XXIV. Demasiadas confesiones en una sola noche.

1.9K 237 11
                                    

Capítulo 24: demasiadas confesiones en una sola noche.

 
ALEXANDER SCOTT
 

De entre todas personas que se pudieron haber enterado de lo de Marcelo y yo, tuvo que ser nada más y nada menos que Moe. Los recuerdos eran dolorosos, a veces se me hacía difícil creer que viví algo tan intenso, pero sí fue así, la mejor etapa de mi vida fue esa, cuando entré a la universidad.

Éramos un equipo de alumnos nuevos con el sueño de ser abogados, todos compartiendo la misma actitud, creyendo que podíamos comernos el mundo. Fue tal vez la segunda semana cuando noté la presencia de Marcelo cuando intervino por primera vez en una clase y precisamente en esa clase nos juntó para hacer un proyecto para final de año.

Lo admito, no me caía del todo bien, parecía pretencioso, egocéntrico, chocante y que quería aparentar ser todo un santo de su religión cuando en realidad era todo lo contrario y lo comprobé cuando nos reunimos a hacer el proyecto, llevábamos casi toda la noche intentando estudiar las leyes y transcribiendo, ya era muy tarde para que se fuera a su residencia así que le ofrecí quedarse, mi cama era lo suficientemente grande para que entráramos los dos… pero aun así sucedió.

Marcelo me besó y una cosa llevó a la otra donde terminamos tocándonos, nunca había tenido una experiencia sexual con otro hombre, nunca me llamó la atención los de mí mismo sexo, pero con él todo fue muy diferente, todo fue intenso y me hizo sentir más vivo que nunca.

Comenzamos a salir, pero no decíamos nada a nadie, no por la discriminación, sino que apenas yo estaba descubriéndolo y no quería darle la noticia a mi familia de buenas a primeras, la familia de Marcelo era peor, porque todos eran religiosos, así que comenzamos a tener un amor a escondidas, algo que era íntimo, solo de nosotros dos.

Pero un día todo cambió.

Su madre llegó por sorpresa, y descubrió que yo estaba ahí, Marcelo pudo haber mentido como siempre diciéndole que era su amigo, pero eligió ese momento para confesarlo todo y decir que yo era su novio. Evidentemente a su madre casi le dio un infarto y comenzó nuestro infierno, su padre le quitó el dinero, lo obligaron a devolverse, podía apoyarlo monetariamente pero mi familia tampoco era como si fuéramos millonarios, solo teníamos lo necesario y me daba algo para subsistir, así que decidí crear un plan con él, un plan donde diría que terminamos la relación, le pediría dinero a sus padres, se casaría con una chica y entonces… nuestra relación pasaría a ser aún más secreta.

Así fue.

Marcelo se casó con una chica llamada Megan, y seguimos viéndonos a escondidas… hasta que ella nos descubrió, justo un día antes de la muerte de Marcelo donde su casa explotó.

 
MOE BEKER
 

No podía parar de llorar, las lágrimas se escurrían solas al solo pensar que esa persona que odié en su momento por creer que corrompía a mi hermano era de hecho Alexander, la misma persona que me ayudaba a mí a anular el matrimonio, la misma persona que era como un hermano para Rogan, todo esto era demasiado para mi cabeza… demasiadas confesiones en una sola noche.

—¿Quieres decir —dije luego de un momento de que Alexander me confesara todo aquello—, que Megan supo lo de ustedes una noche antes del incidente?

Tomé una profunda respiración, algo no encajaba, Megan nunca nos dijo nada al respecto, de hecho, en el funeral y después de salir del hospital parecía muy dolida, claro que la culpé por la falla de gas, pero habían dicho que no era su culpa…

Ahora veía que posiblemente, Megan lo hizo apropósito.

—Se suponía que ella estaba de viaje —Alexander hizo el fantasma de una sonrisa mientras su mirada se perdía en el suelo—, pero luego apareció de la nada y nos encontró en la cama. Se puso como loca, pero Marcelo le habló fuerte, al parecer en su religión el esposo manda sobre la mujer y ella simplemente se metió a la habitación enojada, me fui de ahí, pero aun así me sentía terrible…

Su voz se ahogo como si reviviera esa escena de su vida y continuó diciendo mientras una lagrima se escurría de su ojo:

—Me envió un mensaje diciendo que me amaba, pero que debíamos tomar un poco de distancia hasta que Megan se calmara, de lo contrario podía hablar. Y fue el otro día cuando me enteré de la tragedia…

Cerré los ojos limpiando mi nariz, otra parte de la historia que no conocía pero que me ponía a pensar miles de cosas.

—¿Crees que Megan tuvo algo que ver? —indagué.

—No hubo pruebas de nada, dicen que se dejó una hornilla de gas abierta que ocasionó la explosión, pero pudo ser un descuido —dijo—, prefiero pensar que fue eso.

Mordí el interior de mi mejilla, ahora inquieta porque… ¿por qué entonces Marcelo me mostró esto?

—¿Y si no fue así?

 Alexander tomó una profunda respiración levantándose, parecía demasiado doloroso para él hablar de esto y no quería seguir conmigo aquí.

—Ya sabes lo de los documentos —sonrió como si no hubiéramos estado hablando de un tema importante hace unos segundos atrás—, ahora es tu turno enfrentar a tus padres.

Afirmé con la cabeza entendiendo que debía de irme.

—Gracias —me limité a decir con sinceridad y luego salí de su habitación procesando absolutamente todo lo que había acabado de pasar.

Pasé por el pasillo y vi a Rogan bajar las escaleras, no traía camisa, su cabello estaba algo desordenado y como no, siempre se las arreglaba para sonreír y parecer condenadamente atractivo.

—Hola —murmuró cuando se acercó a mí, yo automáticamente lo abracé y él también se aferró a mí como si nos necesitáramos el uno al otro en este momento más que nunca, era extraño.

—¿Estás bien? —pregunté aun aferrada a él.

—¿Puedes quedarte a dormir? —me pidió, fruncí débilmente el ceño, pero afirmé con la cabeza, tampoco me provocaba estar sola esta noche.

—Claro —murmuré.

Él me agarró la mano y subí con él a su habitación, después de todo ya había hecho las entregas y podía organizar el resto para mañana temprano, me quité los zapatos al igual que él y nos acostamos, el solo hecho de que su cuerpo estuviera junto al mío ya me hacía calentarme por completo, me acerqué a él y rocé mis labios contra los suyos buscando profundizar el beso, pero él me alejó.

—Perdón, Moe —dijo—, es que estoy muy cansado, solo… ¿puedes abrazarme?

Me quedé por un momento asombrada, era la primera vez que Rogan me rechazaba… ¿Qué estaba pasándole? No parecía estar bien.

—Uhm, claro —murmuré, envolví mis manos alrededor de su cuerpo y él reposó su cabeza en mi pecho, casi lo sentí como un bebé pequeño y no como el gran monstruo que se montaba en el ring a golpear sin piedad.

Lo escuché profundizar su respiración evidenciando que se había quedado dormido y poco a poco yo también cerré los ojos siendo arrastrada por el sueño…

—¡Dejame en paz!

El grito me sobresaltó; abrí los ojos cuando de repente Rogan me agarró del cuello comenzando a asfixiarme.
 
.
.
.
.
*****
😱😱😱😱😱😱😱
Tranquilas que el próximo capítulo se pone peor 😳 okey no ¿o si? Wuajajajajaj
Recuerda votar☺
Este es mi instagram: Ysarisareinamoo por si desean charlar, bendecido dia para todas :D

BROKEN (Libro 1 y 2)[Completo]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora