BETSY T. DE LA TORRE
Disfrútenlo, me reí y sonreí mucho escribiendo esto ✨😍
Emma
Primeras veces, reacciones
Sentir un movimiento inusual en mi vientre me despierta de golpe. Me muevo tratando de ser cuidadosa pero al parecer no lo consigo ya que Ilenko se despierta sobresaltado y mantiene su agarre sobre mi panza de 5 meses de embarazo.
-¿Que pasa Ved'ma? ¿No puedes dormir?
-No, nuestro hijo pensó que era buena idea ponerse a usarme como trampolín me patea tanto que no puedo dormir.
Suelta una carcajada ronca que inevitablemente causa que mis pezones se ericen. Últimamente mis hormonas han enloquecido, quiero tenerlo encima o abajo, da igual, todo el tiempo.
-¿Cómo estás tan segura de que será un varón Ved'ma?
-Lo se, lo presiento
A pesar de que el embarazo ya está bastante avanzado, el pequeño o pequeña bandida dentro de mi no ha dejado verse en las ecografias, terco como su padre ¡Dios me ayude!
Mañana iremos a otro chequeo y esperamos esta vez tener una respuesta.
-Se me antojo la Nutella, ¿quieres un poco?
Suelto una carcajada y asiento. Se supone que la que debería tener síntomas soy yo, pero al parecer el bebé no piensa lo mismo ya que su papá es quien los sufre. Tiene nauseas en la mañana, más gruñon que de costumbre (y eso es decir mucho) y solo quiere comer dulce.
Lo veo pararse de la cama y al poco tiempo regresa con un bote grande del dulce. Parece desesperado porque no tarda en untar sus dedos y llevarlos a su boca.
Gime y eso me hace reaccionar porque no lo razonó solo me le monto encima y me clavo su ereccion muy profundo (es una suerte que ambos durmamos desnudos) Nos acoplamos a un ritmo rudo, ambos jadeamos y gimo cuando tira con fuerza de mi cabello para llenarme el cuello con su saliva tibia para después morderlo.
No pasa mucho tiempo para que ambos alcancemos el orgasmo y caiga desmadejada en su pecho y por fin consiga dormir.
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Termino de arreglarme para la cita con el obstetra. Últimamente solo uso vestidos ya que es más fácil para mi vestirme debido a lo rápido que crece mi estomago.
Salgo de la habitación y busco a mi esposo, me cuesta encontrarlo pero lo hago y lo que veo me alarma.
Esta recargado sobre una pared, su pecho se mueve rápido y su cabello cae hacia el frente. Me acerco lo más rápido que puedo.
Ilenko -lo llamo varias veces- Joder mafioso de mierda ¿estás teniendo un infarto? No me puedes dejar viuda y embarazada ¡Di algo joder! Me estoy poniendo crazy.
Me paro cerca de el y le quito el cabello de la cara. Me toma por sorpresa ver que esta llorando. Comienzo a altérname más.
-Joder Ilenko ¿que ha pasado? ¿Aleska esta bien? ¿Victoria esta bien? Deja de llorar y responde.
-¿Soy un mal padre Ved'ma? -pregunta con la voz enronquecida por el llanto.
-Por supuesto que no, ¿quien te dijo eso?
-Amelie dijo que ya no me quiere porque no le compre la foca que quería, me odia.
Me suelto a reír hasta que siento que podría orinarme y el ruso me ve como si me hubiera salido un tercer ojo. Quien diría que viviría para ver al gran BOSS de la mafia rusa llorando por algo que le dijo una niña de 3 años.
-No eres un mal padre, Amelie esta gruñona porque no ha comido su omelette de las mañanas.
-¿Y porque carajos nadie le hace su omelette a L'vitsa? -ahora se enoja- Voy a tener que cortar algunos dedos.
-Si, si después ahora debemos ir a ver el sexo del intruso en mi vientre.
Parece recomponerse porque en un segundo toma mi mano y subimos al auto.
Veinte minutos después estoy recostada sobre la camilla con el gel frío sobre mi vientre. La expresión del doctor no es buena y comienzo a asustarme.
-Si no me dice que carajos está pasando voy a meterle un tiro -ruge Ilenko mientras aprieta mi mano.
-Estaba comprobando algo, para no equivocarme. Sra Romanova, hay tres corazones latiendo en su vientre.
Me quedo en shock por un segundo, volteo hacia Ilenko que está igual de inmóvil que yo.
-Parece que hoy están muy activos y quieren mostrarse -apenas logro escuchar al médico. ¿Quieren saber el sexo de los bebés?
-Si -escucho la voz del ruso, pero aún sigo abrumada como para responder.
-Veamos, hay 2 niñas y un varoncito. Felicidades señores.
Siento los brazos de Ilenko rodearme y yo hago lo mismo soltando el llanto que no sabia que retenía.
Bueno, tal parece que a la familia Romanov, la seguirán gobernando los estrógenos, pobre Ilenko, me parece que va a tener que comprar muchas trituradoras para muñecas.
Sonrio por ese pensamiento. Tengo todo lo que alguna vez anhele
