YOLANDA ESPITIA RADA
PARTE 3: EMMA
Después de empacar frenéticamente decidí tomar un baño, estaba en la bañera llena de espuma y agua tibia, siento el sueño vencerme, mi teléfono suena a lo lejos y lo escucho en mi letargo, moviéndome para verlo y quedando en shock con el nombre que se dibuja en la pantalla de la video llamada, contestó rápido y los gemidos llenan el baño en lo que el hombre acaricia su masculinidad, y no veo su rostro, pero se que es el
-¿Que haces, Pequeña Emma? - Me pregunta y la voz ronca es suficiente para volverme loca
-Estaba tomando un baño - Respondo y torpemente intento girar la cámara para mostrar el baño donde estoy, pero recuerdo que soy bastante desordenada y que todo esta regado por ahí y prefiero seguir mostrando mi rostro
-Te gustó lo que hicimos hoy? - Pregunta y asiento
Ehm... si, me gustó - Respondo llena de vergüenza - ¿A ti te gustó? - Le pregunto y lo escucho gruñir
-Mucho... Vedma - Dice y su voz envía una extraña vibración a mi intimidad, logrando que apriete con fuerza mis piernas bajo el agua, sacándome un gemido - Dime... ¿Tienes juguetitos? - Pregunta y yo niego - Tendré que regalarte un par cuando Vengas a vivir conmigo, tal vez los juguetes son muy sucios según las creencias de tu familia, pero a medida en que te conviertas en parte de la mía aprenderás el bien que hacen - Insiste
Hablo con el un rato más, no se en que momento también comencé a tocarme, pero se siente muy bien, y cuando su enorme p0lla deja salir el líquido espeso, me relamo los labios con ganas de probarlo, y suelto un gemido que anuncia mi llegada llegada clímax
Es muy injusto que no me dejases ver - Dice y me siento bastante audaz, por lo que salgo del agua para pararme frente frente espejo y girar la cámara, dejandole ver mi cuerpo desnudo y mi rostro de satisfacción - Te vez Bastante satisfecha -Dice y puedo sentirlo sonreír
-Gracias por eso, Mi Boss- Digo y cuelgo la llamada sin mucho más.
Cuando abro la puerta, Sam me está mirando con desaprobación
-Ni debes hacer cosas sucias mientras estés en casa de nuestros padres - Me dice enojada y giro los ojos
-Ya quisieras tu hacer cosas sucias con EL - Digo y me voy pasándola de largo, dejando la estela de agua sobre el suelo y perdiéndome tras la puerta de la habitación.
Las ganas de mudarme a la fortaleza del Boss aumentan con cada hora, mientras el no deja de consentirme enviándome fotos, haciendo que no pueda evitar tocarme pensando en lo sucedido, y en toda la noche no logro conciliar el sueño por la extraña necesidad de estar junto a él, a la mañana siguiente le confirmo a mamá que voy a mudarme ese mismo día, y no responde, solo insiste enojada en que seré una vergüenza y que no sirvo para sumisa, mientras papá ve con tristeza que mi decisión está tomada, Rachel me apoya en lo que pienso hacer y Sam no se aparece en todo el día.
-¿Puedes mandar por mi? - Escribo en el mensaje que envío y me asombra la velocidad en la que llegan los autos negros por mi, y me asombra más el que no haya mandado a por mi, si no que veo al mismísimo Boss bajar de su vehículo, y caminar por la entrada empedrada de mi casa, con rostro serio, sonrio en mi lugar mientras su hombres entran a buscar mis en lo que explico donde están y como si una fuerza externa me moviera corro a brazos del hombre que me levanta del suelo para darme un beso
-Eres la sumisa más Malcriada que tengo - Responde - Voy a tener que educarte a nalgadas - comenta pero no me baja
-¿No quieres que corra a tus Brazos? "Mi amo" - Digo con un tono empalagoso y sonríe
