I want sex/ Quiero sexo.

9

El vómito recorrió la lentejuela, el brillante se opaco por una espesa gama de líquidos viscosos, José parpadeo varias veces y Brandom volteó el rostro al ver a José ponerse serio de pronto. Cuando le siguió la mirada se consiguió con un cuadro muy particular: Madison tenía vómito pegado al vestido, sacudía las manos con el semblante asqueado.

-¡¿Dónde tienes la cabeza?!- Opino Madison de un tajo.

Kevin confundido solo se limpio el rostro con la manga.

- Lo siento yo...- dijo por bajo.

Intento ayudar a Madison de algún modo pero no sabía que hacer, el exceso de alcohol lo hacía torpe. La pareja de baile de Mad fue muy eficiente, corrió a velocidad de centella y le proporcionó un pañuelo húmedo.

- Ay gracias cariño- dice Mad.

Inesperadamente llega Kylie al encuentro, trata de no observar a Kevin en lo absoluto, se limita a colocar la mano en el hombro a su amiga.

-¿Oye amigo dónde tienes la cabeza?- dice el compañero de Madison.

Kevin responde con un empujón fortísimo hacía aquel chico, este cae justo en una de las mesas decorativas del lugar, llenándose el traje del rojo intenso del ponche.

- ¡Kevin basta!-

Fue la primera oración que le dijo Kylie durante esas semanas, Kevin se tambaleó, el puño que tenía en mano se deshizo como por arte de magia.

- Yo... No quería- dice avergonzado.

- Lo sé- dice Kylie.

-Kye- Kevin pronuncia su nombre, como si la palabra sé sintiese extraña en sus labios.

  Kevin se toca los labios con los dedos, y niega con la cabeza.

- Se muy feliz con tu nuevo novio- dice.

Kevin se da media vuelta, Kylie observa su espalda amplia.

- Lo soy Kevin- dice Kylie y Kevin detiene el paso- soy muy feliz ahora...

- ¿Sabe lo que me enoja de los dos? Que ambos están comentiendo el error de sus vidas y no se dan cuenta de nada- Madison estaba en ropa interior y lavaba fervientemente la mancha de su vestido con delicadeza para no estropearlo.

Estaban en el baño de Kylie, y Madison observaba a sus dos mejores amigos que le acompañaban en ese momento por a través de un amplio espejo iluminado por una barra de luz blanca a su alrededor. Kylie tenía el semblante pensativo y José se limita a observar afincado sobre el marco de la puerta y con los brazos cruzados, como Madison se ponía cada vez más roja.

- ¡Pffff!- suelta un bufido y los cabellos que tenía sobre el rostro se levantan- tú Kylie con un chico que no quieres ni te conviene- se dirige a José- y tú... ¡Ay tu ya sabes!- le apunta con el dedo desde el espejo, y su uña brillante hecha toda de manicura fina de piedras brillantes.

- Ahora mismo no estamos para sermones- dice José.

- Claro... Solo espero que no sea tarde cuando se den cuenta de lo que hacen.-

-Kevin se veía muy perturbado- dice Kylie sin darle importancia a los comentarios de la rubia.

Mad se voltea inmediatamente dejando el vestido sobre el lavadero de porcelana.

- Aún te importa Kevin- afirma- lo sabía, sabía que todo esté noviazgo era un fiasgo- Madison suelta una risita llena de ironía- pero que espectáculo más barato diste Kylie.

Madison estaba realmente furiosa, con los ojos abiertos y la cara tintada de exaltación.

- ¿Puedes calmarte?- dice José a Madison, está coloca los ojos en blanco y se voltea- Kylie espero que no estés haciendo esto solo para darle celos a Kevin.

- No, claro que no- Kylie se mueve por amplio baño- yo quiero a Dreik, me ha demostrado que es un buen chico-

-¿Y desde cuándo se hablan ustedes dos?- inquiere Mad.

- Nos conocimos porque coincidimos en una cita médica para suministrarnos dosis de hormonas- Kylie se pierde en recuerdos- fue muy dulce, desde allí intercambiamos números y con todo lo que pasó, decidí darle una oportunidad- está se encoge de hombros.

Madison se muerde los labios y niega con la cabeza.

-No hay modo- dice retóricamente dándose por vencida con el vestido- tendrás que prestarme uno de tus vestidos Kye, mañana mandaré a buscar esto para llevarlo a la tintorería- Mad atraviesa el lugar con vestido en mano y ropa interior puesta- Definitivamente no se que voy hacer con ustedes dos- finaliza.