Asumámoslo, Ahora Esto Es Lo Que Somos 1. (#TheWrites)

20. Ocaso

La noción del tiempo parece algo inexistente mientras cae el sol del ocaso en la lejanía. Ontari que está tumbada sobre la cama enredada bajo las mantas con el cuerpo de Roan lo contempla a través de la galería en la vasta distancia. El calor entre sus cuerpos aún persiste en el ambiente y ambos disfrutan en silencio de la ansiada calma.

Roan que la observa en silencio apoyado ligeramente sobre uno de sus codos con la mano sujetándole la cabeza, aprecia cada pequeño centímetro de su piel que está a su alcance. Roan que no suele verla jamás tan plácida lleva una de sus manos a su brazo rozando suavemente con la yema de sus dedos su suave piel dibujando figuras hasta alcanzar su espalda sintiendo como Ontari cierra los ojos sonriéndose apaciblemente en silencio. Roan que se inclina besando su caliente piel, rueda lentamente su cabello fijándose ahora bien en la penumbra como algunas marcas se desdibujan sobre ella.

—Estás son nuevas —murmuró él súbitamente resignado.

Ontari que no abrió los ojos disfrutando plenamente de su caricia modero su respiración.

Siempre lo eran...

Roan que volvió a inclinarse besando lentamente cada una de sus heridas apoyo la mano de su brazo queriendo abrigarla con su cuerpo para que no se sintiese tan desamparada.

—Nia es una mujer cruel —susurró Roan sobre su piel mirándola con cierta pesadumbres. Le dolía en el alma que Ontari estuviese completamente indefensa en sus manos, sabía que a pesar de tener el potencial y la fuerza necesaria para matarla nunca se alzaría en su contra. Tenía algo muy valioso que perder y esa era la única razón por la que ninguno de los dos la confrontaba.

No era cobardía.

Era prudencia.

Era temor a perder algo mucho más valioso de lo que jamás podría ser su vida o su amor. Era pavor a perder su secreto mejor guardado.

—Algún día todo cambiará —prometió Roan cerrando los ojos al posar los labios sobre su oscuro cabello.

Algún día... quiso pensar ella.

Continuara...