Capítulo V pt.2

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Itachi y yo seguimos conversando de camino a casa.

—  Aún estoy algo preocupada por lo que hice. ¿Y si me meto en problemas?

— No tendrías por qué estar en problemas. Todo lo que hiciste lo hiciste en defensa propia y para protegerme.

— Si, lo sé, pero... Creo que a mis padres no les gustará, y tal vez Obito se sienta decepcionado por lo que hice.

— Eso no pasará, linda —Itachi puso su mano sobre mi cabeza, reconfortándome.

— No lo sé, Itachi. Lo he pensado últimamente —caminé mientras observaba el cielo—. Después de lo que pasó me he sentido extraña, ahora mismo estoy sintiendo que no encajo en mi familia, es...

— Ey —nos detuvimos. Itachi tomó con delicadeza mi barbilla y me obligó a mirarlo—. Por supuesto que encajas, y no importa lo que hagas, puedo asegurarte que tus padres y tú hermano te seguirán amando. Así que no debes preocuparte por eso, deja de pensar en esas cosas, ¿de acuerdo?.

Solté un suspiro y tomé la mano de Itachi que tenía sobre mi rostro

—De acuerdo —sonreí y entrelacé mis manos con las de él, después seguimos caminando.

— Cuéntaselo a papá si aún no te sientes tranquila. Sabes bien que él te entenderá —dijo convencido—. Además, creo que te sentirás más segura hablando de ese tipo de cosas con él que con tus padres. Él te ayudará a superarlo y a saber controlar tu fuerza, debes confiar en él.

— Si, tienes razón —sonreí débilmente—. Tal vez hable con él.

🍥

Pasaron tres meses desde que se desató la guerra. Tuvimos miles de bajas, tantas que los altos mandos tuvieron que hacer que los maestros de la academia ascendieran a chūnin a los miembros más jóvenes que ahora se encontraban en rango gening para que pudieran salir y combatir para proteger a la aldea. Entre esos gening ascendidos estaban mi hermano y Rin.

— Tal vez ya no pueda estar contigo más tiempo —me dijo mi hermano mientras paseábamos por el parque.

— ¿A qué te refieres? —un sentimiento extraño comenzó a punzarme en el interior.

— Probablemente nos asignen pronto una misión fuera de la aldea, el equipo Minato en uno de los pocos que se han mantenido en pie. La guerra ha terminado con la vida de muchas personas inocentes, ha causado estragos, ya casi no quedan jounins.

Solté un suspiro. ¿Qué podría decirle?, ¿que no fuera?. Era el sueño de Obito, proteger a los más débiles y convertirse en el mejor Hokage. Pero dentro de mí creció el deseo de que dejara a todos atrás y se salvara él mismo, sabía que Obito no era esa clase de persona, él pondría a todos antes que él, así era él.

— Voy a entrenarte.

Me sacó de mis pensamientos y lo observé con una ceja curvada.

— ¿Qué?.

— Sé que no se puede comparar a los entrenamientos del tío Fugaku, pero... —me miró a los ojos—. Quiero hacer algo por ti. Son tiempos difíciles, hermanita. Lo que más quería era que tú pudieras vivir una vida tranquila, alejada de toda la maldad del mundo, pero eso es imposible. Sabes que esa es una de las razones por las cuales quiero convertirme en Hokage, quiero terminar con la guerra para que tú y todos los que amo puedan vivir felices y en paz.

— Obito... —sentí que se me cerraba la garganta.

— Haré todo lo posible para que estés a salvo, lo prometo.

Nuestra promesa «Shisui Uchiha»   [EDITANDO]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora