87 (I)

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— ¿Que te pasa? — Le pregunto Belén al notar que la cara de su amiga había cambiado de un momento para el otro.

— ¡Te das cuenta que yo cedo y el la caga! — Grito furiosa sin mirarla. — ¡Está haciendo todo esto porque anuncie mi casamiento con Joaquín!

— No estoy entendiendo de que me estás hablando. — Emitio tratando de calmarla. Luz poso su vista en el celular y comenzó a leer.

— ¡Llego la paz! Al parecer llegó el momento en el que todo marcha bien entre @luzdersonn y @paulodybala. Luego de que la tucumana anunciará su compromiso con el jugador Joaquín Correa, se lo vio al diez de la Juventus de paseo con su hijo Federico y su pareja, Oriana Sabatini. — Tomó aire y miró a Belén.

— ¡No hace falta que sigas leyendo! — Exclamó por el bien de la salud de su amiga. 

— ¡Lo voy a matar! — Grito alertando a los otros tucumanos que estaban en el living obviamente jugando con la play. Cuando ellos aparecieron en escena Luz estaba con el celular en la mano otra vez.

¡Mira Paulo te conviene que traigas a mi hijo a mi casa ya si querés volver a verlo alguna vez en tu vida! — Se la escucho decir. — ¡Apenas escuches este mensaje trae a Federico a mi casa!

Cortó la llamada e hizo el amague de tirarlo contra la pared.

— ¡Si lo tiras contra la pared probablemente no te avise! — Le advirtió Belén y Luz la fulminó con la mirada.

Estaba completamente cargada y furiosa.

— ¡Es estúpido, algo tenía que hacer para cagarla! — Seguía gritando sin darle bola al aparato que estaba estaba sonando en el sillón. — Fíjate vos. — Ordenó a su amiga que tomo el aparato en sus manos.

— Dice Oriana Becacce. — Emitió casi tan bajo que apenas logró escucharlo. — ¿Hablaste con la abogada? — Negó con la cabeza. — ¿La vas a atender? — Volvió a negar con la cabeza.

— ¡Yo la atiendo! — Exclamó de repente y contesto la llamada que obviamente tenía como punto principal Federico.

Los nervios de Luz la llevaban a caminar de un lado al otro del living sin parar de hablar con ella misma.

— Se está volviendo loca. — Musitó Matías a los oídos de Belén quien lo fulmino con la mirada. — Deberías empezar por tranquilizarte.

— Debería estar preocupándome por los detalles de mi casamiento y por llevar un embarazo saludable, pero no. — Matías y Belén se quedaron mirándola tratando de comprender lo que acababa de decir. — ¡Maldita sea!

— ¿Embarazo saludable? — Preguntó Matías con la poca voz que le quedaba.

— Esa fue la razón por qué quería que vinieran, porque iban a ser los primeros en saber que iba a ser madre devuelta, no quería que se enteraran así. — Miró a sus amigos quienes estaban entre la felicidad y la confusión. — Había preparado un vídeo para avisarte que ibas a ser padrino de una bebé hermosa, y aca estoy preocupandome porque el estúpido que tiene de padre mi hijo anda de paseo con la estúpida novia que tiene violando todo tipo de acuerdo legal y no legal que mantiene conmigo.

— El que se perjudica es el, Luz. — Se apresuró a decir Belén sacando las palabras de la boca de su novio. — El va a terminar perdiendo, otra vez.

— ¡Esto no se trata de el, el puede hacer lo que se le cante con su insignificante vida, pero mi hijo no! — La miró y nunca fue tan si cera con respecto al tema. — Me preocupa que mi hijo está cerca de esa mina que no me inspira confianza en lo absoluto, eso me preocupa.

Joaquín volvió a la sala y observo que Luz estaba muy nerviosa y justamente experimentando todo lo que la obstetra le pidió que no experimentará.

— Luz te tenés que tranquilizar. Vamos a sentarnos vení. — Emitio acercándose a ella, pero ella negó y se alejo. Joaquín suspiro y sabía que se iba a odiar después de esto. — ¡Andersonn, sentate ahora! — Ordenó con su voz firme y después de unos minutos ella obedeció. — ¡Estás embarazada, tenés que estar tranquila! — Le tendió un vaso de agua y ella lo tomo.

— ¿Cómo voy a estar tranquila si no tengo noticias de mi hijo? ¿Cómo querés que este tranquila cuando está con un pelotudo como Paulo? ¿Cómo hago? — Eran tantas preguntas sin respuestas que alteraban más y más a Luz.

— Si seguís así, Federico va a ser tú único hijo. — Esbozó sin dejar de mirarla y ella cayó en la cuenta.

La obstetra le había dicho que las paredes de su útero podrían desgarrarse con mucha tensión poniendo en riesgo la vida del feto y también la de ella, como también la oportunidad de volver a quedar embarazada.

Mientras Joaquín intentaba calmarla y comunicase con Paulo al mismo tiempo, Matías tomaba la mano de su amiga sumamente preocupado sin dejar de mirarla a la vez que Belén le preparaba un te tranquilizante.

De repente el celular de Joaquín comenzó a sonar alertando a todos, se alejo del living antes de responder la llamada.

– ¿Dónde estás mononueronal? —Fue lo único que emitió a la vez que del otro lado de la línea explicaba lo que sucedía. – Paulo, te conviene que desaparecer del país si le pasa algo a alguno de mis hijos o mi mujer, porque te voy a buscar por todos lados.

Cortó la llamada y suspiró antes de volver al living, Belén quien estaba a sus espaldas solo lo miraba.

— ¿Era Paulo? — El solo asintió. — ¿Le pasó algo a Fede no? — No hubo movimientos con la cabeza, ni tampoco respuestas, pero Belén formuló su respuesta solo con esa actitud. — ¡Es un maldito estúpido!

— ¿Era Paulo? — Pregunto anas volvió a aparecer en el living. — ¿Federico está bien?

— Vení Luz. — La sentó en el sillón y se puso delante de ella. — Federico está en el hospital. — Suspiró y volvió a tomar aire, pero antes de que pudiera seguir hablando Luz ya se había desmayado en sus brazos.








Buenaaaaas, miren quien volvió. (? Capítulos atrás me preguntaron sin preparaban los pañuelitos, su es hora de sacar a la luz las carilinas por qué van a llorar y van a odiar al mismo tiempo. Disfruten. 🙆💚💛

PERFECTA • Joaquín Correa • [Wattys 2018]Where stories live. Discover now