En la mañana Maki de despertó temprano y fue a vigilar el área, después de un rato nos reunimos con los demás equipos y dimos nuestro informe.
— Está al norte —informó Itachi—. Los cuervos lo vieron.
— De acuerdo, partiremos enseguida —Shisui habló.
— Shisui, deberías descansar —le dijo Kurenai—, no dormiste nada anoche.
— Anaru —Maki me miró—. Tú tampoco dormiste anoche.
Shisui me miró, ambos nos veíamos cansados.
— Nosotros podemos adelantarnos —dijo Asuma.
— Yo puedo quedarme con ustedes —dijo Guy—, vigilaré mientras duermen.
— De acuerdo —Shisui accedió y los chicos se fueron.
Dormimos un par de horas y después alcanzamos a los chicos, volvimos a formar los mismos equipos y recorrimos el perímetro.
— Anaru, ¿puedo hacerte una pregunta? —miré a Maki, quién se dedicaba a buscar alguna pista entre la maleza.
— Claro.
— ¿Por qué te convertiste en kunoichi?.
La miré por unos segundos, la verdad es que no sabía qué responder y en ese momento yo misma me planteé esa pregunta.
— No lo sé, creo... —pensé en Obito—, creo que por mi hermano.
La chica asintió sin preguntar nada más y siguió con lo que hacía.
— ¿Y tú? —le pregunté—. ¿Por qué te convertiste en kunoichi?.
Maki caminó lentamente hacia mí y después se sentó en un tronco que estaba cerca, me acerqué a ella para escucharla mejor.
— Cuando tenía siete años mi hermano mayor murió en el ataque del Kyūbi —su voz se escuchaba dolida—. Murió protegiéndonos a mamá y a mí. Antes de morir mi hermano me pidió que cuidara de mamá y creí que la única forma de hacerlo era volviéndome una kunoichi —sus ojos comenzaron a ponerse acuosos—. Mamá lo es todo para mí.
Sentí que el corazón se me apretaba.
— Muchas veces el amor hacia los demás es lo que nos hace que nos levantemos, aunque ya no tengamos fuerzas.
— Anaru —sujetó mi mano—. Tienes un gran corazón, te pusiste a servicio de la aldea para protegernos a todos, tus papás estarían orgullosos de ti por amar a la aldea como ellos lo hicieron.
— No —aparté mi mano.
— ¿Qué?.
Me levanté de su lado y la miré a los ojos —Maki, si fuera por mí dejaría que los adultos resolvieran sus problemas y murieran los que tuvieran que morir. Pero.. —apreté la mandíbula y mis puños—. Ustedes no tienen la culpa...
— Anaru —ella se levantó para decir algo, pero se escucharon varias ramas crujir cerca de nosotras.
Ambas nos pusimos en guardia de inmediato y él apareció.
Mi cuerpo sintió una corriente eléctrica y mi corazón latió como un caballo desbocado, sentí la sangre hervir.
— Maki, vete.
La chica estaba temblando detrás de mí, no se movía.
— ¡Maki!.
La chica reaccionó. Invoqué a Daiki y apareció como un imponente lobo adulto, al ver al enmascarado le mostró los dientes y estuvo a punto de atacarlo pero lo detuve.
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Nuestra promesa «Shisui Uchiha» [EDITANDO]
FanfictionEso es lo que los Uchihas nos han enseñado, nos han enseñado a temerle al amor, a creer que del amor nace el odio, pero no es así -levantó la vista y miró al cielo-. Yo no creo eso. ¿Entonces en qué crees? -sus palabras hicieron crecer dentro de mi...