Olivia Eades es psicóloga y periodista con una vida hecha en el 1970, con su madre y hermano, sin deseos de casarse o tener hijos, sin preocuparse por la comida que todos los días tiene en su mesa y sin tener que luchar cada segundo para sobrevivir...
Este libro termina por aquí y continua en la segunda parte que ya se encuentra disponible en mi perfil y es el siguiente:
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Muchas gracias a todos los que llegaron hasta aquí con esta primera parte de la historia y espero que les gustara. Es un libro que la verdad yo disfrute muchísimo de escribir y la aventura de Olivia y Jonathan realmente me ha atrapado en el proceso de escritura.
Cuando empecé este libro, no estaba muy segura de hacerlo, porque pensé que la idea no gustaría. Y de hecho me demoré seis meses (aprox) en empezar a escribirlo. Cuando lo publiqué, pensé que casi nadie me leería y que serían tan solo algunas personitas atreviéndose a darle una oportunidad, así que, sin duda alguna, me sorprendí demasiado cuando vi a tantas personas llegando.
Esta historia, significa mucho para mí, pues tengo una gran conexión con el pasado y una gran fascinación por las épocas, así que poder compartirles lo que conozco de esos periodos antiguos, es emocionante y divertido, más aún cuando veo que ustedes también lo disfrutan.
Como sabrán, he dejado un montón de enseñanzas a lo largo del libro, sobre la época y espero que al menos hayan aprendido algo nuevo o no, pero sí que hayan disfrutado. Yo quería tocar el tema de los corsés, no son una herramienta usada por el patriarcado para oprimir a las mujeres y pues las mujeres no eran ningunas débiles.
Los hombres prácticamente ni interferían en asuntos de mujeres, porque se consideraba grosero. No interferían en el embarazo, en la menstruación, en la moda, en la depilación. Todo eso eran cosas de mujeres y ellos permanecían fuera. De hecho hay un caso muy gracioso, involucrando a una asesina, unos policías y una camisola manchada en sangre que pensaron era de la menstruación, si quieren algún día se las cuento en un directo.
La depilación fue también, algo creado por mujeres para mujeres y luego se convirtió en el ideal de belleza por ahí en los 70s.
Otra cosa que creo es genial comentar, es que en la época victoriana (siglo XIX) editaban las fotografías. Así es, tenían una forma de Photoshop muy astuta para modificar sus cinturas y hacerlas aun más pequeñas.
Espero que hayan disfrutado de la historia, para mi fue muy emotivo todo y pues...Ojalá decidan acompañarme en el segundo libro, dónde continuaremos esta aventura y exploraremos nuevas rutas...Algo me dice que los Morgan podrían hacer un gran viaje ¿a través de las aguas quizás? ¿Será que veremos a los Morgan visitando nuevas tierras?
Los amo un montón y muchas gracias por acompañarme.
