Expiación y castigo.

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Personajes y las imágenes utilizadas en la historia no son de mi propiedad. Todos los derechos a sus creadores. Únicamente el escenario donde se desarrolla la historia es de mi imaginación y creatividad.


Lenguaje y contenido fuerte y explícito.

Agradezco las portadas de yan_skiblue y de Mónica tadakatsue.
Una disculpa por la redacción.

©® Historia con derecho de autor.
No se permite, copiar, adaptar ni tomar prestada.

<<>>, " ": Son pensamientos del personaje.

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“ Toda persona fuerte tiene algo que la destróza.”






Sesshomaru se alejó un poco para vigilar, sacando de entre el traje unas bandas, se hizo un torniquete en el brazo y otro en la pierna que más sangraba. La herida del costado tendría que esperar.  Escuchó un ruido y corrió a ocultarse tras las tapias con las mujeres haciéndoles una seña de que guardaran silencio. De entre la oscuridad surgió la figura de Raizo, que sin hacer ruido lanzó un shuriken directo a la cabeza de Sesshomaru, quien la esquivó. Hablándole con voz fría.


— Sigues teniendo pésima puntería.

Raizo sonrió de lado, acercándose a dónde se encontraban, envainó las katanas con cuidado antes de llegar. Miró a Irasue que se limpiaba las lágrimas, y a una jovencita de preciosos ojos grandes de un gris como los de kohaku, que cargaba a uno de los bebés.

— De haberlo querido . . .ya estaría muerto señor.

Giro para saludar a la madre del señor Sesshomaru.

— Señora . . .

Saludó con una inclinación a Irasue, quien le sonrió acercándose para revisarlo.


— Estás herido . . . déjame limpiarte un poco y hacerte un torniquete.


El muchacho se sentó en el piso y la dejó limpiarlo. Sesshomaru de reojo no podía creer lo que veía, Raizo sólo se dejaba tocar por Midoriko y Naguna, ¿Ahora también lo tocaba esta mujer? Y con bastante familiaridad al parecer.
Molesto, preguntó con voz grave a Raizo sobre los sobrevivientes.

— No hay, escaparon unos cuantos y se llevaron a cási todas las mujeres y los niños. Usted cómo está?.

— Igual que tú . . .al parecer nos faltó entrenamiento.

— Ésa es su excusa?

— Niño fanfarrón, qué insinuas.

— Que ya está algo viejo . . .


Sesshomaru se acercó para darle un coscorron. Raizo se quejó y con una sonrisa dejó que lo siguieran limpiando.

— No me faltes al respeto, sabes que puedo darte una tunda.

— Cómo encontró a mi madre?

— Bastante gorda . . .se veía bien.

Raizo sonrió, algo muy raro en el y meneó la cabeza. Bromear, no era el mejor rasgo del señor Sesshomaru, así que, podía creerle que su madre estaba bien, y a salvo.

Después se instaló un silencio cómodo entre ellos. Raizo se acomodo en posición de loto, haciendo extraños movimientos con las manos respirando acompasadamente relajandose, sólo su rostro dejaba entrever el dolor que sentía. Sus heridas sanaban muy lento, su cuerpo se enfrió con rapidez y necesitaba más tiempo para hacer que por lo menos dejarán de sangrar.  Sin dejar la posición, pregunto en un murmullo a Sesshomaru.

💔 En Lo Profundo Del Corazón. 💞Onde histórias criam vida. Descubra agora