WILLIANNY MERAN
Parte III.
Advertencia: 💥
✨La Azafata✨
⚜️Emma James⚜️
-Por fin te encontré, Ved ́ma...
¡Dios mío! El hombre que se encuentra a mi lado, sentado en la orilla de la cama muestra una sonrisa de esas que te dicen que será tu último día de vida. Solo lleva puesto unos vaqueros, su abdomen me aliviana la saliva y su...
Por más que me esfuerce en liberarme de las esposas no lo logro. Lo peor de la situación es...
Tuvo todo este tiempo mi móvil, o sea, que vio todas esas escenas bochornosas que he hecho. Mi tórax se revienta, no solo por eso. Sino que, también es el empresario con el cual había conversado todas las noches. Él se había burlado de mí, mientras me tocaba, mostrándole como me tenía. No se a donde mirar, me quiero arrancar la cara. No me importa si sigue mirándome desnuda. No puedo gritar porque no sé lo que tengo en la boca. El ruso se pone de pie y se dirige hacia una de las mesas. Mi nerviosismo se da a notar cuando veo que se acerca con un látigo negro en sus manos, mientras me dedica una mirada asesina. Trago grueso cuando me rodea constantemente. Sacudo mi cuerpo, buscando liberarme, pero no lo consigo.
Se acerca a quitarme la mordaza, la cual brilla por mi saliva y lo miro irascible al notar la figura que tenía entre mis labios.
- ¿Qué harás? -Le pregunto furiosa y excitada.
-Que no haré, Ved ́ma-. Me dice, y su acento ruso me pone a gotear como nunca en la vida. -Tú me dirás a quien le enviaste esos videos.
Me pide, pero no le respondo y el sudor se desliza por mi frente cuando resbala su lengua por la piel de lo que tiene en la mano y azota mi sexo, causando respingos en mí. Arremete contra mi clítoris, y lo peor es me contoneo a pesar del ardor. Como no oye respuesta de mi parte me golpea los pechos hasta tornarlos rojos. Todo me arde, mis mejillas, las piernas y es debido a los azotes. No se que me sucede que no puedo dejar de observarlo. Su rostro furioso y esa virilidad que no había visto en ninguno.
-Tengo todo el tiempo del mundo, cría de mierda.
Suelta lo que tenía sostenido para sacar de su pantalón un artefacto que parece de goma, y cuando me doy cuenta de lo que es, las lagrimas se desbordan de mis ojos, mientras escucho su risa ronca. Se acerca de nuevo a mí, y me pellizca los pezones,
luego desciende por mi plano abdomen con besos castos hasta llegar a mi centro húmedo.
-Mi niña caliente. -Susurra sobre mi clítoris haciendo que me desespere, hasta que de repente mi cuerpo se mueve por si solo cuando entra en mi interior un objeto que provoca millones de vibraciones en mi cuerpo. -Vamos a ver si eres resistente.
El ruso toma asiento frente a mi en una de las sillas mientras el rostro me arde debido a la deliciosa tortura que hace que mis fluidos mojen la sabana de la cama. Los labios me duelen de tanto morderlos. Mis piernas no dejan de temblar y mis pechos se sacuden.
- ¿A quién le enviaste esos videos?
- A Henry Cavill.
- ¿A quién? -Me pregunta confundido.
-A Superman, que delicia. ¿No crees?-Le digo mientras mi garganta suelta una risa nerviosa.
-No estoy bromeando, niñata-. El hombre aumenta la velocidad del electroestimulador que tengo incrustado y no puedo contener los chillidos que salen de mi boca. Al no tener una respuesta de mi parte me coloca unas pinzas en los pezones, las cuales hacen que mis lágrimas aumenten mientras mi sexo chorrea aún más.
