Capítulo 08 El aniversario.

3K 271 123
                                    

Era la primera vez que tenían noticias de la chica después de un año, pues no contestaba llamadas o enviaba mensajes. La familia Dupain-Cheng estaba feliz ante esta carta pero Marinette aún tenía interrogantes por el contenido del paquete, al abrirlo se topó con un delicado vestido de seda color gris con escote tipo corazón cubierto de gasa negra desde los hombros pasando por el torso y terminando de cubrir la falda de forma grácil; adornado con ligeros y finos bordados de rosas y ocultos entre las espinas se encontraba la marca de la diseñadora Lady Julianne, el cuál era reconocido por cualquiera que supiera un poco de moda y un par de zapatillas de encaje negras.

Se notaba que todo el trabajo estaba hecho a mano, la textura de la tela hacía juego con todo. Para una festividad escolar era demasiado pero para su buena fortuna iba acorde con la fiesta que se celebraría. La aspirante a diseñadora quería hacer algo para lucirlo en la reunión, pero nada era parecido aquella pieza. Ese conjunto valdría una fortuna sin duda era un regalo valioso además como decía la nota era un diseño exclusivo, nadie lo encontraría en un escaparate. Era el mejor regalo que podía pedir, no por el valor monetario sino porque le recordaba cuando su prima le hacía ropa.

- Marinette cariño, es hermoso. –comentó la señora Sabine al ver aquél conjunto.

- Lo sé mamá, Bridgette es maravillosa. –dijo Marinette mientras guardaba el vestido. –Cuando veo esto me doy cuenta que me hace falta un largo camino para llegar a diseñar de este modo.

Sin duda su prima era un prodigio pero ese diseño formaba parte de los conocimientos que había adquirido en su larga estadía en Nueva York, era diseñadora en Polaris, todas las grandes marcas le pedían alguna colaboración o que trabajara para ellos, se había convertido en una de las diseñadoras más cotizadas del mercado, aunque nadie conociera su rostro.

Tomó el paquete y subió a su recámara; necesitaba probárselo. Con una pieza tan exquisita solo tendría una oportunidad para usarlo, el aniversario de la escuela sería esa oportunidad.

- Marinette, pruébatelo por favor. –Salió la kwami de la bolsa.

- Lo sé es hermoso, aunque y si lo rompo o lo rasgo o lo ensucio ¡¿Qué voy a hacer?!

- Tranquila, vamos pruébatelo.

Sin duda la caída de la tela sobre el cuerpo de Marinette hacía inmediatamente que su figura luciera y los tacones no eran altos de hecho eran bastante cómodos. Le sorprendía como dos personas que ella apreciaba habían colaborado para que la chica llegara a ese momento. Félix enseñándole las reglas de etiqueta para lucir el vestido que su prima había mandado.

- Marinette luces hermosa. –Comentaba Tikki sobrevolando alrededor de la ojiazul.

- No pensé que algún día podría verme así... pero creo que las coletas deben desaparecer, no combinan para nada con este diseño.

La azabache se desató las coletas dejando caer el cabello sobre sus hombros. Inmediatamente, según las clases que el mayor de los Agreste le había dado, sabía qué tipo de peinado debería usar así como el maquillaje que quedaría. Se sentía tan segura con aquél vestido, es como si usara su traje de Ladybug, pues todos sus sentimientos se alineaban para salir triunfante ante cualquier persona.

Sus pensamientos fueron interrumpidos por la voz de su madre quien avisaba una visita conocida, así que inmediatamente se quitó el vestido para ponerse su ropa usual además de atarse el cabello en una coleta alta, pues no podía ver a su visita estando despeinada. Guardo el vestido, tomó la nota y bajo deprisa las escaleras; en la sala familiar estaba una figura masculina conversando con el padre de Marinette.

- Hola Marinette, me dice tu padre que recibiste un paquete inesperado. –exclamaba Félix para después llevarse una galleta a la boca.

- ¡Félix! No lo vas a creer alguien que tú conoces muy bien me acaba de enviar el regalo más perfecto que haya visto.

Detrás del antifaz #MlbAwards2018Where stories live. Discover now