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José se coloca la corbata, bajo la luz de una bombilla que titilaba, hacía frío, un poco, y los ruidos de la ciudad entraban por las paredes delgadas de aquella pequeña pieza. José y tía Ingrid al fin tenían un techo donde dormír luego de casi semana y media durmiendo en un coche. El lugar era tan pequeño que para ambos pareció una habitación. Había un baño, una cocina a cinco pasos de él, una cama y dos ventanas. También gozaban de un pequeño balcón de hierro que se comunicaba con los demás pisos del gastado edificio, lleno de personas discretas al saludar y vulgares dentro de sus casas. Ya José en su primera noche había escuchado un pleito de una pareja en el apartamento de al lado. Un verdadero desastre, hasta la policía intervino. No obstante, esa noche tía Ingrid preparaba patatas, ensalada, puré y pollo frito. Mientras José intentaba descubrir el secreto del misterioso lazo de corbata.

- Ven te ayudo- dijo luego de un tiempo tía Ingrid- te ves muy guapo- expresa.

- Gracias- dice José.

  José tenía una camisa blanca tradicional, unos pantalones de campana azul claro, zapatos negros oscuros y cuando se coloca el saco, no sé reconoció en el espejo que había en la pared de en frente.

Wow...

Parecía un cantante de los setenta, con el cabello hacía atrás, y las pastillas largas, además de su saco con bordados dorados.

-Has crecido muy rápido cariño, me haces sentir vieja ¿Tengo arrugas?- dice tía Ingrid a su lado.

La mujer más pequeña que José, se miraba en el espejo buscando marcas de expresión, José pensó en esa frase, ¿Había crecido más? Realmente podía permitirse ser más maduro, esos tiempos eran difíciles, en todos los sentidos, y estaba por un mundo en dónde era fácil perderse. No sabía hasta que punto había cometido errores, pero si contaba con sus experiencias. Aquellas buenas y no tan buenas, pero que le dejaron una enseñanza. Allí parado frente al espejo descubrió un José distinto, que ya no sufría de una mirada gacha ni escondía la sonrisa. Había cambiado, tanto que ya ni siquiera el sexo era un tema ajeno a él, no era virgen, y aún más ahora compartía intimidad con un extraño por dinero. Sintió entonces vergüenza que se calaba a su estómago. Se sentí culpable y no sabía de qué venía aquello. Pero se sentí horrible. 

Si mi tía se entera que perdí mi virginidad en un balcón, en una casa ajena... además de lo del sex cam, de seguro me mata...

José mordió sus labios, reprimiendo el ruido de sus pensamientos, y tía Ingrid reconoció ese rostro pensativo.

-Cariño, tenemos tanto tiempo que no hablamos, de nada en absoluto ¿Estás bien? Sabes que puedes contar conmigo para lo que necesites okay-

José está vez suelta sus palabras incapaz de callar.

- ¿Está bien tener sexo a los dieciséis?- dijo fingiendo naturalidad, con los ojos serios, y la cara inexpresiva y encogiéndose de hombros.

Tía Ingrid mueve el rostro algo pensativa y expresa con los ojos muy abiertos.

- Tu sexualidad es tuya, y es un tesoro, debes descubrir que tanto puedes llegar a experimentar. No puedo negarte algo, yo la perdí muy joven y no me arrepiento de ello, pero no deja de ser un error. Estaba tan pequeña que ni siquiera pude yo percatarme de lo que hacía, solo me deje usar, como un objeto- José parpadea mucho los ojos- pero no es tu caso, si te sientes listo, puedes... Hacer lo que tengas que hacer, pero con protección- expresa retóricamente y apuntando con el dedo.

José niega con la cabeza.

- Era solo una pregunta tía Ingrid, no es que yo ya haya... Ni piense...- dice José incapaz de terminar una oración.

- No me des explicación, no la necesito, si te digo que no tengas sexo puede que vayas y lo hagas, es algo que no puedo parar, pero te advierto- expresa- es algo que debes hacer con la persona correcta.

José entonces asiente y sonríe para si mismo, tía Ingrid era un ángel, un ángel que José necesitaba en aquel momento. De pronto el pequeño necesito un abrazo, y se fue hacia ella, y la mujer le apretó y le besó la mejilla.

- Siempre vas hacer mi niño- dijo tía Ingrid a su oído.

I want sex/ Quiero sexo.Where stories live. Discover now