E t e r n i d a d (HadesxPersefone)

¿Por qué?

—Déjame ver si entiendo. ¿Le has pedido exclusividad sin siquiera ser una pareja?

Zeus enarca una ceja, la fresa a medio comer le baila en los labios tensos de perplejidad.
He tratado de explicar mi nueva situación amorosa con el mayor tacto y raciocinio posible -no es como si yo encontrase en ello una lógica- pero mis hermanos, a juzgar por su expresión, no están conformes con la idea.
Poseidón engulle su tazón de cereales, y sus mejillas infladas de comida me regañan en cuanto me mira.

—¿Es este un nuevo intento para parecer cool y joven ante ella?—pregunta al tragar— Porque eres viejo, fingir que no lo eres solo te hará un viejo estúpido.

Gruño.

—Solo trato de ser comprensivo con su situación y no perderla en el intento.

Zeus voltea los ojos.

—Oh, sí. La mami-situación. Demonios, ¿Es que no podías buscarte una mujer que no esté aún bajo las redes de mamá, Hades?

—Demeter no es una persona razonable, y lo sabes. Ha sobreprotegido a Persefone toda su vida.

—Eso es cierto, ¿Recuerdas cuando traté de ligarmela, Zeus? Me rechazó sin más, no hay nada de razonable en ello. —Poseidón dice, su barbilla sucia con azúcar.

Arrugo la nariz hacia él.

—No es algo muy raro de creer.

Él frunce el ceño, apuntandome una fresa con una cuchara. La mano de Zeus detiene el ataque, logrando que ambos recaigamos en su mirada confusa.

—¿Y pretendes aguantar ser su amante secreto? No es una mala idea, supongo que hará del sexo algo interesante y melodramatico.

Pienso en los ojos curiosos de mis empleados, y en la mano pequeña de Persefone sujeta entre las mías. La imagen de Hermes besando su mejilla y el calor en mis dedos por querer reclamar su cintura.
No, no aguantaría ser un secreto. No cuando quiero sujetar su mano cada maldito día.
Trago, y presiono las uñas en la palma de mi mano.

—No me he acostado con ella aún.

Hago una mueca a las bocas abiertas y llenas de comida de mis hermanos ante mi estúpido intento de desviar el tema. Zeus está poniéndose morado, y Poseidón golpea su espalda con brusquedad luego de recuperarse.

—¿Tú no estás haciendo esto por sexo?

Me remuevo en mi silla.

—No.

—¿Pero quieres acostarte con ella?

—Zeus.

Giro la cabeza a un lado, mis mejillas ardiendo acusadoramente. Mi hermano menor sonríe.

—Quieres.

Poseidón esboza una sonrisa boba.

—El ha dicho aún. Aún no se ha acostado con ella. Él quiere.

Zeus cruza las piernas, agitando una copa de jugo en un patético intento de hacer una pose sabionda.

—Es normal que sientas cosquillitas y curiosidad, mi adorable hermano. Persefone es una chica caliente.

Taladro su rostro con los ojos, y él me mira de reojo. Su mueca burlona logra hacerme enseñar los dientes.

—No hables así de ella.

—¿Tanto lío por un par de tetas que aún no has visto? —Él me mira de manera amenazadora, yo ya estoy incorporándome de mi asiento-—Sé que son un muy buen par de tetas, pero...

Me inclino sobre la mesa, cogiendolo por el cuello de la camisa.
No sofoco el rugido que empuja a través de mi pecho.

—No-hables-así-de-ella.

Él me sonríe, presionando.

—¿Por qué?

Esquivo sus ojos, mis brazos temblando.

—¿Por qué? —Insiste.

Siento el latir retumbante de mi corazón en los oídos. Y creo verme a mi, acostado a su lado en una noche en vela. Me veo memorizando las diminutas pecas de su nariz, y el patrón de curvas en sus pestañas.
Me veo sonriendo ante sus enfados, y siento el sudor en mis manos después de cada beso. Creo poder distinguir sus sentimientos en las estrías de sus ojos.
Creo saber que no he sido nunca tan feliz con una sola existencia.

Suelto mi agarre, y me inclino hacia atrás. Apoyo vagamente una mano en mi corazón, mientras su risa me retumba en los recuerdos.

—De verdad la amo.

Creo ver una sonrisa triunfal en el rostro de Zeus, mientras Poseidón se inclina ante mi. Sus ojos enormes y perplejos.

—Solo le he dicho esas palabras mortales al pudín de chocolate. Oh, dioses. ¡Zeus! ¡Esto es muy grave!

____________________

¡Hola!
¿Vieron que ya salió el trailer de la segunda temporada? Estoy que me como las uñas.

pd: Gracias por leer y por comentar cosas tan graciosas y lindas.