Sweet Candy © |njh|

«35»

Niall POV

Mierda, mierda y más mierda.

No podía creer que Sally haya sido capaz de buscarme, aun sabiendo que estaba con Candy.

No quería verla, aún sentía algo por ella aunque lo negase, Candy no soltaba mi mano y por el contrario comenzó a pelear con Sally.

— ¿Así que tú eres Baby Sally?

— ¿Y tú quién eres? ¿Estúpida Candy? —la miro de pies a cabeza y volvió a mirarme. —no creí que me dejarías por esta cosa Niall, creí que tenías mejor gusto.

— ¡Lo tiene y por eso me eligió a mí! —Candy la enfrento.

—Eso ya lo veremos ¿Acaso olvidas que yo siempre ganaré Candy?

— ¿De qué hablas?

—Niall me ama nena, soy su única Baby y no dudará en dejarte por mí. ¿Acaso no te dijo que hicimos el amor? Fue tan tierno al decirme que aún sentía algo por mí.

— ¡Sally basta por favor! —las detuve.

—Niall... ¿Es verdad? —Candy me miro a los ojos, no podía mentirle.

—Tengo dudas pero... —Candy se soltó y camino lejos — ¡CANDY ESPERA! —la tomé de la mano pero ella se alejó.

—No Niall... Ya basta. Esto se acabó. —Miro a Sally —felicidades... Tienes a tu Daddy. —se soltó de mi agarre y se fue sin nada más que decir.

—Candy... —Sally me abrazo por la espalda y beso mi mejilla — ¿Sally que demonios haces aquí?

—Lo lamento Daddy, pero me di cuenta que yo también ciento algo por ti. —mordió su labio y se acercó a mis labios.

—Sally basta... Por favor. Yo quiero estar con Candy.

—Pero.... Ella ya no quiere estar contigo. — mire hacia la puerta y Candy ya no estaba — ya olvídala Daddy. Solo somos tú y yo. —me sonrió y luego me dio un beso lento.

No sabía qué hacer, estaba tan confundido, aún sentía cosas por Sally pero quería a Candy. Había luchado mucho por tenerla y solo llego Sally y la alejo de mí.

Tenía que aclarar mi mente, necesitaba ayuda.

(...)

Acaricie su espalda y suspire, ella se acurrucó aún más en a mi cuerpo. Sí, soy un idiota, perdí a Candy y en vez de buscarla termine acostándome con Sally.

Por extraño que parecía no sentí nada, comparado a la noche que ella apareció, no sentía eso que me hizo dudar. La sentí como si fuese una más.

En cambio cuando estuve con Candy, esa sensación era la más exquisita que existía, tal vez Candy era la única que podía causar lo que sentí.

O tal vez estaba delirando.

—No me digas que piensas en Candy —se quejó. La mire y negué, Sally era capaz de muchas cosas cuando estaba celosa.

—Te tengo aquí conmigo. ¿Por qué pensar en alguien que se fue? —la mire con una sonrisa forzada y ella sonrió orgullosa.

—Así me gusta -se subió sobre mí y beso mi cuello —eres mi Daddy, siempre lo fuiste y siempre lo serás. —me miro y sonreí.

—Si....

(...)

Salí del departamento y me quedé en el pasillo esperando a Sally, tardaba demasiado en arreglarse solo para ir a cenar.

Oí unas risas y de la habitación salieron Candy y un joven de cabello rojo.

—No Jajajaja Michael basta —ella reía mientras el maldito le hacía cosquillas, se veía tan hermosa con esa sonrisa.

Ellos se percataron que yo estaba y ella me miró con decepción.

—Hola... —los salude, ella susurro un casi inaudible hola en respuesta.

—Él es Michael, Mich, él es Niall... Mi vecino en Londres.

—Mucho gusto —saludo él y abrazo a Candy por la cintura, mis manos se apretaron con fuerza.

— ¿Vamos amor? —reaccione al oír la voz de Sally. Candy tenso su rostro al verla, Sally siempre vestía demasiado atrevida. —oh Hola Candy.

—Hola — La saludo seca.

—Vamos... —susurre. Caminamos hasta el ascensor y oí su conversación.

—Candy, quería saber si te gustaría ir esta noche a la cena con show que habrá en el restaurante del hotel.

—Me encantaría Mich, ¿pasas por mí?

—Siempre hermosa. —ella rio y él la tomó de la cintura para besar su mejilla, sentía tanta rabia.

El ascensor cerró las puertas y me quedé solo con Sally.

— ¿Qué te parece ir a la cena y show esta noche? —la abrace por los hombros pero ella me ignoro, estaba perdida con su celular.

—Aja, como sea. —suspire y mire a la nada.

¿Qué demonios me estaba ocurriendo?