-Gracias por enviarme los dulces Niall, ¿O debería decir Daddy?
-Yo no envié los dul... Espera ¿Qué?
*Historia terminada y pendiente a corrección de errores*
Obra completamente mía, no se permiten copias, tampoco adaptaciones sin autorización previ...
—Niall... — no podía creer que lo tenía frente a mí. Mi corazón latía con tanta fuerza, no creí que esto podía llegar a suceder.
—Dios, no puedo creer que seas tú. —me miro de pies a cabeza y mordió su labio, se veía tan atractivo como siempre. — ¿Qué haces aquí en España?
—Yo... Vine por un trabajo... Como modelo para... Ya sabes... Lencería. — me ruboricé.
—Dios. —Mordió su labio — jamás cambies Candy —me guiño el ojo. — es increíble verte aquí. —se acercó y pude sentir su mano en mi cintura. — sabes... No recuerdo lo que paso aquella noche en la fiesta...
—Niall... Por favor... —trague saliva y lo mire a los ojos.
—Hoy vi que recuperaste la cuenta... —mi cuerpo comenzó a temblar, no pensé que aún me seguía en aquella cuenta.
— ¿Vi...Vi... Viste la foto? —Tartamudee, estaba tan nerviosa por lo que había dicho y aún más por su mano tocando mi piel.
—Sabes... Sander también la vio, en realidad el vio el Instagram de Jade... Candy... ¿Ese niño es hijo de Sander? —me miro a los ojos.
Estaba demasiado nerviosa, no podía estar pasando aquello, no podía decirle la verdad, si el tan solo supiese que aquella noche en la fiesta estuvimos juntos y allí ocurrió.
9 meses cargando con su recuerdo y 6 meses junto a mi hermoso James, nuestro hijo. Jamás le había dicho nada a Niall, cuando supe que estaba embarazada él estaba de novio con una modelo española, lo nuestro fue algo de una noche, un error, el mejor error de mi vida.
No sabía que decirle ni que hacer, estaba tan nerviosa, no podía decirle la verdad allí, era demasiado rápido, necesitaba tiempo, no sabía cómo reaccionaría.
Mi celular sonó y agradecí internamente por aquel milagro.
—Yo... Debo contestar... —me separe de su agarre y tome mi celular. — Hola... —intente hablar claro.
—Candy, debes venir, Sander está aquí, Niall se enteró de James pero piensa que es hijo mío.
—Sí, Lose, ya sé que quieres Helado. —Intente fingir — enseguida voy al departamento, estoy aquí con Niall y por eso tardo.
—Oh mierda ¿Ya le has dicho?
—No, no tienen helado de menta, solo llevare el helado de chocolate, como siempre por ahora.
—De acuerdo, te esperamos. —corto la llamada.
—Lo siento... Debo irme. — guarde el celular.
—Candy por favor...
—Niall... Sé que tienes muchas dudas pero... Te prometo que sabrás todo lo que está sucediendo. —Lo mire a los ojos — adiós. — bese su mejilla.
—Espera... Quiero verte. Esta noche. —el me tomo de la mano — paso por ti, por favor...
—yo...—suspire — de acuerdo. —el sonrió. — nos vemos luego. —bese su mejilla nuevamente y me fui lo más rápido posible.
Cuando llegue al hotel Sander estaba con James en brazos y Jade corrió a abrazarme.
— ¡DIOS! ¡Dime que sucedió!! —ambas nos sentamos en el sillón.
—El... Me pregunto por el bebé... Cree que es hijo de ustedes. Me ha dicho que no recuerda la noche de la fiesta... Pensé que lo sabía.
— ¿Y qué harás?
—Me invito a salir... Esta noche. Supongo que es momento de decirle de James. —Acaricié la mejilla de mi pequeño, era perfecto, su cabello rubio y sus ojos iguales a los de Niall. — no sé cómo reaccionará.
—Tal vez al comienzo se asuste pero... Niall aun siente cosas por ti. —Mire a Sander — el aún no ha podido olvidarte, luego de la fiesta le confesó a Karol que aún había alguien en su vida a quien no lograba olvidar. No ha tenido novia desde entonces.
— ¿Crees que me odia por haberle mentido para que no abandonará sus sueños?
—No, en lo absoluto, debes explicarle todo lo que hiciste y por qué lo hiciste. Estoy seguro que entenderá.
—Estoy tan nerviosa. —Mordí mi labio — no pensé que las cosas pasarían tan rápido.
—Es el momento, él debe saber sobre James. —El pequeño nos miraba con su hermosa inocencia, no podía creer que había tenido un hijo de Niall.
Tenía miedo. ¿Y si Niall no quería saber de él? ¿Qué le diría a James sobre su padre al crecer? ¿Acaso Niall en verdad debía saber la verdad? Mi cabeza era un mar de miedo e inseguridades.
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Estaba lista para enfrentar la realidad, ya era la hora de ver a Niall y no podía quedarme quieta, mis nervios eran tantos que sentía náuseas.
Acaricie la mano de James quien dormía en la cama rodeado de almohadas para que no se cayera, el pequeño era tan inquieto cuando dormía, era la viva imagen de Niall.
El timbre sonó y mi corazón se aceleró, bese la frente de mi hermoso bebe y me fui con cuidado de no hacer ruido.
—Mama enfrentará su destino... —fui a la puerta y me detuve antes de abrir. Di un gran suspiro y tome las fuerzas necesarias para seguir adelante.
