempre me sentía agotado, cosa que no comprendía si los resultados médicos de los exámenes generales habían salido bien, me estaba tomando los medicamentos, las vitaminas… todo estaba correcto.

Puede que fuera eso, simplemente necesitaba dormir un poco… recobrar fuerzas ahora que por fin las clases habían culminado y mi única preocupación ahora era el campeonato final.
Me quité los zapatos y me acosté en mi cama cerrando los ojos, mientras soltaba un fuerte bostezo, solo necesitaba dormir un poco…

-
Abrí la puerta del closet con cuidado, y caminé lentamente hacia la cama donde estaba mi madre, hoy mi padre se había quedado a dormir con ella, como la mayoría de los viernes, se suponía que cuando él venía, mi madre me decía que no podía salir del closet, pero aquí estaba, la curiosidad siendo más grande que yo. Solo lo observé ahí en la cama, estaba semidesnudo  durmiendo, no parecía tan peligroso como mi mamá decía que era, lucía bastante tranquilo y normal, de repente observé como abrió los ojos con el ceño débilmente fruncido probablemente al percibir mi mirada.

—Hola —murmuró él, creo que era la primera vez que me hablaba, su voz era muy profunda y áspera, él estiró su mano hacia mi rostro casi como si quisiera comprobar que yo era real, pero de repente mi madre se abalanzó sobre mi padre y le gritó:

— ¡No lo toques!

Me eché hacia atrás asustado, no me gustaba cuando mi mamá gritaba, mucho menos cuando me veía de esa forma angustiada.

—¡Anda al closet! —me ordenó mi madre en un ruego desesperado.

No refuté, solamente salí corriendo con algo de torpeza hacia el closet donde me encerré temblando de temor.

—¡¿Quién te crees para ordenarme?! —la voz de mi padre sonaba enojada.

—Por favor, lo siento yo… —murmuró mi madre, pero se calló cuando él le dio una bofetada y comenzó a golpearla, miraba por las rendijas de la madera como mi padre lo hacía, después de cansarse le escupió encima y se bajó de la cama para dirigirse al closet a paso lento, abriendo la puerta y por primera vez vi su cara.

—Ven aquí…

Sonrió, su diente de oro reluciendo en una dentadura opaca y negruzca, se agachó para agarrame del brazo y comencé a gritar lleno de pánico…
-

Grité sentándome en la cama pasando una mano por mi frente, estaba lleno de sudor, mi corazón acelerado, los recuerdos de mi pasado parecían ser más nítidos que antes, no entendía por qué ahora eran tan frecuentes…

Limpié unas lagrimas que se escurrieron por mi rostro y tomé mi teléfono para llamar a la única persona que podía calmarme.

—Dime, amor, ¿estas bien? —dijo mi tía June, su voz era como un consuelo para mi alma.

—Sí —susurré sintiendo aun mis manos temblorosas— soñé con él.

Silencio, creí que me había colgado hasta que dijo:

—¿Qué tanto recordaste?

—Hasta cuando él… abusó de mí.
 
 

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*Dejaré esto por aquí y me iré lentamente*
Si ya saben como soy para qué me leen???! Okey no xD la historia de Rogan es algo turbia, lo aclararé en el próximo capítulo, recuerda votar eso me ayuda a seguir :D

Este es mi instagram: Ysarisareinamoo por si desean charlar 💖 Nos leemos pronto❣

BROKEN (Libro 1 y 2)[Completo]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora