My Person [BaKhun]

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Por su parte el de ojos azules se encontraba nervioso, ni bien vio bajar al chico lo busco siendo seguido por su hermano menor que estaba preocupado por su estado.

Pero a este no le importó nada y siguió buscándolo esquivando a varias personas, sobre a todo rubio que trato de retenerlo para que no hiciera alguna tontería.

Esquivo todo y logro ver como el chico se iba a la parte de atrás con un pelinegro. Corrió hasta allí, cuando se acercó noto a un pelinegro que conocía.

— ¿Novick?

— Hola Agüero

— Espera ¿Tú...?

— Solo lo supe recién, tranquilo.

— Entiendo, creo

— Ve, creo que te está esperando.

El de ojos azules asintió antes de caminar cerca del castaño que se encontraba mirando el cielo. Bajo la luz de la luna se veía extremadamente hermoso.

Su cabello atado en una coleta baja en un traje azul oscuro entallado que resaltaba todo su cuerpo bien formado le llamaban bastante la atención ¿Desde cuando se había vuelto así? Solo se había ido dos años, ahora era más alto y más masculino desde un sentido.

Sus labios temblaron levemente antes de soltar un suspiro, se paró recto y sin temblar abrió sus labios decidido.

— Baam

Ante su llamado el chico se sobresalto, pero cuando volteó a verlo con aquellos ojos dorados su corazón se removió.

— Agüero

Cuánto había extrañado escuchar su nombre saliendo con esa voz, pero no sé dejó dominar por ese sentimiento nostálgico y se acercó al chico.

Este por su parte tembló ante la ansiedad de ver al chico acercarse. Sin pensarlo abrió sus brazos pensando que lo iba abrazar, pero en vez de eso recibió un puño limpio en su estómago que provocó que se retorciera e inclinará.

— Eso te mereces por estúpido.

— Yo-

El castaño se paró de forma recta nuevamente pero agarrando su estómago. Sus ojos se desviaron sin poder mirar al de ojos azules. No podía.

— Tu nada, ahora me escuchas pedazo de escoria ¡Me abandonaste! ¡Me dejaste solo! ¿¡Y por qué!? ¡Ah sí! ¡Fueron por unas estúpidas palabras de una rubia que ni sentido tenían! ¡Pero claro! ¡Como a ti te importa una mierda todo! ¡Me dejaste y te fuiste por dos putos años! ¿¡Acaso sabes lo que sufrí!? ¿¡Sabes cómo llore por extrañarte!?

El de ojos azules alzó su mano y le tiró una cachetada con fuerza haciendo que el castaño ladeara la cabeza hacia un lado.

— ¿¡No creíste que podías haber arreglado las cosas si hablábamos!?

Y allí fue cuando le tiró otra cachetada haciendo que su cabeza fuera para el otro lado. El de cabellos castaños se dejó golpear por el otro.

Entre otros gritos reclamándole al chico por ser estúpido al irse sin hablar con nadie guiándose de unas palabras iban cayendo cachetada tras cachetada en sus mejillas. El por su parte se dejaba golpear, pues no tenía derecho a detener al más bajo.

Sin saber ambos estaban haciendo una pequeña escena que estaba divirtiendo a cierto pelinegro, al igual que a un pequeño de ojos azules. Por su atrás dos rubios miraban la escena también divertidos, a su costado estaba una pelinegra que miraba todo enojada.

No entendía porque el castaño no le cortaba el rollo al chico de cabellos celestes. Quería ir a detener aquello saliendo en defensa del chico que le gustaba, pero un peliplata le detenía. Diciéndole que no se metería en este asunto.