DOS ESTACIONES A SU LADO © (Completa) Sin editar

ADIOS A MIS "DOS ESTACIONES A SU LADO"

"Lo bueno de la vida es que te permite decidir entre olvidar o seguir amando"

Scott Campos Barrantes

No recuerdo nada más, desperté en esa habitación. Me dolía la cabeza y mis heridas habían dejado de sangrar, las tenía vendadas. Me fui a la ducha, me arreglé y al ver nuestra fotografía juntos... mis ojos derramaron lágrimas.

Fui a casa, mamá no dijo nada, me encerré en mi habitación por dos días y cuando al fin decidí salir, siempre volvía al mismo sitio. Al lugar donde nos conocimos, sentado donde ella se desnudó.

Mi corazón no soportaba la tristeza, desvíe la mirada y vi un papel que sobresalía a un lado de la banca. Lo cogí, era una carta de despedida de Aytem.

Al parecer ella la escribió y la dejo allí, porque sabía que volvería. Cuando abrí está carta, en ella estaba escrita lo siguiente...

" Hola... Mi amado, lee esto y...

"Diiiinnng Doonnng" el sonido de una campana se escucha.

         — Muy bien la clase a terminado. Nos vemos la próxima semana.

El ambiente es un salón de clase con estudiantes de preparatoria.

        — ¡¿Qué?! — Uno de los alumnos se puso de pie — Quiero saber el final... ¿Qué paso luego?

       — ¿Qué no oíste? La clase terminó — Respondió una alumna.

      — Inohue ¿Conocías esta historia? ¿Es la vida de tu padre?

      — No tengo porque hablar de mi familia. — Contestó.

      — Pues mientras ustedes discuten, el maestro acaba de irse — Señaló un compañero.

De pronto una de las chicas se sube sobre una carpeta y dice:

      — El que quiera convencer al maestro para que continué la historia que venga con nosotros... Inohue convencerá a su padre para que nos cuente el final.

      — ¿Qué? ¿Y por qué yo? — Respondió.

      — ¡¡ Por favor Inohue, no seas mala!! — Gritó la clase.

      — Vale, vale... Los llevaré a casa, él estará ahí, escribiendo como siempre.

Inohue llevó su clase a casa, su padre es escritor y su nombre es Scott.

     — Papá, tienes invitados — Dijo al llegar.

     — ¿A qué ha venido toda la clase? — Respondió él.

     — ¡Vinimos a saber el final de la historia! — Gritaron todos.

     — Pues compren los libros, ya hay dos publicados — Interrumpió Inohue.

     — Lo haremos, pero ahora queremos escucharlo del propio autor.

     — Ustedes están locos — Contestó ella.

Scott sonrió un poco y luego los invitó a la biblioteca.

     — Pues vamos — Echo a andar.

     — ¡¡Genial!! — Volvieron a gritar.

Toda la clase se dirigía con él.

     — ¿Alguien notó el lago que está detrás de la casa? — Preguntó un alumno.

     — Deja de fisgonear Rodrigo o el maestro nos echara a todos — Susurró la presidenta de clase.

     — Bien hemos llegado — Señaló Scott — Pueden sentarse donde quieran.

El profesor sale un momento.

     — ¿Es aquí donde paso? En esta biblioteca donde, ellos...

Inohue se quedó en la puerta...

     — ¿Acaso no vas a sentarte? — Dijo Rodrigo.

     — Pues ya he escuchado esa historia miles de veces — Respondió.

     — Entonces ¿Por qué no te has ido?

     — Eso a ti no te incumbe. Además, esta es mi casa.

     — Guarden silencio ustedes dos, el maestro va a empezar — Dice la presidenta.

Todos en la habitación se quedan en silencio. Al regresar Scott, su hija lo detiene.

     — ¿Enserio serás tú quien lea esta parte de la historia?

     — Sí — Colocó su mano sobre el hombro de su hija — Yo leeré esta historia para ellos, soy el autor después de todo.

     — Pero...

     — No te preocupes todo está bien. — Scott besa la frente de su hija.

Luego de esto, se dirigió a su escritorio, con su nuevo libro en manos. Sus estudiantes estaban ansiosos de escuchar la continuación de su historia.

     — Esto sucedió dos años después de leer la carta.

    — ¿Y qué decía la carta? — Interrumpió Rodrigo.

    — Guarda silencio — Ordenó Inohue.

    — Les diré que estaba escrito, pero ahora dejen que les cuente el nuevo comienzo del final de Dos estaciones a su lado — Respondió Scott.

La vida siempre hace lo que se le da gana con nosotros, a veces nos da felicidad y otras veces nos lo quita. Así, sin esperarlo, solo por capricho se nos arrebata todo lo bueno que hemos conseguido, como si nos dijera que todo es temporal. Es aquí donde el amor juega su papel, es aquí donde la leyenda del hilo rojo que te une a tu amor verdadero, toma su forma.

Todos guardaron silencio para oír la continuación de la historia, lo que pasó dos años después de la despedida de sus protagonistas.