Vuelo #91

1.5K 298 24
                                    

Es esa época del año que tanto le desagrada a Shang Qinghua, después de una temporada en el palacio de hielo, volver a su pico se le hace un poco cuesta arriba, pero ya no puede seguir ignorando los llamados de sus discípulos, como señor del pico también tiene deberes que tiene que cumplir.

¡Ah, pero el calor!

Es verano en el mundo humano, el choque de temperaturas es evidente, su pico parece arder en llamas, sus discípulos se cocinan lentamente en sus túnicas mientras están estresados con el papeleo, cuando ven a su Shizun parece que han visto a su salvación, claro porque Shizun hará todo el trabajo atrasado.

Su casa de descanso es un pequeño horno repleto de papeles, se pregunta cómo es que no se han quemado aún.

El calor de este verano es insoportable, siente que se derrite y no ha pasado mediodía desde que ha llegado.

Realmente extraña a su rey en este momento, aunque solo le viera de manera acusadora desde la esquina, su presencia sería bien recibida.

--------------------------------------------------------------

Mobei-jun odia estos momentos cuando Shang Qinghua vuelve a su pico, está tan acostumbrado a su presencia que a veces se encuentra a sí mismo hablándole a la nada, o cuando debe delegar algo el primer nombre que cruza por su cabeza es el de Shang Qinghua, entonces un sirviente le recuerda que el Maestro Shang no está presente.

Shang Qinghua dice que el tiempo pasa volando, no por nada llevan años conociéndose y es como si fuera ayer cuando comenzó todo, para los inmortales el tiempo es un suspiro.

Aun así, ha pasado ya más de una semana y Mobei-jun se encuentra perfeccionando sus habilidades para cortejar a Shang Qinghua, sabe que sus habilidades culinarias son un desastre, en su vida había pisado la cocina que no fuera para robarse algo de carne seca de la despensa.

Quizás debía tomarse este tiempo para pulir sus habilidades, el chef que le mira desde el otro extremo de la cocina alaba sus habilidades, aunque sabe que no es suficiente para satisfacer el paladar de Shang Qinghua.

Ya luego de una sesión intensa en la cocina, Mobei-jun piensa que debería presentarle a Shang Qinghua la próxima vez su nuevo platillo de fideos, está seguro de que cuando lo pruebe se lanzará a sus brazos y...

Su rostro permanece imperturbable como un témpano de hielo, su tío seguro se burlaría de sus ridículas fantasías en este momento.

Ya en la segunda semana Mobei-jun está hastiado, parece un animal salvaje que necesita la presencia de Shang Qinghua a su lado de manera urgente.

Por lo que abre un portal de sombras directo a la casa de descanso del otro cuando le ha hecho prometer que no iría allí, puede aguantar un reclamo o dos de parte de su humano.

¡Mierda!

Este lugar es horrible. De inmediato la sensación de calor en él le ha tomado por sorpresa por suerte su qi demoniaco de inmediato balancea su temperatura para que el calor abrasador no le afecte tanto, aun así, puede sentir la estela de calor que le hace pensar que está en el mismísimo infierno en la tierra.

De inmediato busca a Shang Qinghua, hay pilas de papeles por doquier, entonces cerca de la ventana encuentra al señor del pico An Ding, cuya cabeza se asoma entre las pilas de papeles.

Trata de no hacer ruido, aunque es imposible que Shang Qinghua no se percate de su presencia cuando lo escucha quejarse del calor entonces libera un poco de su energía para refrescar el ambiente.

Shang Qinghua se percata de este gesto y levanta la mirada, se encuentra con los ojos azules de Mobei-jun y en lugar de reclamarle parece emocionado, su pecho se enfría un poco más al ver la reacción del otro.

- ¡Mi rey! ¿Qué hace aquí? ¡Ah! eso no importa estoy tan feliz de que haya venido es mi salvación, pensé que moriría calcinado en este lugar - Shang Qinghua se levanta de su asiento y corre para acercarse y estar más fresco.

Lo que Mobei-jun no se esperaba ver era a un Shang Qinghua que vestía un pequeño short que apenas cubre sus muslos con una pequeña pieza de lencería cubre apenas el pecho de Shang Qinghua, esas que ha visto en el barrio rojo...

Mobei-jun nunca había visto la blanca piel de Shang Qinghua aparte de la de su cuello y brazos en diferentes ocasiones, esto es...

El frío se hace más intenso en la casa de descanso y Shang Qinghua se apega a él sin dudarlo pegando su piel sudada a la de su pecho descubierto.

- Mi rey, le extrañaba tanto, créame podría estar más que feliz en el rincón más helado del palacio.

Mobei-jun está congelado en su propia posición, no sabe si moverse o decir algo, el rostro sonrojado y sudado de Shang Qinghua con el cabello pegado ligeramente a su frente es más de lo que puede soportar, por mera inercia su mano toca la espalda descubierta de Shang Qinghua.

- ¡Ah!

Mobei-jun de inmediato aparta la mano, pero Shang Qinghua le asegura que su rey puede tocarle todo lo que quiera, sus manos son las mejores.

Mobei-jun hace acopio de todo su autocontrol en ese momento, y toma a Shang Qinghua de sus hombros apartándolo un momento, no sabe si lo ha hecho para ver más de cerca la figura tentadora frente a él o qué.

- ¿Por qué Qinghua está vestido así?

- ¡Ah! mi rey esto... - Shang Qinghua no parecía muy consciente de como lucía en estos mismos instantes - Es que como ve hace mucho calor, las túnicas son muy gruesas y pesadas, incluso la tela más ligera es agobiante, así que tomé algo de ropa interior que yo mismo confeccioné y un par de pantalones los cuales corté para estar más cómodo, a mis discípulos les pareció exagerado pero luego todos alabaron el ingenio de su Shizun y están usando la ropa más cómoda para trabajar. ¿A mi rey le disgusta este vestuario?

Es una pregunta ridícula ¡claro que no!

Pero... sí Shang Qinghua está vestido de esta manera siempre significa que otros más pueden verle así, eso es imperdonable.

- Debiste llamar a este Mobei-jun para luchar contra el calor- dice un tanto cortante.

Shang Qinghua alza una ceja y se ríe: - N-no no podría llamar a mi rey por algo como esto, aunque estoy muy feliz de que mi rey haya venido.

- Deberías utilizar tus túnicas.

- ¿Mi rey? pero... ya le expliqué del calor, creo que usted mismo puede sentirlo.

De inmediato Mobei-jun crea un gran bloque de hielo en medio de la habitación que hace que todo se sienta más fresco e incluso Shang Qinghua considere cubrirse un poco más.

- La próxima vez que uses un atuendo como ese, será solo en mi presencia - dice Mobei-jun para lanzarle un par de túnicas abandonadas en el suelo.

Como conquistar a un autor idiota y no morir en el procesoWhere stories live. Discover now