Detrás del antifaz #MlbAwards2018

Capítulo 69: Tus miedos son... (Parte I)

París estaba sumergido en la obscuridad aun cuando tiempo decía que era la mitad de la tarde. Mario Brön estaba en la cima de la Torre Eiffel. A la espera del núcleo, su núcleo; quién llevaba en sus fauces un aperitivo, una de las portadoras de Miraculous capaces de disminuir sus poderes. Por las palabras de Volpina, Ladybug ya debía estar en la cima.

Al fin, después de seis mil años podría apoderarse del mundo humano, entrar al mundo espiritual y destrozar a todos y cada uno de los regidores del mismo. Nightmare arribó a la plaza, al mismo tiempo aparecieron los akumas restantes, el lobo los encerró en las luces purpúreas; los pilares ahora sacarían sus miedos, temores, desesperación... su energía lo alimentaría.

Alzó los brazos y cubrió a la ciudad en una especie de cúpula, donde todos los ciudadanos de París lo alimentarían, aun despiertos experimentarían pesadillas donde sus sentimientos negativos le darían vida al lobo, que después de haber estado bajo el hechizo de Saphirblau, estaba vacío de poder.

Absorbió parte de la energía de Brön y desechó su cuerpo, ya había cumplido su objetivo, le serviría como bocado, pero sería más tarde. Volteó buscando a la portadora de la Mariquita, su mirada ansiaba verla para completar su tablero...no había nada. Su furia se incrementó y usó su coerción para hacer sufrir a los akumas, sobre todo a Volpina quien le había jurado que Ladybug ya estaba en ese lugar. Tenía al menos su as bajo la manga, Saphirblau atraería a Félix, a Gabriel y a cualquiera que tratara de salvarla... eso incluía a Ladybug.

Lo que Nightmare ignoraba, era que Marinette había sido rescatada por Bridgette.

Mientras Queen Bee se enfrentaba a un akuma, vio como dos Volpinas la llevaban, no como Ladybug sólo como su prima ¿dónde estaba Tikki? Con movimiento rápido la mayor usó su látigo para deshacerse de ambas ilusiones, que hicieron caer a la chica de una altura equivalente a quince metros. Queen Bee creó una red para que la chica cayera sobre ella. Marinette lucía aturdida aunque mantenía los ojos abiertos, sólo susurraba "Es mi culpa".

—¡Marinette! ¡Reacciona! ¡¿Qué pasó?! —Advirtió Bridgette — ¿Dónde está Tikki?

—Es mi culpa. —repetía constantemente.

—Si no me dices, tendré que golpearte hasta que se te acomoden las ideas. Sabes que bajo presión me pongo agresiva. —gritó la pelinegra.

—Bridgette... yo fallé... les entregué a Tikki... mis padres... Volpina...

Entre las incoherencias que trataba de entender, Bridgette descubrió lo que temía: La mente de Marinette se había quebrado, era demasiado pedir para una niña, había hecho un excelente trabajo pero no estaba acostumbrada a la muerte; la mayor no era exactamente una santa hizo el trabajo sucio por un año pero su prima... aún guardaba la inocencia, sus manos no estaban manchadas de sangre.

—Tranquila Marinette. Vamos a destruir a Nightmare, todo va a estar bien pero necesito que reacciones, primero vamos a recuperar a Tikki y luego nos centraremos en Nightmare y en Saphirblau. Haremos un plan, pero ¡Marinette mírame!

—Sí, Brid.

—Tendrás que hacer algo complicado, difícil pero no imposible.

Bridgette abrazaba a su prima mientras le contaba los detalles que harían para terminar con Nightmare, cuando los akumas desaparecieron, el silencio era ensordecedor, y la penumbra las cubrió; algo había pasado. La llegada del lobo negro era la respuesta. Bridgette podía actuar cínica y mordazmente, pero eso sólo ocultaba que tenía miedo y mucho. Su vida y cualquier futuro del mundo estaban pendiendo de un hilo. Nadie los salvaría, ellos debían hacer lo que fuera para tener un mañana.