Cheryl Morgan |Fanfic Pecados Placenteros|

9

—Vamos, Cheryl, te necesito allá.

Hablaba con Christopher sobre una fiesta o algo por el estilo que iba a ver hoy. No me da explicaciones de nada. Sólo me llama y me dice que en la noche saldremos.

—No quiero ir.

—Cheryl, maldita sea. —lo escucho suspirar— Iré por ti a las siete, más vale que estes lista a esa hora.

—Chris, en serio no tengo ganas de...

Me colgó.

El orangután maldito me colgó la llamada.

Es un idiota.

Ya han pasado varios días de lo ocurrido. Mamá está bien gracias a Rachel, quien tuvo que ver en que ella regresara. Esa mujer es increíble, no es raro que mi hermano se haya enamorado de ella.

Me quedé unos días con mi madre, pero al parecer la señora ya se encontraba mejor y me terminó botando de su casa. Bueno, no tanto así, pero yo sentí que me botó.

Sobre lo de hoy... no estoy segura de ir. Mis ánimos no están para aguantar a personas que en su 97% no conozco. Tampoco sé la razón por la que mi odioso hermano mayor quiere que vaya. Nada tengo que ver ahí.

Parece que por un día que no lo llame o no me vea cree que me pasó algo.

Mi teléfono comenzó a sonar por segunda vez en el día. Era un número desconocido. Si es sobre el desfile y los diseños voy a colgarme del techo.

—¿Qué?

—¡Cheryl!

Ay no, ¿por qué?

—¿Qué quieres, Gema? —dije sobándome la sien.

—Hoy es mi cumpleaños, y quería invitarte al lugar en donde la pasaremos. —me da migraña— ¿Estarás ahí, verdad?

—¿Esto tiene que ver con un lanzamiento o algo así?

—¡Sí! Y no es que quiera ilusionarme, pero, tu hermano me va a pedir matrimonio ahí.

—¿Perdón? —esto debe ser una broma...

—Vi el cofre en su oficina, ¿puedes creerlo? —no, no podía creerlo— Iras, ¿verdad?

Sonreí.

—Claro, estaré allá. —colgué antes de que dijera algo más.

Cumpleaños de Gema. Supuesta propuesta de matrimonio. Muchas personas que lo presenciarán.

Sería bueno ir a divertirme un rato...

• ────── 🖤 ────── •

Faltaba poco para las las siete de la noche. Me había puesto un vestido hermoso, ondulado mi cabello y maquillado. Me miré al espejo y sonreí.

Soy demasiado hermosa.

—Escucha, mamá irá a una fiesta y tú te quedarás aquí. —comencé a hablarle a Enzo, quien se encontraba acostado en mi cama— No hagas desastres y compórtate como un perro adulto y decente.

Un mensaje de Chris llegó avisándole que ya estaba abajo esperando por mí.

Me puse mis tacones y tomé mi celular junto con una pequeña billetera que hacía juego con el vestido. Bajé de mi edificio encontrándome con la camioneta de mi hermano.