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— Hola Baam

Al escuchar salir su nombre de los labios del contrario en un tono triste provocaron que su cuerpo tuviera escalofríos, no quería que pasara aquello, no quería que su nombre saliera de manera lastimera de los labios de la persona a la cual le tenía un gran aprecio.

— Agüero yo

— Espera, ven siéntate

El de ojos azules vio que el menor estaba todo golpeado, se preocupó levemente y por eso le pidió que se sentara para que pudiera descansar. No entendía cómo era posible que el chico estuviera así de lastimado, pero tampoco preguntaría.

En cambio, el menor se sintió algo adolorido por lo distante que se sentía del chico, no entendía porque su relación la cual era cálida se había vuelto bastante fría. De manera lenta se acercó al chico y se sentó a su lado dejando una gran distancia entre ellos, sus ojos dorados miraron el cielo al igual que el mayor y se quedó pensando en las palabras que debía decirle, necesitaba cuidar sus palabras si no quería terminar de perder al chico de ojos azules.

— Yo...

— ...

— ...

— Tu

— Yo, en verdad lo siento Agüero. No debí haberte gritado de esa forma, yo no debí de haberte tratado de esa forma y debí de haber venido antes. En verdad lo siento.

— ...

Aquellas palabras se quedaron en el aire por varios minutos en los que el de ojos azules seguía mirando las estrellas, quería decirle que estaba bien, que lo perdonaba, que por ser él le perdonaría todo, pero no podía. No podía decirle aquello por su orgullo y por sus sentimientos. Debía de controlarse, ya había visto que sin importar que tan grande sean sus sentimientos por el chico si no eran correspondidos se vería mucho más afectado de lo que había estado todo el tiempo en lo que estuvieron peleados.

— Baam, ya no importa

— ¿Qué?

— No es tu culpa, estabas en tu derecho de gritarme

— Agüero yo no

— Tal vez fue mi culpa, no debí de haberme entrometido tanto en tus asuntos, después de todo tu sabes lo que haces.

Quería ordenar a sus labios que se callaran, quería hacerlo, pero últimamente por estar en este estado tan lamentable y sentimental no controlaba su boca o sus pensamientos que se desbordaban sin permiso de sus labios hasta llegar de manera directa hacía el menor que estaba a su lado.

El menor se sorprendió por las palabras del mayor y quiso golpearse por haber sido tan estúpido, tal vez su hermano mayor Karaka tenía mucha más razón de lo que pensaba. Había lastimado demasiado la confianza del mayor hasta que estuviera de ese modo.

— Baam, lo mejor es que nos sep-

Antes de que el mayor terminara de decir lo que quería decir sin pensarlo un segundo más y sin importarle nada en ese momento se acercó al chico de ojos azules opacos cual el cielo nocturno para rodearlo con sus brazos haciendo que callara sus palabras.

— No digas tonterías por favor, vine a disculparme porque no quiero perder tu amistad. Eres alguien especial para mi Agüero, no quiero estar peleado o alejado de ti. De tan solo pensar de que ya no podré ver más tus ojos azules o una sonrisa tuya me hace doler el pecho. Eres mi mejor amigo y la persona más especial que puede existir para mí.

El mayor se había sorprendido por aquel abrazo tan repentino que le había dado el menor, sus palabras fueron apagadas por el pecho del chico y cerró los ojos disfrutando de aquella sensación de calidez que había extrañado. Cuando las palabras del castaño llegaron a sus oídos quería llorar de alegría y tristeza. De alegría por escuchar que era la persona más especial del menor y que no quería que estuviera lejos de él, pero por otro lado la palabra amigo o mejor amigo le dejaron claro que no tendría una oportunidad con el menor y aquello lo lleno de tristeza por desear que el menor se fijara en él. Sus manos se movieron mientras pensaba con impotencia como desearía por primera vez ser mujer para que el chico lo mirara con el cariño con el que él quería. Sabía que pedía algo egoísta, pero no era su culpa, de alguna manera siempre había sido egoísta. Sus manos terminaron de moverse al terminar rodeado la espalda del chico aferrándose a aquel abrazo tan cálido que le daba.

My Person [BaKhun]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora