Elements (Libro Uno) ~ EDITANDO

Capítulo 6 ~ Identidad (7)

(P.o.V. Thomas)

— Que puedas crear cosas malas te da la posibilidad de elegir lo correcto. La posibilidad de hacer cosas buenas...— La voz de esa chica, Corinna, aparece de entre los árboles. Avanza hacia mí. Nuestros dones son similares, es cierto.— La decisión es tuya, y no hay necesidad de elegir ahora tampoco, estás aquí para aprender a controlarlo, aún hay tiempo para decidirse y aún cuando elijas mal, vas a poder seguir eligiendo día a día, como todos en la vida. Pero...— Se me acerca y se pone en cuclillas junto a mí.— Pero no escondas tu don por ese miedo, tu don podría ayudar a mucha más gente de la que crees, tan sólo si lo muestras.

Corinna pone su mano en mi hombro, pero no me atrevo a mirarla.

— Tu don no es destructivo, es creativo, y algo tan asombroso no tiene porqué ser un secreto.— Corinna me sonríe, y es una sonrisa tan cálida que no puedo evitar quedarme mudo. Le sonrío y ella me abraza. Le devuelvo el abrazo y escondo mi cara entre su pelo, no vaya a ser que Mayra vea mis ojos llorar. Mayra se ríe. Me separo de Corinna y ella me ayuda a pararme. Ya estoy mejor. Le sonrío y me devuelve la sonrisa.

— Gracias, en serio.— Me froto la cara, ya está, no hay que angustiarse ahora, no, no es angustia. Es algo más.

Mayra está mirando alrededor, ¿Habrá visto algo?

— No tienes porqué agradecerme, soy Corinna, Corinna Lane.

— Thomas Soiler a sus servicios.— Hago una reverencia burlona y los tres nos reímos.

— ¿Vas a usar tu don entonces?— Tras una mueca me encojo de hombros. Honestamente no lo sé.

— Supongo que podría, con vos, con ustedes, pero no quiero que todo Orholt se entere...— Corinna se cruza de brazos y me mira con las cejas levantadas.—...aún.

— Entonces...— Interviene Mayra aclarándose la garganta.— ¿Cómo sabías que te buscábamos?

— Oh, un chico de luz me preguntó por vos y me ofrecí a buscarte, nos dividimos y Faia me dijo que habían ido al bosque, menos mal que aparecieron porque me estaba agarrando miedo de perderme.

— Ya veo, ¿Y quién era el chico de luz?

— William algo...

— ¿Mi compañero de litera?— Corinna se encoge de hombros.— Bueno, después lo busco, ahora vamos, te necesitamos en el prado.— Mayra agarra la mano de Corinna y empiezan a correr hacia el prado. Me río mientras intento alcanzarlas. Gracias Corinna... Lo que dices vale mucho más de lo que crees.