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Su cuerpo definido, era perfección a los ojos de José, ¿Cómo alguien podía tener tan bien marcado el abdomen? Y esa v que se formaba en su ingle, incluso la silueta de su bóxer se distorsionaba gracias a ello.

José suelta un suspiro y parpadea rápido ¿tenía algo que decir?

-Sí, claro, eh... no sé- no recordaba que coño tenía que responder.

Bran se acerca, más, más, tanto que posiblemente había algunos centímetros de distancia entre los dos.

-¿Pasa algo? Te noto- Brandom saborea sus labios- nervioso- y termina su frase en casi un susurro.

Esto solo tiene que ser una broma.

-No, es solo que no recuerdo la dirección de mi casa, tengo que llamar a mi tía.

-Me gusta tu espalda- dice ignorando totalmente a lo que había dicho José.

¿Qué? ¿Qué tonterías dices?

-¿Si?-

Bueno a mí me gustas todo tú.

-Sí, es muy blanca, y tiene un lindo lunar- se atreve a acercarse más, sus dedos rozan la columna vertebral de José hasta llegar a un punto medio- ¿lo sientes?- sus dedos se quedan allí revoloteando justo en esa zona.

José cierra los ojos, absorbe el placer, era como una tempestad de repentinas sacudidas nerviosas que cosquilleaban directamente a su estómago e ingle, suspira y se aparta.

-Tengo que irme ya es tarde- expresa en un arranque de cordura mientras traga algo de saliva, aparta la mirada.

-Te acompaño, deja me voy a duchar vale- expresa.

A José no le queda más remedio que asentir no quería por alguna razón ser grosero, se pierde dentro de una de las duchas y José solo observa como cuelga la única prenda que vestía en ese momento en la pared cubierta de cerámica.

Estaba allí, completamente desnudo, la idea solamente produjo un fuerte endurecimiento de su miembro, José observa y ladea con la cabeza resignado, un alivio que Brandom no estaba viendo la vergonzosa erección...

I want sex/ Quiero sexo.Where stories live. Discover now