Fifty One

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HERMIONE

Cierro la puerta en silencio, le di un té para que pudiera dormir, al menos no me costó, incluso se quedó dormida mientras le decía cosas bonitas de nuestra infancia. Me muerdo los labios tratando de tragarme las ganas inmensas que tengo de llorar, porque esto no es fácil, yo que lo estoy viviendo es una tortura.

Tengo que estar atenta, porque eso es un trauma asqueroso y se que ella va a necesitar ayuda para sanar. Se me quito el hambre, hice la comida para nada y si como es porque necesito subir de peso para el riñón de Madison, no porque se me apetezca.

—¿Estás bien?—me asusto cuando escucho su voz ronca detrás mío. Está apoyado en una pared.

—Supongo que sí—hablo sin importancia—Ya no se ni siquiera que va a pasar y se que Kay no está bien, se que le hicieron algo malo.

—Mañana tenemos que hablar con Harmony, pasaron muchas cosas y estaba conversando con el hombre que la abusó, seguro que vamos a encontrar a Kayleth.

—¿Es en serio?

—Es difícil de creer, pero no fue por gusto propio que lo hizo, estaba muy afectado y está dispuesto a entregarse a la policía.

—Pero eso es imposible, ¿Cómo es posible que un hombre así se entregue a las autoridades?—Aydan guarda silencio y lo que dice me deja más confundida.

—Fue Pierce, el entrenador de natación.

—¿Pierce?—pelo los ojos.

—Creo que lo mejor es que conversemos con Harmony mañana y que ella nos explique a los dos como pasaron las cosas, mientras tanto él me mandó la dirección, si ella quiere denunciarlo, él mismo se va a entregar, le dije que no lo hiciera porque no fue algo que él quiso hacer, lo obligaron, estaba drogado y ni siquiera sabía lo que estaba haciendo, lo que tenemos que esperar es que Harmony quiera hablar y nos diga la verdad, aunque dudo mucho que Pierce me este mintiendo, si lo hubieras visto—Él saca dos tazas de la despensa, ni si quiera se en que momento terminamos en la cocina y vierte café en ellos.

—Ten.

—Gracias.

—¿Le diste algo de comer a tu hermana?

—Solo un té, me dijo que mañana temprano iba a comer, sigue con mucho asco y ganas de vomitar—ambos tomamos asiento en la mesa de la cocina y por un momento solo nos mantenemos en silencio. Tocó la taza que está caliente entre mis manos, ya es muy tarde, hoy fue un día horrible, por más que trate de sentirme mejor, no lo logré. Lo de Leonor es muy reciente y justo pasa esto ahora—¿Sabes qué me duele más? Qué Harmony era virgen, ella nunca estuvo con Matt, me lo dijo antes de dormirse—él parece pensar en silencio.

Yo soy de esas que desearía que todas las desgracias me pasarán a mi, pero no a las personas que amo. Me siento culpable por dejar a Leonor sola en la casa, por no estar pendiente de una adolescente como mi hermana, de haber hecho cosas tan malas, como abandonar a mi hija o dejar al hombre que amo por inmadurez.

—¿Qué dijo de Leonor?

—Está igual de devastada que yo—tomo un sorbo del café—A ella la obligaron a ver un video cuando apenas estaban incendiando la casa, no me dijo mucho de eso.

—¿Qué piensas hacer tú?

—No lo sé—masajeo mi hombro con estrés—Tengo muchas cosas en las que tengo que pensar, por ejemplo que no creo que Harmony quiera regresar a ese colegio y que le va a costar volver a agarrar confianza para muchas cosas, como acoplarse a la vida que tenía antes de esto—me duele la cabeza de tanto pensar, realmente estoy harta—¿Cuándo va a regresar?—se que él sabe que me refiero a Maddy, no hace bonita cara pero tampoco habla enojado.

Wabi Sabi [FI2]✔️Where stories live. Discover now