«94»

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Niall POV

— ¿Usted es su madre? —toqué su hombro y una corriente recorrió mi cuerpo. La mujer se dio vuelta y levantó su mirada, debía ser una broma.

—Si... —trague saliva y retrocedí aterrado.

—No... No puede ser...

— ¿Po...? ¿Podemos hablar? —sus ojos estaban llenos de lágrimas, tantos años, tanto dolor y ella aún estaba viva. No lograba comprender lo sucedido, no lograba entender su alejarse. Las razones que venían a mi cabeza dolían y mucho, no quería aceptarlas pero me torturaban.

—Si—Afirmé.

—Maddy, espérame aquí. —Habló mirando a la joven y ella asintió, comenzamos a caminar hasta el muelle sin decir una palabra.

Ella se detuvo mirando al mar, me quedé observándola, usaba un vestido largo que llegaba hasta sus pies de color negro y blanco, y unas chanclas negras. Se veía más pálida de lo que la recordaba.

— ¿Por qué?—hablé por fin — ¿Por qué te fuiste? ¿Por qué mentiste? —ella sollozo, se abrazó a su misma y lloró.

—No quería dañarlos... —Habló entre lágrimas. —No podía quedarme y tampoco puedo decírtelo.... No quiero que te pase algo.

— ¿Ya no me amabas? —ella lloró aún más. —Era eso.... No me amabas... —se dio la vuelta y me miro a los ojos.

—Niall...

—Te fuiste.... No encontraste como decirme que ya no sentías nada por mí, me dejaste... Me abandonaste con James y tu familia...

—No es así, ¡no es lo que crees! —me quiso tocar pero me aleje —Niall... Por favor...

—No... —Me alejé en llanto — Candy... Tu estas muerta... —me comencé a ir dolido.

— ¡ESTOY MUERTA NIALL! —me detuve y apreté mis puños, las lágrimas recorrían mis mejillas. —Malcom...

Me di la vuelta y la miré, se acercó y me miró a los ojos.

—No.

—El regreso.... El.... El mato a Sander...

—No...

—El... Él nos tenía en su mirada....

—No... No puede ser... —me negaba a creer que sea verdad, mis puños comenzaban a doler de tanto apretarlos.

—El día que nacieron Janet y Sander recibí su llamada...

—Basta...

—Me dijo que los mataría... Me envió una foto tuya, nos estaba espiando en ese mismo momento, tenía un arma.... —no dejaba de llorar —No podía permitir que te dañara, no quería que dañara a nadie por mi culpa. —apretó sus manos con fuerza. —tuve que mentir.... Tuve que alejarme de lo que más amaba con tal de que vivan... —Me sentía una completa basura al pensar que ella podía haberme engañado. — 13 años de dolor... Y Una niña... Nuestra hija... —me acerqué y corrí su cabello, acaricié su mejilla y ella cerró sus ojos. Vi su cuello y había marcas. Tome las mangas de su vestido y las corrí un poco, marcas de dedos.

—No puede ser...Candy... —ella lloraba sin poder parar.

—Lo siento... —la abracé con fuerza y comencé a llorar junto a ella. —Lo siento.... Todo es mi culpa... Sander murió por mi culpa.... —sus brazos tocaron mi espalda y luego de tanto tiempo me sentí completo.

Saber que ese maldito bastardo la había amenazado y me la había arrebatado durante tanto tiempo era lo que hacía hervir mi piel, su cuerpo seguramente estaba completamente marcado por ese bastardo.

Solo quería destruir al maldito imbécil de Malcom con mis propias manos, quería hacerlo sufrir, quería terminar con su vida por haber dañado a mi único amor.

Tomé a Candy de las mejillas y la hice mirarme a los ojos, junte nuestras frentes y volví a sentir su respiración, tantos años sin poder estar de aquella manera con ella, tantos años de soledad sin la mujer que me volvía loco, aquella mujer que dejó su vida con tal de protegernos.

Roce nuestros labios y los uní en un pequeño beso, aquel dolor, aquel gran golpe en mi corazón comenzaba a sanar, Candy era mi cura, era lo que más amaba y ahora podría tenerla a mi lado.

Me separe y ella me miro a los ojos, una pequeña sonrisa se formó en sus labios y sonreí. Aquella sonrisa estaba cargada de dolor pero aun así era tan hermosa.

—No puedo creer que estés aquí... Te amo demasiado Candy —la mire a los ojos — no quiero dejarte ir.

—Estar alejada de ti durante tanto tiempo ha sido una tortura, aquel día... Morí. El dejar todo atrás fue mi muerte Niall... —trago saliva.

—No puedo creer que estés viva... Y que tengamos una hermosa niña...

—Maddy...—ambos volteamos a verlos y no los encontramos. — ¿Dónde está?

— ¡Mierda! —La mire asustado — ¡JAMES!

—Oh no... 






When
tienes que buscar a tus hijos antes de que hagan incesto...

Ste James, igualito a su padre (?

Sweet Candy © |njh|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora