Forty One

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HERMIONE

Desde que me entere que Madison tenía cáncer, supe que nada iba a ser fácil. Estoy aquí con Aydan a mi lado, él le está inyectando más morfina por medio de una bolsa que está conectada a una intravenosa. Su pecho sube y baja con tranquilidad, cuando llegamos se quejaba dormida.

Me siento en el sillón que está al lado de su cama, no tiene peluca, solo es ella con una carita un poco más rosadita, unas agujas que reposan en su muñeca y brazos, una manguera en la nariz que supongo y es la sonda que Aydan me dijo que usa para comer.

—Buenos días—el doctor nos sonríe a ambos. Es otro completamente diferente, no el mismo que llevaba el caso de Madison—¿La Mamá de la menor?—le pregunta a Aydan. Al principio solo me ve y luego asiente—Pues me presento, soy el nuevo doctor que lleva el caso de la pequeña, me llamo Eliezer Darwin.

—Un gusto—le estrechó mi mano.

—Tienen que saber que vamos a empezar un proceso nuevo para Madison y está vez más estricto—Aydan le ofrece asiento en los sillones que tiene el lugar, se acomoda a la par mía mientras el Dr. Eliezer se sienta en frente de ambos—He hablado con Oncólogos, enfermeras y doctores que han llevado el caso de la menor desde los 2 años y es un caso que me deja muy impactado porque cuando tuvo esta enfermedad por primera vez, no le daban esperanzas de vida y decían que solo le daban un año para vivir.

—¿Cuánto tiempo espera usted que Madison pueda aguantar está vez?—él pasa la mirada de Aydan hacia su pequeña paciente y entrecierra los ojos mientras la analiza cuidadosamente.

—No quiero mentirle, puede salir todo bien o puede que ocurra una desgracia—lo veo asentir y tragando grueso mientras se pasa las manos por el pelo con estrés. Si yo me siento mal por todo esto, no quiero saber como se siente él—Pero por el momento, necesitamos mucho apoyo para ella, la idea es ver primero si el riñón de su madre es compatible con ella y si lo es, necesitamos preparar a Madison lo más pronto posible, que suba de peso, puede comer normal, luego el hospital se encarga de lo que si puede o no puede ingerir y también por sonda para que el proceso sea lo más pronto posible.

》Luego vamos a proseguir con la cirugía que es el proceso más difícil de todo esto porque no sabemos cómo va a reaccionar el cuerpo de la menor, puede pasar cualquier cosa.

—¿Y cuánto dura la cirugía?—pregunto.

—De 3 a 4 horas maso menos, eso si las cosas no se complican.

—¿Y duele mucho?

—Es probable que cuando se haya recuperado de los efectos de la anestesia, sienta un poquito de dolor pero es porque te van a coser, naturalmente por la cirugía—aclara—A la paciente se le van a proporcionar analgésicos si es necesario y después de la cirugía un tratamiento con medicamentos para evitar que el sistema inmunitario rechace el riñón.

—Fue una hemorragia ¿Verdad?—Aydan lo observa fijamente—Por eso vómito sangre.

—Exactamente y de verdad lo siento porque sabemos que esto puede ser mortal, esa niña es muy valiente y fuerte por soportar tanto, ya es como la tercera vez que le pasa—lo agarro disimuladamente de la mano y la presionó para darle apoyo.

—¿Qué pasa después del trasplante de riñón?—pregunto.

—Bueno...—el doctor se quita los lentes que anda puestos y los limpia con la tela de la bata—Esperemos que todo salga bien, se le realizarán nuevos exámenes para ver cómo está reaccionando su cuerpecito y como viene saliendo de una sesión larga de quimioterapia, antes de eso un trasplante de médula, no podemos maltratar a la niña, vamos a tener que esperar unos dos meses maso menos para ver como va todo, luego si es necesario, otra sesión de quimioterapia más estricta y puede que está vez sea más larga.

Wabi Sabi [FI2]✔️Where stories live. Discover now