Mi esvástica: [LIBRO #1- TERMINADO]

Temporada 1: [Capítulo 13]

Anteriormente en: Mi esvástica

—Me preguntó qué sentirá Urss si le hago lo mismo que me hizo...—susurré cerrando mis ojos.

Era una duda que tenía años en mi, pero por ahora, sé que no es el momento de llevarlo a acabo, todo tiene un tiempo y yo debo saber manejar los míos. Si Urss me propone una relación política, sería una excelente oportunidad para atacar su vulnerabilidad; no voy a rechazar esta oferta.

POV. REICH
Me levante en medio de la madrugada, sudando frío y sintiendo en mi cuerpo escalofríos que son los signos de vivir un terror impensable. Y así era, una horrible pesadilla había interrumpido mi sueño. Me senté en la cama y me percaté que me quede dormido aún con la carta de Urss en mi pecho y no me había puesto la pijama; mire ese pequeño sobre, lo tome de nuevo entre mis manos y ya con algo de inspiración, me senté en el escritorio de mi habitación dispuesto a escribir la primera carta de correspondencia para Urss después de 14 años de una seca ley de hielo.

Tome el bolígrafo favorito de mi padre, el mismo que había tomado de sus manos cuando lo vi muerto en su oficina. Acaricié suavemente mis labios con la punta del mismo objeto, pensando en cuales serían las mejores palabras para emplear en mi carta, tome una hoja en blanco y decidí sacar mi lado más poético-político para "cautivar"al gigante rojo.

[__ de Noviembre de 1936]
Dirigido a Unión Soviética;

En busca de mantener únicamente una relación política por la prosperidad de nuestras naciones, aceptó tu propuesta, con una única cláusula: ser mi aliado más fuerte y apoyarme armamentística mente hasta que yo, el Führer, te lo indiqué.
Si niega mi propuesta, no responda a esta carta.

-T.R

Suspiré dejando el bolígrafo aún lado y metiendo esa nueva carta a un nuevo sobre. Indicaré mañana a la primera hora que esta sea enviada hacia Urss. Era difícil para mi tener que volver a interactuar con el, quizás solo sea un pretexto para verme de nuevo o de verdad cumplirá su palabra y se mantendrá al margen; me pregunto si él a cambiado en estos 14 años... a veces debo admitir que lo extraño, más por las noches, en ese momento único que teníamos solo nosotros dos.

Cuando sentía sus manos acariciar mi piel y su mirada me transmitía tanta paz, es tristemente irónico, ya que no puedo mentir en decir que nunca me he vuelto a sentir así desde que me aparte de él; Urss era la vida que nunca pude vivir. Y que lamentablemente ahora nunca lograre tener.

Me acosté de nuevo en mi cama sin antes cambiarme de ropa, poniéndome la pijama y abrazando una almohada, intenté relajarme. Dejándome caer en un profundo sueño que ya necesitaba.

|29 de septiembre de 1938|

Alemania, Italia, Gran Bretaña y Francia firman el Pacto de Munich que obliga a la República Checoslovaca a ceder a la Alemania nazi los Sudetes, incluyendo las posiciones de defensa militar clave de Checoslovaquia.

En otra parte del mundo,en donde la guerra comenzaba a teñirse de su color carmesí, dos potencias esposadas en matrimonio sentían un temor sobre lo que estaba sucediendo; Reino Unido y Francia. Era impensable para ellos que después de todo lo que hicieron a su alcance para que Alemania no resucitara de las cenizas no hubiese funcionado, estaban frustrados y no buscaban generar otra guerra después de aquella que mato a tanta gente, ambos, pensaban en una solución pacífica.

Obviamente este era un movimiento muy dócil contra aquella dictadura que comenzaba a levantarse en Europa occidental, pero, ¿que deberían hacer?, ¿Levantarse contra esta o buscar una tregua? Pues la primera sonaba como una buena idea, pero, solo causaría más violencia y la segunda, era sutil, suavemente correcta; a costa de perder su orgullo al ceder ante lo que el Nazi pedía, literalmente le estaban cumpliendo su capricho.