16

598 119 159
                                    

Dos alarmas distintas sonaron en dos distintas partes de aquella casa de paredes en escalas de grises. Ambas personas fueron al baño, pero uno en su propio cuarto y otro al baño común. Se arreglaron y salieron de su respectivos cuarto, unos ojos marrones y otros de tonalidades naranjas chocaron, se saludaron y bajaron las escaleras viendo al menor de la familia terminando el desayuno para ambos.

- Buenos días Padre, señor Yama

- Yama, Baam, Yama

- Señor Yama

- Ah te perdono porque haces unos ricos hotcakes y porque ya sé que lo haces para molestarme.

- Al parecer ya no te sale tu broma Baam

- Bueno, creo que también después de un año ya no sirve aquella broma.

El castaño se rio ante el tono de lamento fingido del menor y acaricio sus cabellos. Había pasado un año desde que habían llegado a aquella casa y estaban tranquilos. Aunque la noticia de que ahora Yama viviría con ellos lo enojo en un principio porque sentía que aquel joven era un perro de caza que estaba atento para cazar a su retoño mayor. Pero no pudo hacer nada ante la emoción de su retoño menor, pero después de unos meses se acostumbró a su presencia y lo vio por el lado de que ahora sus hijos tenían más seguridad con el pelirrojo allí.

Además de que albino ya había entrado a la High School que estaba cerca por recomendación ante sus buenas notas, el rubio también ya había terminado la escuela elemental y había logrado ingresar a la escuela primaria que estaba a unas calles de su casa por recomendación también. El único que faltaba llevar a más cerca a la casa era al menor de la familia, que tan solo le faltaba dos años para acabar la escuela elemental. Por más que le habían dicho que lo cambiaban para que llegara más rápido a la casa no quería porque no quería dejar sola a su amiga rubia. Este hecho enojaba levemente a Karaka, puesto que no entendía ese afán del menor por ser amigo de la rubia. Su padre lo complació en eso, pero con el acuerdo de que iría a la misma escuela primaria de Karaka cuando llegara el tiempo.

Todo eso paso en un año, aun no podía reconocer que su hijo mayor ya tenía 16 años, su segundo hijo 12 a una semana de cumplir los trece y su último hijo ya tenía 10 años. Soltó un suspiro nostálgico revolviendo sus huevos llamando la atención de un pelirrojo que estaba a punto de hablar, pero la llegada de los otros dos integrantes de esa pequeña familia, hicieron su aparición en la sala.

- Buenos días hermanos.

- Buenos días Baam/enano

- Buenos días Blanco, Karaka

- Buenos días mocosos

- Buenos días Padre/Yama

- Buenos días Viejo/Pelirrojo

Ambos menores se sentaron en su sitio correspondiente y el menor de todos les puso sus platos correspondientes, antes de sentarse en su lugar tomando su desayuno de manera tranquila. El desayuno fue tranquilo y en silencio gracias a los cielos. Todos dejaron sus platos en el lavadero mientras el menor subía a lavarse y agarrar sus cosas dejándolas a un lado de la puerta. Fue a lavar los platos y los demás fueron a terminar a alistarse. Una vez limpio todo espero al castaño y pelirrojo para que pudieran llevarlo a su colegio.

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
My Person [BaKhun]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora