Vuelo #80

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Notas:Historia de relleno #???

Como señor del pico Shang Qinghua ha aprendido desde sus inicios como discípulo a tratar con la gente, en su vida original no era muy bueno para socializar -tampoco en esta- pero como señor del pico An Ding que era debía tratar con muchos discípulos y comerciantes para los suministros de la secta.

Durante su tiempo como discípulo ha conocido a cantidad de gente, sabe bien donde se vende bueno, bonito y barato en la ciudad, dónde encontrar los mejores precios y claro ya se ha ganado el favor de mucho de los comerciantes para dejarle un buen precio. Pero desde luego qué comerciante perdería la oportunidad de que la gran secta Cang Qiong no usara sus productos. La señora de la tienda de textiles diría que la seda más fina es la que usan los señores de los picos, el herrero que le ha proporcionado las mejores armas y el mejor acero que tiene, por eso sus armas son tan afiladas, hasta el hombre de la librería diría que el papel con el que escriben los grandes maestros es de su tienda.

Shang Qinghua desde que se había convertido en señor del pico no había tenido que volver a bajar a la ciudad más que para asuntos muy puntuales, su trabajo ya no le dejaba andar por allí en las calles en medio de la multitud. Aunque no era el señor del pico más llamativo y al que los aldeanos recordaran más, si mencionaba el nombre de la secta y su estatus cómo señor del pico era más que suficiente para cambiaran de rostro y su amabilidad se vislumbrara.

Últimamente ha estado más tiempo aquí que en el reino del norte, después de todo el caos desatado por la casi fusión de ambos mundos, hay caos a nivel administrativo para resolver los daños causados y mantener la secta funcionando. Esta vez se ha escapado del deber.

Ha decidido darse un respiro de todo y de todos. Quizás lo mejor era andar pretendiendo que era un cultivador normal o un simple aldeano para evitar llamar la atención, la suerte de tener un rostro tan poco llamativo era que nadie le recordaría, al menos estos NPCs de 40 de IQ no lo harían, nombres y rostros como los de Shen Qingqiu, Yue Qingyuan, Liu Qingge o Mu QingFang sonaban mejor entre las personas.

El único que parecía haberse acordado de él pese a su aspecto simplón era el vendedor de la tienda de libros.

Este era un hombre igual de simplón que él, en su época como discípulo interno, este chico había sido el hijo del dueño de la tienda por lo que ambos estuvieron en una posición como aprendices de cierta manera. Shang Qinghua debía conseguir un descuento para poder conseguir todo lo que su Maestro le pedía y para ese joven había sido su primera vez tratando con el que sería el futuro señor del pico.

A Shang Qinghua le agradó el chico y a él Shang Qinghua.

No eran amigos como tal, pero podría decirse que mantenían una relación cordial más estrecha que la de vendedor-cliente.

-Señor del pico Shang - el había sido muy amable para percatarse de que era él, bueno quizás era su culpa por ahora parecer más un discípulo que un señor del pico - Tenemos nuevas novelas en nuestra tienda, hay algunas que han sido un éxito.

- ¡Oh! - Shang Qinghua miró la estantería dónde estaban los libros más vendidos y a la otra esquina estaban aquellos no tan populares.

- Su libro también se ha vendido bastante bien, estas son las regalías de este mes - dijo sacando una bolsa con 100 piezas de jade.

- Yo también traigo nueva mercancía - dice ya como si fuera costumbre tiene varios ejemplares de su nueva antología, pese a estar ocupado con trabajo hasta el cuello, siempre tiene algo de espacio para escribir sus hobbies.

- Justo esperaba el nuevo volumen de su antología, realmente ha resultado muy popular, trabaja muy duro maestro Shang.

- No es nada, la verdad es que se me hace algo fácil escribir estas cosas- es capaz de vomitar palabras sin control sobre el papel, claro, después de todo en su vida anterior podía escribir relajado casi diez mil palabras por capitulo, una barbaridad si lo que allí se exponían eran obscenidades, su imaginación es muy volátil y por escribe mucho sin pensar, solo idealiza las cosas y plasma lo que cree en base a su imaginación, realmente lamentable como diría el hermano Pepino.

Como conquistar a un autor idiota y no morir en el procesoWhere stories live. Discover now