Como conquistar a un autor idiota y no morir en el proceso

Vuelo #92

- ¿Pueden dejarnos a solas? - dice Shen Qingqiu mirando por encima de su abanico a ambos demonios.

Luo Binghe, aunque no quiera se ve en la imperiosa necesidad de hacer caso de lo que Shen Qingqiu - su esposo- ahora le pide.

Mobei-jun mira fríamente a Shen Qingqiu quien está sentado en la mesa tomando tranquilamente el té con Shang Qinghua, ambos se reúnen esporádicamente para estas charlas y ambos demonios suelen beber vinagre lo que estas duran.

Shang Qinghua trata de convencer a su rey de que está bien, después de todo tiene algo importante que hablar con el consorte Shen. Luo Binghe no parece muy convencido, se pregunta ¿por qué no lo puede decir por carta? pero su Shizun es claro con sus palabras y ambos demonios abandonan el salón.

- Eso fue rudo, hermano Pepino, creí que mi hijo protagonista haría de mí una vara humana.

- Tonterías la mirada de Binghe era completamente adorable, en cambio tú rey parecía querer enviarme a una cámara de torturas - toma su taza de té.

- Eres muy gracioso hermano Pepino, no sabes que mi rey no te haría nada, mucho menos actuaría a mi favor con Luo Binghe aquí.

Shen Qingqiu no dijo nada, pero él sabía lo que sus ojos habían visto.

-Entonces dime ¿qué necesitas ahora?

-No seas así hermano Pepino, al menos un "¿Cómo has estado?" Yo tampoco soy tan frío - Shen Qingqiu entrecerró sus ojos Shang Qinghua supo que estaba jugando con su paciencia, no sería bueno molestar al consorte real con sus tonterías cuando Luo Binghe estaba en el mismo recinto.

-Habla ¿Qué es eso tan urgente que necesitas saber?

-N-no lo hagas sonar así, no es tan urgente la verdad, pero si necesito saberlo - comenzó a jugar con sus mangas y Shen Qingqiu esperaba que se explicara - Es sobre mis novelas, sabes estoy escribiendo una nueva, es mucho fanservice, pensaba documentarme bien, pero la única persona de confianza a la que puedo preguntarle es a ti, hermano Pepino, hónrame con tu sabiduría y experiencia - inclina su cabeza.

Bien al menos el idiota hacia lo suficiente para halagarlo, pensó Shen Qingqiu.

Afuera de la sala de té, Luo Binghe y Mobei-jun parecían leones enjaulados, no podían escuchar del todo su conversación y eso inquietaba más a Luo Binghe.

-Debemos hacer algo.

- ¿Qué sugiere mi señor?

- No lo sé, si entramos a dejarles algunos postres para picar dejarán de conversar y Shizun no dirá nada hasta que nos marchemos. No entiendo ¿por qué tienen que hablar a solas? más te vale que tú sirviente no esté diciéndole cosas indecentes a mi Shizun.

La mirada de Mobei-jun se endureció más y Luo Binghe hizo un puchero, desde el punto de vista de Mobei-jun el también sentía lo mismo, ¿Por qué Shang Qinghua debería hablar con el consorte Shen de "algo personal"? Pensaba que por algo se había ganado el título de "Mejor amigo".

Luego de darle tantas vueltas al asunto Mobei-jun sugirió una manera de espiarlos sin que se dieran cuenta.

Usando sus sombras podrían ver y escuchar ocultos, la sombra más grande que se proyectaba era aquella bajo la mesa de té, no les permitía ver sus rostros, pero bien que podían ver sus pies y escuchar con claridad.

- Eres un genio Mobei - alabó Luo Binghe y Mobei-jun le hizo un gesto de permanecer en silencio sino serían descubiertos.

Esconderse y vigilar en las sombras era algo que Mobei-jun dominaba a la perfección, después de todo tantos años siguiendo a Shang Qinghua, esto no era nada.