Samuel y Andrea están en el mejor momento de sus vidas, son recién casados, felices y se aman intensamente. Tienen muchos planes para el futuro y ya piensan en formar su propia familia, pero por ahora, están empeñados en recuperar el Rancho Del Junc...
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Andrea POV
No sé, pero tenía un malo presentimiento, no me gustó para nada toparme con Patricia, y tampoco me gustó la forma como ella miraba a Samuel, la situación fue rara. Estaba distraída, perdida en mis pensamientos cuando siento como se apaga el carro, es cuando me doy cuenta de que ya hemos llegado a nuestra casa, sí, porque a partir de hoy, es nuestro hogar.
Samuel: Mi amor, ya hemos llegado. -Dijo mirándome a los ojos. – ¿Aún estás enojada? – Preguntó suavemente.
Andrea: Yo no estoy enojada, Samuel. - Dije calmamente mirándolo a los ojos.
Samuel: ¿Segura? ¿Entonces por qué estás tan callada? – Preguntó.
Andrea: Es que... No me gustó la forma como ella te miraba. – Dije poniendo mis ojos en blanco, veo como él me sonríe.
Samuel: ¿Estás celosa? – Preguntó con una gran sonrisa.
Andrea: Nooo... - Dije rápidamente.
Samuel: Sí, ¡Estás celosa! – Dijo divertido mientras se acercaba.
Andrea: ¡Ya, Samuel! Ok, lo admito, estoy celosa! Pero es que Ella te estaba quitando la ropa con la mirada! Sé que no tienes la culpa, Amor. Pero no me gusta que te miren así. - Dije mirándolo a los ojos fijamente
Samuel: ¡Ay tontita! No tienes porque ponerte celosa. La única mujer que yo quiero que me quite la ropa con la mirada, con las manos, o con esa boquita que me vuelve loco, eres tú. Brujita, solo tengo ojos para ti... Te amo y te deseo más que todo. – Dijo con sinceridad, mirándola a los ojos.
Andrea: Yo también te amo... Y sé que la he perdonado, pero no sé, amor, no me da confianza... No sé como explicarte Samuel, pero la verdad es que no me siento a gusto teniéndola cerca. - Dije, con sinceridad.
Samuel: Te entiendo, a mí me pasa lo mismo. Pero es mejor hablar de lo que realmente importa.- Dijo sonriendo.
Samuel: ¡De nosotros, por supuesto! Y de la primera noche que vamos a pasar en nuestra casa. - Dijo seductor. Abriendo la puerta de su carro, y ayudándome a bajar del vehículo.
Andrea: Me gusta esa conversación. - Dije divertida.
Samuel: Y a mí me gustas tú.- Dijo cargandome en sus brazos, puse mis manos alrededor de su cuello.
Andrea: ¿Que haces, loco? – Dije sonriendo.
Samuel: Es la tradición. - Me dijo, llevándome en sus brazos hasta nuestra casa.
